BORUSSIA DORTMUND - REAL MADRID

La petición de UEFA al campeón de Champions: paciencia con las familias para una celebración 'limpia'

El objetivo es poder facilitar la retransmisión de la fiesta sobre el terreno de juego.

Los jugadores del Real Madrid, con la Champions conseguida en París./Agencias
Los jugadores del Real Madrid, con la Champions conseguida en París. Agencias
Jorge C. Picón

Jorge C. Picón

La final de la Champions League se acerca y sus dos protagonistas, Real Madrid y Borussia Dortmund ultiman los detalles. Nada se deja al azar. Desde el protocolo de llegada al estadio hasta el movimiento de cada uno de los futbolistas sobre el terreno de juego. Y cuando uno se refiere a todo es porque incluso lo que puede no llegar a pasar también se controla, como las celebraciones. En este caso, el Madrid está más preparado. Conseguir cinco títulos en los últimos diez años ayuda a estar listo. Sin embargo, hay cambios de guion para cada ocasión y no todos dependen del club blanco.

Este año, en Wembley, la atención se pone sobre las familias de los jugadores. Suele ser habitual que los jugadores acudan a ellas nada más saberse campeones. Introducen a hijos, mujeres, hermanos y padres al terreno de juego para abrazarse, festejar y sacarse su foto de rigor con la copa junto al resto de futbolistas. La UEFA sabe que no puede evitarlo, pero ha pedido cierto control al respecto.

El organismo que maneja el fútbol europeo ha pedido a los dos clubes finalistas dilatar lo máximo posible la entrada de familiares al campo. Quieren unos primeros minutos de celebración 'limpios', en los que la realización de televisión no se vuelva loca buscando a los protagonistas y los periodistas de las cadenas con derechos puedan llevar a cabo sin problemas las entrevistas pactadas por contrato. No se trata de una imposición, pero sí de una petición que se ha trasladado a Madrid y Dortmund.

Courtois, con uno de sus hijos en brazos durante una celebración. Reuters
Courtois, con uno de sus hijos en brazos durante una celebración. Reuters

Muy a favor, los aficionados, olvidados durante estas celebraciones por unos jugadores más dispuestos a celebrar con sus familias que con ellos. En algunos de los últimos títulos blancos, nada más levantarlo, la grada pasaba a convertirse en un mero espectador de lo que ocurría en el terreno de juego, sin la posibilidad de ser parte activa con cánticos y aplausos.

En caso de triunfo madridista, la fiesta ya está preparada. El equipo ha viajado con camisetas y gorras cedidas por Adidas para ponérselas si se consigue derrotar al Dortmund. Junto a los jugadores, numerosos familiares. Cada uno tenía acceso a 40 entradas para comprar y pocos no las han agotado. Junto a ellos, más de 18.000 socios que han tenido la suerte de conseguir una entrada a través del sorteo del club.

La fiesta en Madrid sería el domingo 2 de junio. Recorrido habitual: sede de la Comunidad, Ayuntamiento y un paseíllo con autobús descapotable para culminar en Cibeles. El mismo itinerario que se utilizó para celebrar LaLiga hace sólo unas semanas. Será el último evento oficial antes de romper filas y que los jugadores se marchen a la Eurocopa o de vacaciones.