Piqué firma su sentencia ante el Inter

Gerard Piqué pudo haber jugado ante el Inter su último partido de Champions en el Camp Nou como titular. Las bajas en defensa brindaron al zaguero una oportunidad de oro. La que estaba esperando. Lejos de reivindicarse, el '3' protagonizó una decepcionante actuación que tiene muchos números de convertirse en su sentencia como azulgrana.

La plaga de lesiones permitió al zaguero ser de la partida ante el Celta. En un principio, Gerard apenas tenía opciones de formar parte del once titular en la 'final' ante el Inter. Su buena actuación frente a los vigueses hizo dudar a Xavi. El mismo día de partido, el técnico se convenció de apostar por la experiencia del catalán.

El fútbol habló y en esta ocasión quedó demostrado que a Piqué ya ni siquiera le basta con su calidad. En los últimos tiempos, el defensa ha venido tirando de experiencia para contrarrestar sus carencias, cada vez mayores a la hora de defender a campo abierto. Este miércoles, ante el Inter, Gerard cometió varios errores en jugadas clave. En el remate de Dzeko al larguero, el capitán dejó pasar el balón como si la acción no llevara peligro. En el 1-1 igualó su nivel de apatía anterior, con el agravante de estar rompiendo, y de qué manera, el fuera de juego.

A la postre, el tanto de Barella acabaría costando carísimo a los de Xavi, virtualmente en la cuneta de nuevo -al Inter le basta con vencer al Viktoria Plzen para acceder a octavos-. Habrá tiempo para que el club analice con frialdad una nueva decepción europea, aunque la sentencia de Piqué sí parece ya irreversible. "Si tenéis narices, traed a un central que sea mejor que yo", expresó el '3' en verano cuando el club intentaba que diera un paso al costado. A juzgar por lo que se está viendo esta temporada, eso ya ha sucedido. La solidez que ofrece Gerard está muy por debajo de la que ofrecen Koundé, Araujo, Christensen y Eric.