La retirada en 2024 sobrevuela la cabeza de Eden Hazard

Eden Hazard quiere cumplir su contrato con el Real Madrid, que acaba en 2024. El propio jugador lo reconoció en varios medios tras conquistar la Copa del Rey. "Espero quedarme y cumplir el año que me queda". A partir de entonces, el belga tiene diferentes opciones en las que seguir su carrera, pero en los últimos meses la idea de una retirada ha rondado su cabeza. Y es que, según pudo saber Relevo, valora seriamente colgar las botas el verano que viene, una vez ponga punto final a su etapa de blanco.

Son varios los motivos que refuerzan esta idea que, si bien no está 100% decidida, ha tomado fuerza. No quiere cerrar la puerta a que llegue una gran oferta que le permita volver a disfrutar del fútbol, algo que no ocurre en el Real Madrid. Varios clubes de Estados Unidos o países árabes se han puesto en contacto con su entorno para conocer su situación, aunque sin ninguna propuesta firme por el momento. Más allá de posibles pretendientes, Hazard siente que ha hecho todo lo que podía en el fútbol y retirarse de blanco le motiva especialmente, consciente de que se encuentra en el equipo en el que siempre quiso jugar.

Esa ilusión la ha perdido en las últimas temporadas, en las que ha visto como ni él se sentía al 100% ni Ancelotti hacía por recuperarlo. Con el italiano, respeto absoluto. Hazard nunca le ha reprochado sus decisiones. Sin embargo, la relación se puede calificar como más que fría. Primero Eden reconoció que hablaban poco y luego Ancelotti lo confirmó en rueda de prensa.

Más allá del fútbol, Hazard vive un buen momento, disfrutando de su familia y encantado en Madrid. Su último hijo nació aquí, lo que ha influido directamente en su decisión de no cambiar de club en los recientes mercados. Es un chico muy tranquilo, que no tiene una especial relación con nadie en el vestuario y que se apoya en su familia para todo, la cual ha sido la clave para superar todas las lesiones y malos momentos que ha atravesado desde que llegó en 2019. Ellos son, hoy por hoy, su principal motivación.

En el club preferirían una salida este verano. El atacante se mantiene en lo más alto de la escala salarial blanca y el Madrid hará lo posible por ahorrarse, por lo menos, una parte de la ficha. El problema reside en que Hazard no tiene intención de moverse y que, con contrato en vigor, se antoja imposible forzarle a marcharse.

Suma solo 331 minutos en un año especialmente difícil para él. Los mismos se reparten en nueve partidos. Números incluso peores a los del pasado, en el que alcanzó los 903' en 23 partidos. Ni siquiera en sus mejores momentos el ex del Chelsea ha conseguido hacerse un hueco en la rotación de Carletto, que ha puesto por delante a Rodrygo, Vinicius, Valverde y Asensio como extremos.

Primero fue la retirada de la selección belga tras el Mundial de Catar. La decepción de los red devils en el último gran torneo de su generación dorada precipitó su marcha. Ahora va un paso más allá y valora seriamente retirarse del fútbol, una vez ha conseguido completar su palmarés con ocho títulos en el Real Madrid, entre ellos una Champions League y dos Ligas. Espera seguir hasta 2024 y marcharse con alguno más bajo el brazo. Y existen opciones de que sea directamente al retiro.