El temor de JAS, la mano derecha de Florentino Pérez, que nadie creyó y que le ha acabado dando la razón

Era Navidad y el sorteo de Champions marcaba el ambiente en el Nuevo Bernabéu. El Real Madrid ofrecía su tradicional cóctel con los medios de comunicación, y a la directiva blanca se le preguntaba una y otra vez por el rival que más temían. José Ángel Sánchez, director general y mano derecha de Florentino Pérez, sorprendió a los allí presentes en los corrillos.

El Leipzig. Fue su respuesta al equipo que quería evitar en los octavos de final de la Champions. Y lo repitió una y otra vez sin disimulo. El sorteo, caprichoso, acabó emparejándoles. Y vaya si sufrieron. JAS -como se conoce a José Ángel Sánchez en el mundo del fútbol- llevaba razón. El cuadro de Ancelotti tardó en encontrar el camino en Alemania, y vivieron una primera mitad tortuosa, en la que sólo el gol anulado a Sesko y las continuas paradas de Lunin les dio un respiro.

En la segunda parte Brahim resolvió el embrollo con un gol espléndido, y el portero volvió a disfrazarse de Courtois para sellar un triunfo de mucho mérito que pone los cuartos de final más cerca. El Leipzig compitió como un contrincante espinoso, como preveía José Ángel Sánchez. Un club aparentemente menor que inquietó al Madrid y amenaza con volver a hacerlo en la vuelta.

En el cuerpo técnico -y en la directiva- del Real Madrid no olvidaban su última visita al Red Bull Arena la temporada pasada. Fue el 25 de octubre, en un partido de la fase de grupos, en el que perdieron (3-2) y rebajaron todas sus estadísticas de rendimiento. Esta vez volvieron a padecer la presión y la intensidad de los alemanes. Pese a estar avisados, la salida al campo fue dramática en los primeros minutos.

Los merengues no están cómodos ante estos equipos. Físicos, que aprietan arriba y que salen a la contra. Rivales que no impresionan como los grandes de Europa, al no ser sobre el papel favoritos, y suelen pillar al Real Madrid con la guardia baja. El Leipzig, animado por un Sesko que intimidó arriba, cumplió con las expectativas.

Para la vuelta, también peligro. En vestuario del Madrid esperan que los alemanes salgan sin nada que perder y dan por hecho que jugarán de nuevo a tumba abierta. El Madrid debe estar alerta, ya con un recuperado Bellingham y una plantilla que crece según avanza la temporada. No hay nada decidido aún. Palabra de JAS.