Así vivieron los entrenadores la noche previa a la final de Lisboa: Simeone desveló a su cuerpo técnico y Ancelotti se tomó una copa

Carlo Ancelotti suele decir que las horas antes de los partidos son de nervios. Incluso de miedo. Sin embargo, cómo vivió él la noche previa a la final de la Champions League de 2014 en Lisboa descubre el lado más tranquilo del italiano, cuyo temor suele llegar muy cerca del partido. Todo lo contrario a Diego Pablo Simeone, su homólogo en el Atlético de Madrid, que es puro nervio no sólo antes de los partidos, sino durante toda la semana dándole igual el rival.

El 23 de mayo de aquel año, los dos equipos pasaron la noche en la capital de Portugal. Tras el entrenamiento y la rueda de prensa, acudieron a sus respectivos hoteles. El Real Madrid se alojó en el Tívoli, en pleno centro de la ciudad. A sólo un kilómetro (15 minutos caminando), se hospedaba el Atlético de Madrid, en el Tiara Park Atlantic. A pesar de tener una ubicación similar, se iban a vivir dos realidades muy diferentes en cada uno de los alojamientos.

Por un lado, el Ancelotti más sosegado. El de Reggiolo da una imagen que se confirma en las distancias cortas, incluso en los momentos más tensos. Tras la cena con el resto del equipo, se juntó con su cuerpo técnico en la terraza de su hotel para charlar. No sólo eso, sino que se animó a pedirse una copa, seguramente para rebajar los pocos nervios que por aquel entonces le revolvían el cuerpo. Fueron horas tranquilas, en las que ya había poco que decir o que hacer.

Para el Cholo no fue tan plácido. Tampoco para su cuerpo técnico, al que juntó a altas horas de la madrugada para seguir revisando jugadas. No quería que nada quedase en el tintero y se estudiaron desde cuestiones tácticas de última hora como el balón parado a menos de 24 horas de la final. El argentino prácticamente no pegó ojo atando todos los cabos posibles, sabiendo que ganar o perder se iba a decidir por detalles.

"Todo puede pasar y no puedes hacer nada. Tenemos que trabajar sobre lo previsible y lo más previsible es cómo vamos a jugar, tenemos que trabajar dentro del partido", dijo Ancelotti antes de la final mientras que Simeone aseguró estar más tranquilo de lo que podría parecer: "Vivo la final no con la presión que todos creen, sí con la responsabilidad de darle una alegría a la gente. Mañana no nos vamos a alejar de lo que venimos haciendo, aunque se trata de un partido diferente a los que hemos jugado".

Recientemente han vivido un pique en sala de prensa. El entrenador argentino dejó una declaración polémica tras una decisión arbitral que favoreció al Real Madrid. "Hace 100 años que pasa lo mismo, no sé de qué se sorprenden", dijo. Esto fue respondido por Carletto: "Estas son cosas que se dicen para la galería. Todo el mundo del fútbol es consciente de lo que representa el Real Madrid en estos 125 años de historia. Puede ser que sean espinas que duelen".

Sin embargo, aparte de este cruce de declaraciones, siempre ha reinado el buen rollo y los halagos entre ambos. Se han enfrentado 26 veces, 24 de ellas como entrenadores de Atlético y Real Madrid. El historial marca una igualdad máxima, con nueve victorias para cada uno y ocho empates.

Ambos entrenadores se vieron las caras en Champions una temporada después, en cuartos de final y también con victoria para el Madrid. Desde entonces, no han vuelto a cruzarse en competición europea. Esta tiene aroma a gran duelo. A que el que salga vencedor ganará mucha moral y se convertirá en uno de los favoritos para levantar el título. Seguro que con nervios parecidos a los de aquel aquel 2014...