Las lágrimas de tristezas de Messi se convierten en alegría

En el minuto 65, Messi dijo basta.Por primera vez en su carrera abandonaba una final con Argentina por lesión. No le había ocurrido nunca, ni en Copa América, ni en JJOO ni en el Mundial. El '10' sufrió una lesión muscular en el minuto 65 de partido tras una arrancada para defender y su pierna derecha dijo que hasta aquí llegaba.

El del Inter Miami dejó el campo entre lágrimas y cuando se sentó en el banquillo, rompió a llorar. Nadie lo podía consolar, porque sabía que dejaba a su equipo en deuda, con empate a cero y tras tener una oportunidad clara en el primer tiempo tras un gran pase de Di María.

El argentino, ya en la primera parte, tuvo un choque con Santiago Arias y le tocó pedir asistencia. Entonces se dobló el tobillo, los médicos lo atendieron y pudo continuar. El descanso estaba muy cerca y el argentino aguantó, volviendo al terreno de juego en la segunda mitad sin muchos problemas.

Pero a falta de poco menos de media hora, Messi no pudo continuar. Desde el primer momento en el que le pegó el tirón, se dio cuenta que ya no podía continuar en el terreno de juego. Los médicos entraron en el campo y automáticamente pidieron el cambio, por lo que Nicolás González se preparó y entró en el terreno de juego. Messi se despedía de la final de la Copa América de la peor manera.

Las imágenes eran muy duras. Messi con hielo en el tobillo y unas imágenes con el pie hinchado que recordaban a aquel tobillo de Maradona en Italia 90. El futbolista no podía ni ponerse de pie, sufría en el banquillo argentino. Pero las lágrimas de Messi se convirtieron en lágrimas de alegría tras el gol y abrazo de Lautaro Martínez con él.

El futbolista fue la gran figura de la celebración. Todos se echaban fotos con él, todos querían una imagen con el '10', que podría llegar a jugar otro Mundial en 2026. Pero ahora le toca disfrutar un nuevo título con la albiceleste, el cuarto consecutivo.