OSASUNA 2- SEVILLA 1

La bandera de Herrera, ovación a Jagoba y corro de los jugadores: así fue la celebración en El Sadar

El estadio navarro explotó con el pitido final y vivió una celebración tan esperada como improvisada. Chimy y el técnico se llevaron los mayores cánticos.

Herrera ondea una bandera tras conseguir el pase a semifinales./EFE
Herrera ondea una bandera tras conseguir el pase a semifinales. EFE
Patxo De la Rica

Patxo De la Rica

Antes de que De Burgos Bengoetxea pitase el final del partido, todo el público se puso en pie. Como leones enjaulados, esperando la señal. Y en cuanto se escuchó el primero de los pitidos, el Sadar estalló. El júbilo era máximo, tras tantos años de espera. Era momento de celebrar la victoria ante el Sevilla y una clasificación a semifinales por quinta vez en su historia, 18 años después de la última vez.

El Sadar estalla con el final del partido. Patxo de la Rica

Los suplentes saltaron al campo y se abrazaron con Torró, Budimir o Rubén García, Abde cayó al suelo, en solitario, mientras en el área navarra se vivían diferentes celebraciones, cada una de ellas más apasionada que la otra. Aridane se abrazaba en el suelo con David García, mientras Sergio Herrera enloquecía en el fondo, celebrando junto a los seguidores rojillos y tomando prestada una bandera gigante. El portero, alentado por los miles de aficionados, recorrió medio campo agitando el estandarte, con tanta fuerza que se le acabó rompiendo.

La megafonía reproducía los clásicos del Sadar. Las canciones de guerra. Las del comienzo del partido, las de los goles y las de los grandes días. Como este, que ya es inolvidable para la parroquia osasunista. "Han jugado con nosotros el partido. Nos han acompañado en todo momento, y cuando más les hemos necesitado también nos han llevado hasta la celebración final. Han sido clave", declaró Jagoba Arrasate minutos después de celebrar en el campo la clasificación.

Ovaciones

Tras el éxtasis de los primeros minutos, toda la plantilla se juntó en el centro del campo para saltar en corro, como un equipo. Herrera, el más animado de todos, fue el primero en salir de ese círculo y correr hacia el fondo donde se sitúan los aficionados más ruidosos, lanzándose al suelo al llegar al área, acompañado de sus compañeros.

Los jugadores celebran la clasificación.Patxo de la Rica

Desde aquel fondo comenzaron una vuelta de honor, recibiendo el cariño de todas las zonas del renovado estadio rojillo. Los aplausos fueron para todos, pero Chimy Ávila se llevó dos ovaciones consecutivas, con todo el campo coreando su nombre. Y, cómo no, también el conductor de este equipo: Jagoba Arrasate. El entrenador, justo antes de abandonar el campo, también recibió el cariño de su afición.

En rueda de prensa, Arrasate agradeció el comportamiento de los suyos con cierta ironía: "Había mucha previsión de frío, pero yo no he pasado nada de frío. Ha sido muy caliente. Sobre todo cuando más le necesitábamos, tras el palo duro del gol de En-Nesyri. Pero teníamos la mejor medicina, que es nuestra gente". Mientras el entrenador hablaba en rueda de prensa, se escuchaba la celebración de los futbolistas por un lado de la sala y, por el otro, el de una afición que festejaba en las calles. 18 años después, Osasuna buscará repetir final de Copa.