El Sevilla gana sin alardes al Astorga y evita intensificar su crisis

Jugaba el Sevilla ante el Astorga, uno de esos rivales de quinta categoría que quedaban en el cuadro. Los de Joselu Lagos llegaban al partido después de 9 jornadas sin ganar, decimocuartos en su grupo e intentando eludir los puestos de descenso. Unos ingredientes que años atrás hubieran supuesto motivos suficientes para pronosticar que el Sevilla de los títulos solventaría la papeleta. Aunque este año son argumentos para que los sevillistas anden intranquilos. Sin alardes pero sin complicarse, los de Nervión vencieron 0-2 y se agarran a la Copa del Rey.

Llegaban los sevillanos a tierras leonesas con la soga al cuello y tras dos varapalos consecutivos en Champions y LaLiga, ante el PSV y el Villarreal respectivamente. Las once bajas por diferentes lesiones no dejaban a Diego Alonso mucho margen para las dudas y optó inicialmente por un once plagado de suplentes. En los tópicos coperos se suele decir en este tipo de eliminatorias que es una oportunidad para aquellos que tienen pocos minutos y puedan reivindicarse. En esta ocasión ni eso.

Porque Januzaj, que provocó el penalti con el que abrieron el marcador, ni está, ni se le espera. Ni quiere. Gattoni hizo tres malas entregas en los primeros 20 minutos del partido y hombres como Rafa Mir o Joan Jordán, pasaron casi desapercibidos. No fue hasta los 22´ cuando los de Diego Alonso hicieron su primer remate a puerta. Sólo cuatro minutos después, Alex Matos derribaba a Januzaj y Sergio Ramos ponía el 0-1 en el marcador desde el punto de penalti. De ahí al descanso fueron pasando los minutos, entre las imprecisiones andaluzas y el ímpetu leonés.

Pudo ser peor en el segundo acto. La ocasión de Ivi Vales en el 67´, rematando al primer palo un buen centro y obligando a Dmitrovic a hacer una buena parada, seguramente escoció más porque sólo un minuto después, Gattoni, de un gran remate de cabeza tras un suque de esquina de Jordán, consiguió el segundo tanto que permitió tener cierta tranquilidad hasta el final del duelo. Y fue así porque Peláez cruzó en exceso el balón cuando se plantó sólo ante el guardameta serbio.

Sergio Ramos portó el brazalete de capitán por primera vez desde que regresara al Sevilla el pasado mes de septiembre. El camero fue designado junto a Rakitic, Jesús Navas y Fernando, por intervención del propio club y de su entrenador Diego Alonso. Joan Jordán, titular también en el encuentro copero, fue el futbolista que cedió su capitanía, algo que obviamente no le ha sentado demasiado bien. Ante el Astorga, volvió a demostrar su liderazgo y se le vio constantemente dando instrucciones a sus compañeros.

Ramos, además, anotó de penalti el primer gol del partido, su segundo en esta nueva etapa en su casa. El primero lo consiguió ante el PSV, en la quinta jornada de la Champions. Con ese tanto, logró igualar a Piqué y Roberto Carlos como defensores más goleadores en la competición. Con el pase, el central mantiene intacta sus opciones de llegar lejos en una competición en la que los dirigentes nervionenses tienen puestas muchas esperanzas este año. El Sevilla evita el sonrojo y Diego Alonso consigue su segunda victoria consecutiva en el torneo del KO.