El silencio del Metropolitano por el VAR y una posible roja a Azpilicueta que recordó a las de Pablo Barrios

Minuto 9 de partido y primer momento de silencio en el Estadio Metropolitano. No fue por un gol del Barcelona, no. Fue por una patada de Azpilicueta a Raphinha, que recibió de espaldas y el hoy lateral/central del Atlético le avisaba que aquí estaba con un golpe en el gemelo con los tacos.

Munuera Montero no dudó y le sacó la tarjeta amarilla, pero desde el VAR llamaron al colegiado y en ese momento los aficionados del Atleti sufrieron no uno, si no dos 'deja-vù': los de las rojas de Pablo Barrios ante el Bayer Leverkusen y ante el Celta en el Metropolitano. Aquellos días el canterano fue expulsado y el equipo de Simeone tuvo que remar desde atrás, consiguiendo un resultado positivo, pero el miedo se había apoderado del coliseo rojiblanco porque jugar con 10 contra este Barça hubiera sido duro.

Finalmente, tras unos minutos de consulta, el colegiado decidió mantener la decisión. No dudó a pesar de la presión de ambos equipos, que estaban a los lados del monitor gritando, uno que sí era roja y otro que no era roja.

Lo que sí sucedió después fue una amarilla para el Cholo Simeone, que aplaudió la decisión de manera más o menos irónica, intentando animar a la gente y el colegiado le fue a decir algo y le mostró la cartulina.

Durante unos minutos, la gente sufrió, pero finalmente el partido seguía con 22 jugadores. Munuera Montero no quería que el encuentro se le fuese de las manos y en todo momento le pedía a los jugadores colaboración.