La situación de Nacho molesta en el vestuario del Real Madrid

La situación de Nacho escuece dentro del vestuario del Real Madrid. El canterano blanco, a pesar del gran rendimiento que ofreció el curso pasado, ha disputado esta temporada sólo 642 minutos, lo que le sitúa como el 16º de la plantilla blanca. Un dato que, en principio, no extraña puesto que es un jugador que durante su carrera nunca ha terminado de ganarse la titularidad en el equipo madridista. El problema llega al compararlo con Rüdiger. El alemán ha jugado más del doble de minutos (1.435') que Nacho, un protagonismo al que no ha acompañado con rendimiento, porque ha arrojado dudas en más de un partido.

Esta circunstancia fue todavía más llamativa en la Supercopa de España. Nacho acudió una vez más al rescate contra el Valencia en una posición que no es la suya, porque Mendy arrastraba molestias y le tocó actuar como lateral izquierdo. Después, durante el partido, Militao tuvo que retirarse tras un golpe en la cabeza y el canterano blanco pasó al centro de la defensa. En ambas demarcaciones fue el más destacado de la zaga en semifinales.

A pesar de ello, en la final frente al Barcelona se repitió una decisión que ya no sorprende en la caseta, pero que sí incomoda: Rüdiger fue elegido como titular por delante de Nacho (Alaba estaba lesionado). El alemán, además, quedó señalado porque cometió varios errores de bulto. Esto ha provocado que este malestar entre los compañeros crezca todavía más, especialmente por parte de los pesos pesados que llevan tantos años al lado de Nacho, porque no comprenden que un futbolista que ha ganado tantos títulos con el Real Madrid se vea relegado al banquillo casi por decreto, aunque su rendimiento en los últimos partidos haya estado por encima del mostrado por Rüdiger.

Nada hay contra el alemán, al contrario. Es un compañero que ha caído de pie en el vestuario madridista desde el primer día, haciéndose querer por su buen humor y compromiso constante en cada sesión. Es algo puramente deportivo: que juegue quien esté mejor en los entrenamientos. Y eso, en bastantes ocasiones en lo que va de temporada, no ha sido así.

Esta es una de las heridas abiertas que deja la Supercopa de España, porque existe la sensación de que uno de los principales motivos de la mala racha actual del Madrid es que se ha perdido la competencia interna. En la plantilla hay unos roles ya establecidos, casi inamovibles. Los titulares han bajado el nivel porque no tienen miedo a perder su puesto y los suplentes bajan los brazos ante la frustración por no tener oportunidades. Nacho refleja este problema mejor que ningún otro jugador en la plantilla…

Además del malestar en los compañeros, esta circunstancia también enfada al propio Nacho, a quien le gustaría sentirse más valorado en un club donde ha pasado toda su carrera. Esta falta de protagonismo con Ancelotti va acompañada del poco interés que ha mostrado el club hasta el momento por su renovación, hasta el punto de que el defensa es ya libre de firmar por cualquier otro club (termina en 2023). El Madrid todavía no le ha hecho ninguna propuesta formal para renovar…

Por tanto, vienen meses de muchas dudas para Nacho, que siempre ha soñado con terminar su carrera de blanco pero que cada vez está más en el aire esa opción. Hay clubes europeos que pretenden firmarlo (Milan y Wolverhampton ya se lo han transmitido), aunque de momento, si no continúa, al canterano le seduce más la opción de hacer las maletas rumbo a Estados Unidos para no tener que enfrentarse nunca a su Madrid. Lo que Nacho tiene claro, renueve o no, es que va a seguir disponible, al 100%, hasta el último minuto, en la posición que haga falta…