Un desaparecido Brahim se estanca contra Mauritania en un amistoso gris

Partido irreconocible el vivido en Agadir entre la selección de Marruecos y la de Mauritania, por muchos motivos, aunque uno resalta por encima del resto. En este mismo estadio, hace apenas 4 días, Brahim Díaz debutó con los leones del Atlas. El malagueño firmó un partido sublime, con mucha clase en el campo, emoción al escuchar el himno y alegría de su abuela incluida, pero esta vez el resultado ha sido diametralmente opuesto.

El partido lo tenía todo para volver a ser una exhibición de Brahim y los suyos, como lo fue el encuentro contra Angola. Nada más lejos de la realidad, la primera mitad estuvo marcada por la lucha en el centro del campo y la dificultad de Marruecos para romper la sólida defensa de Mauritania. A pesar de tener el control de la posesión, Marruecos luchaba por encontrar espacios en el área rival, con Mauritania bien organizada defensivamente y esperando pacientemente por oportunidades para contraatacar. Los intentos de los leones del Atlas por desequilibrar el marcador fueron neutralizados una y otra vez por la defensa del combinado visitante, que mostró solidez y determinación en cada enfrentamiento.

El partido continuó con Marruecos buscando romper el empate en el marcador, mientras que Mauritania tiraba de picardía para perder tiempo e ir rascando segundos de oxígeno. De esta manera, y sin mucho cambio en el partido, el encuentro llegó 0-0 al descanso y así seguiría hasta el final del partido.

Eso sí, los de Regragui mostraron mucha mejor cara en la segunda mitad, donde Brahim se vio más cómodo entre líneas y futbolistas de LaLiga como En-Nesyri o Chadi Riad tuvieron un impacto considerable. Siendo este último el que más cerca, se quedó de sumar el primer tanto de los locales con una doble ocasión en el minuto 60.

Salvo el peligro del jugador verdiblanco, el resto de futbolistas a las órdenes de Regragui no pusieron en apuros a Mauritania durante esta segunda mitad. No funcionaron ni las jugadas ensayadas entre Brahim y Achraf Hakimi, las finalizaciones del combinado norteafricano eran erráticas y los pases inconexos. En general, el público desplazado vio a una Marruecos gris, muy lejos de su nivel mostrado ante Angola, donde fueron claramente superiores pese al ajustado resultado (1-0).

Para colmo, el partido se cerró con un gol de la selección marroquí. El autor, Achraf Hakimi, finalizó una jugada completamente solo tras superar al guardameta rival, pero lo hizo en posición antirreglamentaria y, de esta forma, el colegiado se vio obligado a anular el que hubiese sido el tanto de la victoria en el minuto 94. Con el 0-0 ya sellado por el pitido final, las cámaras buscaron al que fue el hombre del partido ante Angola, Brahim Díaz, quien esta vez estuvo desaparecido.