España visitará México y EE.UU. para disputar dos amistosos justo antes del Mundial 2026

La selección española goza ahora mismo de un estatus envidiable en el 'mercado internacional' de los amistosos. Sus galones como campeona de la Nations League y ya clasificados para la Eurocopa hacen relativamente sencillo encontrar buenos rivales para encuentros no oficiales que, además, terminan siendo muy rentables para la RFEF y sus patrocinadores.

Uno de ellos, el más reciente, es Stage Front. Tal y como avanzó Relevo, entre este gigante de la organización de eventos y la Federación ya se han asociado para elaborar un plan de amistosos fuera de España y, dentro de esos objetivos hay dos marcados como prioritarios: jugar contra los anfitriones del Mundial 2026, México y Estados Unidos, en alguno de los mejores estadios que albergarán ese torneo.

Además de cerrar la disputa en marzo de los partidos contra Colombia, en Londres, y Brasil en el Santiago Bernabéu (cerrado el pasado mes de junio) la RFEF sigue organizando un plan de preparación deportiva junto con Stage Front para encontrar rivales de entidad en enclaves en los que, además, puedan sacar beneficio económico de los mismos.

Estos dos encuentros son un indicador del nivel de la Selección española, y el nivel que tiene tanto en el plano deportivo como comercial para el resto de países. Además de campeona de la Nations League, España ya ha sido confirmada como una de las organizadoras del siguiente Mundial, el de 2030, junto a Portugal y Marruecos.

El hecho de que dos de las anfitrionas de la edición de 2026 vayan a culminar su preparación para 'su' Mundial contra España es un gran síntoma. La selección, por su parte, tendrá que ganarse su clasificación para esa Copa del Mundo en la fase de grupos que se sorteará una vez finalice la Eurocopa de este verano, en Alemania.

Se trata del primer Mundial que se disputará con 48 selecciones, en lugar de 32 como hasta ahora, por eso la fase final de la preparación de las selecciones será muy importante en el plano físico, además de ser óptimo para la aclimatación de los futbolistas al ambos países donde, poco después, tendrán que competir por una estrella en su camiseta.

Además de ser las anfitrionas, y sobre todo en el caso de la mexicana, se da la situación de que son siempre de las hinchadas más entusiastas de los grandes eventos internacionales. Tal y como ocurrió en Catar el año pasado, suelen viajar masivamente y aportar un colorido espectacular al torneo. Jugando en casa, y cerca del Mundial, los dos amistosos que está preparando la selección española en México y en EEUU prometen ser un auténtico show tanto en las gradas, como sobre el césped.