Albania va hoy a muerte con España: "Nuestra opción pasa por que lleguen relajados"
Los de Silvinho quieren encontrarse una selección que ya sea primera de grupo, plagada de suplentes y sin presión.
Hamburgo (Alemania).- Las caras de los jugadores croatas al abandonar el Volkstadion de Hamburgo eran de todo menos afables. Albania acaba de empatarles y hasta gente con una amabilidad contrastada como Ante Budimir o Luka Modric prefirieron esprintar y meterse en el autobus antes que charlar con nadie. Bueno, para ser justos, el madridista sí dio la cara brevemente ante la prensa de su país. Pero está muy claro que el empate dolió mucho en el grupo y que en su vestuario, ayer, se escucharon más que palabras.
La otra cara de la moneda estuvo en la selección albanesa, claro: llegan al último partido de la fase de grupos con las mismas opciones (más, en realidad) que Croacia y después de haber logrado un 2-2 que ya forma parte de la historia de su país. El papel albanés en esta Eurocopa ya está siendo muy destacable: una marea de aficionados superactivos que ayer aguantaron el pulso sin problemas a los croatas en la grada.
Uno de los héroes albaneses, Qazim Laci, que marcó el primer gol, narraba así a Relevo su sensación nada más marcarle el 1-0 a Livakovic: "No puedo explicarlo. De verdad que deberías sentirlo en este momento. Ha sido algo fantástico pero tampoco lo he podido disfrutar mucho porque a los pocos segundos ya tenía que estar concentrado de nuevo para seguir trabajando. Un gol así, en Albania es especial. Para mí es un orgullo enorme por todo lo que he trabajado en esto años".
Hoy, toda Albania "es" española. Un buen resultado de los nuestros con Italia sienten que les puede facilitar mucho el trabajo de cara al definitivo partido del próximo lunes 12 (21.00 horas RTVE). "Vamos a esperar el resultado. Espero que España gane bien, sería muy bueno para nosotros. Así quizá contra nosotros podríamos decir que sería algo más fácil, estando ellos ya clasificados y relajados. De todas maneras aquí partidos fáciles no hay ninguno. Hay que luchar", explicó el mediocentro del Sparta de Praga. "No sé si tengo algún favorito de España pero, en mi posición, diría que Rodri. Sí, definitivamente Rodri. Me cambiaría la camiseta con él".
Su seleccionador, el exazulgrana Sylvinho, no quiso alimentar demasiado esta clase de ideas y prefirió centrarse en lo logrado: "Estoy muy orgulloso de mis jugadores. Todo el país lo está. Tenemos que aprender a disfrutar de estos momentos y no pensar mucho más allá. Cada punto que logremos aquí es muy importante en nuestras vidas, yo creo que el partido de hoy lo recordaré toda la vida", aseguró. "Nuestra mentalidad es ayudarnos entre nosotros, es la clave de nuestro equipo", había subrayado también Laçi previamente.
La realidad para ellos es que España, con un punto hoy ante Italia, está virtualmente clasificada. Con la victoria serían primeros de grupo y sólo dos derrotas, mañana y contra Albania podrían hacer que se quedasen fuera de la ronda de octavos.
Además es que ese tipo de partidos que muchas veces se considera "descafeinados", tienen un peligro evidente para los rivales que sí llegan con urgencias: implica jugar sin presión, con jugadores menos habituales pero que están deseando lucirse y ganar minutos en el resto del torneo y que viven ese partido como la última oportunidad de darle la vuelta a la situación.