Djokovic coge un avión desde Wimbledon y sorprende a Serbia con una aparición inesperada en la Eurocopa

Novak Djokovic ha colgado la raqueta en Inglaterra para irse directamente a Múnich. El tenista serbio, que continúa con su particular Tourmalet para estar en Wimbledon, se subió este martes a un avión después de ejercitarse sobre la hierba londinense para seguir en directo el duelo entre Dinamarca y Serbia de la tercera jornada de la fase de grupos de la Eurocopa. Con todo por decidir, Novak no quiso perderse el decisivo partido de su selección.

Como una estrella. Así fue tratado el número dos del mundo cuando los aficionados se percataron de la presencia de Djokovic en el Allianz Arena. Con americana, camisa y unos chinos color beige, el tenista siguió desde el césped el entrenamiento de los de Dragan Stojkovic. Atendiendo a los medios de comunicación, Novak fue abrazando uno a uno a los jugadores antes de que estos se metieran en el túnel de vestuarios.

"Estoy muy contento de estar aquí y poder disfrutar de este maravilloso ambiente y apoyar a los futbolistas serbios", señaló Djokovic a un medio de su país. "Si el público entra, yo también entraré", respondió, en tono de broma, al ser preguntado si invadiría el césped junto a la multitud en caso de que Serbia lograra la victoria y se clasificara para los octavos de final.

Concluido su tiempo en el verde, Djokovic se subió al paco de autoridades del Allianz Arena para seguir el choque. Enfundándose la camiseta de su país, al serbio se le vio especialmente emocionado cuando empezó a sonar el himno de Serbia.

Centrado en volver a la competición después de lesionarse la rodilla en su victoria en los octavos de final de Roland Garros ante el argentino Francisco Cerúndolo, Djokovic sigue con su puesta a punto. Probándose este martes en un partidillo contra Tiafoe, las sensaciones están siendo buenas.

Wimbledon arrancará el próximo 1 de julio, pero el tenista no se lo ha pensando dos veces para coger un vuelo y plantarse en Múnich.