EUROCOPA | ALBANIA 0 - ESPAÑA 1

El uno a uno de la Selección, de menos a más: Laporte lidera, Raya se presenta... y Oyarzabal no arranca

El central, el único que repitió titularidad, volvió a completar una primera parte notable. El culé aportó vigor y Zubimendi, el orden.

Fermín salta al campo ante Albania. /RFEF
Fermín salta al campo ante Albania. RFEF
Manuel Amor

Manuel Amor

Düsseldorf (Alemania).- La Selección española puso la guinda a una fase de grupos inmaculada con su triunfo ante Albania (0-1), el tercero de una liguilla saldada con números de récord: pleno de triunfos, cinco goles a favor y ninguno en contra. Las sensaciones, pese a que De la Fuente hizo 10 cambios y dio paso a los meritorios, volvieron a ser buenas. Laporte lució a gran nivel, Olmo se reivindicó, Ferran sumó otro gol a sus asombrosas cifras y suplentes como Grimaldo, Fermín o Zubimendi pidieron paso. Así fue, ordenados de menos a más en función de su rendimiento, la actuación de los 16 internacionales de La Roja que participaron:

Oyarzabal: Pasó de puntillas. Empezó en la banda izquierda, a pie natural, y De la Fuente le pasó pronto a la derecha. El cambio no sirvió para reactivarle. Debe dar más.

Le Normand: Salió en el descanso para dar descanso a Laporte. La única preocupación era que no viese amarilla (una tarjeta le hubiese hecho perderse los octavos) y cumplió con su cometido. Aseado.

Joselu: Su trabajo, que nunca falta, no se tradujo en oportunidades. Sólo amenazó de cabeza en el 12' y apenas conectó con los extremos. Todos los ojos están puestos en él por su inminente traspaso al Al-Gharafa catarí. Se marchó sustituido en el 72'.

Morata: Suplió al gallego y no anduvo lejos de marcar. Fijó a los centrales, oxigenó el juego y abrió pasillos para Lamine, con el que combina de maravilla.

Vivian: Un muro en el uno contra uno. Presumió de contundencia y ganó a Rey Manaj cuando el exdelantero de Albacete o Granada le retó a la espalda. Su rapidez es una garantía: sólo los hermanos Williams han alcanzado una velocidad punta superior a la suya esta temporada en el Athletic. Se estrenó en una Euro.

Jesús Navas: Morirá con un guante en el pie. Colocó un par de centros que derivaron en ocasiones de Merino y Joselu y se sumó con frecuencia al ataque. Celebró con la capitanía que se ha convertido en el jugador de más edad en disputar un gran torneo con España (38 años y 216 días), superando a Cañizares (36 y 248). Falló en algún despeje.

Merino: Siempre aporta. Rozó el primer gol con un cabezazo en el 12' y se entendió con Olmo a la hora de alternarse en las llegadas al área. Perdió un par de balones que acabaron en transición, pero lo compensó con recuperaciones (el mejor en esa faceta) y su poderío en los duelos (los venció todos por arriba). Actuación completa.

Lamine Yamal: De la Fuente le sacó en el 72' y temió por su integridad después de que recibiese un par de entradas duras. A él le dio igual: encaró una y otra vez y dejó algún detalle que despertó el 'oh' en una grada repleta de albaneses. Sano para octavos.

Fermín: Es uno de los únicos tres que siguen sin salir de inicio -con Remiro y Baena- y dejó patente que quiere más. Hizo de enganche, mordió a los cerebros albaneses y mejoró los balones que pasaron por él. Su energía se antoja necesaria.

Grimaldo: Calidad ofensiva superior a la de Cucurella. Generó mucho con sus pases desde línea de fondo y con un recital de caramelos desde la banda marca de la casa. Un recurso de lujo para cuando los partidos se atasquen. No pasó apuros atrás.

Raya: Evitó el empate con un paradón a remate de Asllani en el 45' y con otra intervención magistral ante Broja en el 63'. Hace justo una década selló su cesión al Southport, equipo de la quinta división inglesa, y hoy ha debutado en una Eurocopa. Premio a la fe. Se presentó, por fin, ante los que todavía no le conocen en España. Impecable con los pies y en el apartado aéreo.

Ferran: MVP para la UEFA. Sus números con España son de escándalo: 20 goles en 44 partidos, casi uno cada dos. Definió de forma excelente en el mano a mano ante Strakosha y lo celebró con euforia. Pudo hacer el segundo con un testarazo a escasos segundos del descanso. En otros momentos, sobre todo en las entregas, le faltó finura.

Zubimendi: Se ofreció siempre como primer apoyo en la salida, cortó un par de contragolpes peligrosos... ¡y tuvo un 100% de acierto en el pase en la primera mitad! Puro equilibrio. Está preparado, aunque suene a palabras mayores, para ser el reemplazo de Rodri en las ausencias del madrileño.

Laporte: De lo mejor. Inició la jugada del 0-1 con un pase fenomenal a Dani Olmo y se impuso continuamente en defensa. Casi todas las jugadas empiezan en él. Ha callado a los que dudaban de su nivel y su estado físico. De la Fuente le retiró al descanso para dosificarle (acaba de superar una contractura) y que esté fresco para las eliminatorias.

Olmo: Le ha bastado una titularidad para evidenciar por qué De la Fuente confía tanto en él: ve cosas donde otros no y permitir que se gire es una temeridad. Asistió a Ferran en el único tanto del choque con un balón medido al espacio. Su trabajo en la presión, algo en lo que incide de forma obsesiva el seleccionador, gustó tanto como sus conducciones escurridizas y su capacidad para romper líneas.