Toda Europa vuelve a estudiar a la Selección tras copiar su 'Modelo de los 114 ojos' en Las Rozas
Las federaciones UEFA visitaron a la RFEF hace una década para empaparse del tiqui-taca. Hoy, con Nico y Lamine volando, la Nations en el bolsillo y cierto favoritismo, ya sueñan con otra cita.
Colonia (Alemania).- Europa, e incluso el mundo entero con permiso de la Copa América, mira estos días a la Eurocopa en general y a la Selección en particular. Sus victorias, su estilo y, sobre todo, su nuevo estatus llama la atención de todo el planeta fútbol. Aficionados, periodistas, entrenadores y hasta jugadores se preguntan (o nos preguntan) a diario qué ha pasado para que De la Fuente haya resucitado de tal manera a su equipo año y medio después de aquel tortazo en Catar frente a Marruecos. Hoy de nuevo, como en el cuatrienio glorioso 2008-2012, se palpa la admiración. Pero, realmente, ese exhaustivo análisis y la simpatía por el modelo de España no es nuevo ni jamás se esfumó.
Ahora que España se pasea por Alemania y que va siendo la comidilla de todas las selecciones rivales, conviene recordar cuando hace ahora una década las distintas federaciones europeas, con la venia de la UEFA, propusieron visitar Las Rozas para que alguien les explicara cuál era la pócima mágica que se cocinaba en la Real Federación Española de Fútbol. Un brebaje con el que nadie daba para acumular tantos títulos y lograr que la cantera fuera tan productiva, llegando a replicar de abajo a arriba esos éxitos con una forma de jugar unificada y patentada. La RFEF, igual que también aceptó invitaciones en la otra dirección para visitar a otras federaciones con el objetivo de compartir información y estudios, fue recibiendo durante meses, de tres en tres, a las invitadas que lo solicitaron.
Ginés Meléndez, en aquellos años coordinador de todas las categorías inferiores de España y director de la Escuela de Entrenadores, fue quien hizo de profesor, consejero y guía. Su excelente relación con UEFA (luego fue informador técnico muchos años) le avalaba. Y aunque los mejores secretos jamás se desvelaron, ni lo hace ahora retirado en Albacete tras dejar la casa en 2019 y hacer sus últimas labores profesionales en Armenia, sí que la RFEF abrió sus puertas de par en par. El objetivo era mejorar el nivel de toda Europa, poner en valor lo que se estaba haciendo con la base y, ya de paso, sacar pecho con orgullo. Hoy, muchos directivos que siguen en activo aún se acuerdan de aquellos días porque los equipos actuales que hoy compiten por el trono se originaron en gran parte de aquellas revelaciones. Empezando por la Roja: De la Fuente empezó como seleccionador en 2013 y desde entonces no ha hecho más que continuar el modelo e ir dotándolo de nuevos matices.
"Las cosas no suceden por casualidad. En la RFEF siempre se ha contado mucho para la Absoluta con seleccionadores que provenían de las categorías inferiores. Y eso se nota mucho. Mira ahora con Luis. Los conoce a todos de la Sub-19. Y eso es una gran ventaja. Los tiene a todos en su mano y, como es un gran entrenador que además no genera nunca conflictos, pues las cosas van como van", destaca Ginés en conversación telefónica con Relevo. Y añade: "Esas cosas, y la manera de organizar todo el fútbol nacional, a través de las territoriales, llamaba mucho la atención a las federaciones internacionales que estuvieron aquellos días con nosotros. Alemania prestó especial atención sobre lo que les contábamos, pero vinieron a la Ciudad del Fútbol casi todas los países que son miembros de UEFA".
Alemania, a la cabeza
Alemania estaba muy empeñada en no perderse ni una clase. Después de su fracaso en la Eurocopa de 2004, los directivos de la Mannschaft empiezan a replantearse que había que cambiar el modelo. Haciendo lo mismo no se podían lograr resultados diferentes. Su equipo campeón estaba envejeciendo, no salían tantos buenos valores como antes y había rivales que, una y otra vez, les superaban en las categorías inferiores. Como España. Alemania replanteó todo el trabajo de cantera y lo que hizo fue mirar claramente a la Península. Analizar, copiar e implantar. Sin disimular. Y hasta pidiendo ayuda.
Ginés explica el motivo: "A partir del año 2008-2009 empiezan a materializarse en la Absoluta de España los logros que estábamos teniendo en la base. La Eurocopa llegó en 2008 (la segunda para España) y, a partir de ahí, mediante un programa técnico de la UEFA, empezaron a visitarnos. Venían muchas veces en grupos de dos, tres o cuatro, y estaban obligados a traer 10 técnicos en su expedición, de todas las categorías, y un traductor. Eran 11 y a algunos se les dejó venir con 12. Yo los recibía y les hablaba de temas específicos. Tres en concreto: formación de entrenadores, fútbol juvenil y fútbol femenino".
"Yo los recibía y les hablaba de temas específicos. Eran tres en concreto: formación de entrenadores, fútbol juvenil y fútbol femenino".
Fue coordinador de la cantera de la RFEF hasta 2019"Yo me encargué de las explicaciones de todo lo relacionado con el fútbol masculino. Y a partir de que ganásemos el Mundial en 2010, pues estos encuentros fueron a más, claro. Recuerdo cuando me tocó organizar el Congreso Internacional en el Hotel Iberostar con FIFA y UEFA. Todos los países europeos vinieron a Las Rozas a aprender de nosotros y eso era un motivo de orgullo. La gente estaba encantada. Todos querían saber cómo formábamos a los entrenadores. De hecho, en esa época es cuando llega el 'boom' y se rifaban a nuestros entrenadores por todo el mundo. Les explicábamos durante tres días cómo era la formación y ellos más tarde introdujeron muchas cosas en sus programas", recalca el albaceteño.
"Pero había un tema fundamental que todavía les apasionaba más: la formación de los jóvenes", resalta Ginés. Y añade: "Todo el mundo quería saber qué había detrás de esas Eurocopas y el Mundial ganados. Les llamaba mucho la atención el proyecto y el proceso. Nosotros también íbamos a aprender a otros países, claro. Pero todo el mundo donde quería ir era a España. Y ellos siempre decían que por qué éramos tan buenos en los pequeños, que ganábamos siempre. Y lo de encadenar Eurocopa, Mundial y Eurocopa no lo había hecho nadie, nada más que nosotros. No parábamos. Me llamaba Ángel Villar y me decía 'Tigre, pásate por mi despacho'. Y subía y allí había otro requerimiento de UEFA para que recibiéramos a más países. No parábamos. Nos los agrupaban por idiomas. Y a la cabeza estuvieron Alemania, Francia e Inglaterra. Con los ingleses llegó a viajar el mismísimo presidente, que no era lo normal. Y se quedó aquí los tres días de talleres de trabajo porque lo quería saber todo y quería ver todo de primera mano".
La Federación armó en esos años un reputado grupo de expertos para recibir a estos países y ayudar a Ginés en la formación. Cuando había que hablar del fútbol juvenil, ahí estaba Manel Casanova, del Espanyol, que en paz descanse. Su club, en esos momentos, estaba al nivel del Barça. Del club blaugrana solía acudir a Madrid Joan Vilà y Álex García. De Atlético, Amorrortu. Del Real Madrid, Giráldez. Del Sevilla, Pablo Blanco… "Todos me ayudaban y ellos explicaban su modelo de formación de jóvenes. Y yo les explicaba por qué los chicos, cuando llegaban arriba, ganábamos. O estábamos siempre en las fases finales o en las finales, aunque perdiéramos algunas. Les decía que de los campeones del mundo todos tenían medallas también en las categorías inferiores menos dos y alucinaban. O eran campeones Sub-21, o Sub-19, o Sub-17, o Sub-16 o eran del Mundial Sub-20, o eran medallas olímpicas. Y ellos querían saber por qué leches pasaba esto. Y la respuesta era clara: la clave son los campeonatos de España de territoriales".
El balón es lo importante
"Nosotros en la casa implantamos un estilo de juego que, claro, tenía que estar basado en el balón. Y en la velocidad. Entonces se fundamentaba en lo que tan bien hacía el Barça. Lo hacían los críos porque lo aprendían de los mayores. Nos beneficiaba que teníamos muchos jugadores del Barça en las diferentes convocatorias. De la generación buena del Barça, la del 87, yo tenía por ejemplo a siete jugadores en mi equipo ya desde la Sub-15. En la Sub-16, menos Juanjo Clausí, y Messi me parece, y uno de los porteros, el resto del Barça de esa edad venía conmigo. Con Fábregas, Piqué, Marc Valiente, Julio de Dios, Toni Calvo, Sito Riera... Cuando las federaciones venían a aprender y a escuchar no salían de su asombro cuando se iban a sus países. Estaba todo perfectamente organizado y cada cosa tenía un sentido. Esas federaciones que visitaron Madrid implantaron el modelo que teníamos nosotros en las territoriales. Copiaron el modelo de los campeonatos de España, con un año menos de los jugadores y por regiones. Yo tenía 114 ojos. Lo de las 57 personas que trabajaban para mí, que eran los seleccionadores de las distintas regiones y yo los reunía una vez al año y me traían unos informes buenísimos. ¡Y lo hacían gratis!
"La clave es que tenía 57 personas, seleccionadores de las distintas regiones, y los reunía una vez al año y me traían unos informes buenísimos. ¡Y gratis!"
'Padre deportivo' de todos los campeones del mundoUna vez que la RFEF tenía una gran amplitud de miras y celebraba estos campeonatos regionales Sub-15 y Sub-17 (que más tarde se fueron modificando a Sub-12, Sub-14 y Sub-16-), reunía en Madrid a todos los informadores distribuidos por el país con carpetas repletas de talento. En Las Rozas se elegían a 55 futbolistas, por categorías, de todos los que habían destacado, cinco por puesto, y después se iban haciendo cribas hasta quedarse con 33 elegidos. Estos eran los que, durante la temporada en curso, iban turnándose para acudir a los diferentes campeonatos para defender internacionalmente a España.
Alemania, por poner un solo ejemplo ahora que la Eurocopa se juega en sus estadios, se esforzó por mejorar mucho su sistema de captación con este estilo y, tras copiar a España después de ver cómo hasta le gana una Eurocopa o le apeaba de la final de un Mundial, pronto le llegó la recompensa. Ganó enseguida tres títulos en categorías inferiores y vio como empezaron a salir talentos muy importantes desde Sudáfrica 2010 como Özil, Boateng o Müller, en aquel meritorio tercer puesto. Desde entonces, Alemania, con sus crisis, no ha hecho más que crecer hasta sumar los ocho títulos en la Absoluta que le siguen permitiendo ser una potencia. Se hizo con el Mundial 2014, con la Copa Confederaciones 2017, fue tercera en la Eurocopa de 2012 y 2016. Ya está de nuevo más cerca de los títulos. Pero fue en las categorías inferiores donde, por fin, comenzó a volar sin techo: campeones en el Europeo Sub-21 en 2017 y 2021, del Europeo Sub-19 en 2014, del Mundial y la Eurocopa Sub-17 de 2023...
El modelo de España fue, es y parece que seguirá siendo con Nico y Lamine un fenómeno a estudiar. Ahora simplemente ha vuelto a la memoria de muchos y se ha activado el runrún. Y eso que en los resultados en las inferiores no son ahora los deseados. Pero aun así, si España triunfa en Berlín, lo que regresará de inmediato serían los viajes del personal a Las Rozas. Con boli, papel o una fotocopiadora.