Toni Kroos cree que la mano de Cucurella le apartó del Balón de Oro

Entre los 30 nominados al Balón de Oro aparece un futbolista retirado que, antes de colgar las botas, jugó una de las mejores temporadas de su carrera. Toni Kroos dejó el fútbol a los 34 años y, por méritos propios y colectivos, aparece entre los candidatos a levantar el trofeo individual más importante. Sin embargo, sus opciones de ganarlas son mínimas. De hecho, se puede volver al día y momento exacto en el que sus probabilidades cayeron en picado.

5 de julio de 2024.España y Alemania jugaban los cuartos de final de la Eurocopa. Los dos mejores equipos del torneo se veían las caras en un duelo de poder a poder. El partido llegaba a la prórroga y en el 107', la jugada que pudo cambiarlo todo. Musiala disparaba a puerta y la pelota chocaba en la mano de Cucurella, que se encontraba dentro del área. Parecía mano clara, pero ni el árbitro de campo, Anthony Taylor, ni el de VAR la consideraron punible. Un posible penalti no señalado que desató la ira de la afición alemana y que, sumado al gol de Merino al final, supondría la clasificación de España a semifinales.

Toni Kroos todavía no lo olvida. El alemán comenta en privado que ese día se le escapó definitivamente el Balón de Oro. Cree con convencimiento no sólo que el ganador de ese partido se convertía en el máximo candidato a levantar el título continental, sino que conseguirlo le hubiese colocado como máximo favorito para ganar la bola dorada que entrega 'France Football'. Lo que hubiera supuesto el broche perfecto a una carrera de ensueño.

La UEFA le dio la razón a la enfadada afición alemana unos meses después de la Eurocopa. El Comité de Árbitros trasladó a los colegiados a finales de septiembre que se cometió un error en la jugada y que la mano de Cucurella era punible y, por lo tanto, penalti. Una polémica todavía recordada en las calles de Alemania y por un Kroos muy enfadado.

El mediocampista expresó su malestar en X tras publicarse la noticia. Han tardado tres meses en darse cuenta de que había una mano, algo que casi todo el mundo ha podido ver en un segundo. Eso me tranquiliza mucho (risas). ¿Puedo decir que ahora soy campeón de Europa porque lo han confirmado oficialmente? No lo creo…", afirmó durante una narración de la Icon League.

Esto no resta un ápice de mérito a Toni Kroos, al que se le espera entre los diez primeros de la lista y no sería de extrañar verlo muy arriba. Tampoco él se come la cabeza con lo sucedido. Quienes están cerca de él le ven tranquilo, disfrutando de su nueva vida lejos de los terrenos de juego. Ahora se dedica a sus negocios y, sobre todo, a su familia, con la que se ha quedado a residir en Madrid tras el retiro. Porque si para Kroos el fútbol ya no es una prioridad, el Balón de Oro menos todavía.