Guerra abierta entre el Real Madrid y la Asociación Vecinal de Perjudicados por el Bernabéu
El último comunicado del equipo blanco apunta directamente contra los vecinos que ya han paralizado los conciertos y los parkings.

El Real Madrid ha encontrado en la Asociación Vecinal Perjudicados por el Bernabéu la horma de su zapato. Se trata de un grupo de más de 2.000 vecinos que comparten barrio con el Santiago Bernabéu y que han demostrado estar dispuestos a todo para que sólo se utilice para el fútbol y nunca para conciertos. La última batalla dentro de su guerra legal ha llegado por la denuncia de que el estadio estaba utilizando una licencia de 2001, algo que tanto el Ayuntamiento como el club blanco se han encargado de desmentir.
De hecho, en el comunicado publicado por la entidad de Chamartín apunta directamente a la Asociación: "El club lamenta que la 'Asociación Vecinal de Perjudicados por el Bernabéu', además de mostrarse ajena al esfuerzo del Real Madrid por garantizar los intereses de dicho colectivo, traslade de forma malintencionada y a sabiendas de su falsedad, ante los órganos jurisdiccionales y ante la opinión pública, informaciones rotundamente contrarias a la verdad".
La Asociación se ha dividido en diferentes secciones para denunciar todas las reformas de estadio que, según ellos, alteran la normalidad de un barrio residencial y han hecho su vida mucho más incómoda hasta el punto que, según cuentan, algunos han decidido mudarse. Ruido, obras o parkings... los vecinos se reparten en grupos que, a su vez, cuentan con un abogado propio.
A diferencia de otras asociaciones que nacieron con el espíritu de denunciar los problemas que acarreaban las reformas del estadio, en el caso de Perjudicados por el Bernabéu decidieron llevar sus protestas por la vía legal. Por ello, en los últimos meses han puesto centenares de denuncias a través de todas las vías posibles, con el objetivo de frenar todos los eventos y reformas no relacionadas con el fútbol que se quieren celebrar en el estadio.
En su pelea han conseguido ya dos importantes victorias. La primera, aplazar todos los conciertos hasta, como mínimo, abril de 2025 demostrando que los niveles de ruido permitidos se superaban notablemente durante la celebración de los mismos. La segunda, la paralización de los dos parkings que se iban a construir en el Paseo de la Castellana y en la calle Padre Damián.
Por su parte, el Real Madrid, que trabaja a contrarreloj para solucionar el problema del ruido, sigue convencido en utilizar el estadio como recinto para eventos más allá del deporte. Denuncia que los vecinos de la Asociación hayan promulgado información falsa y también que no colaboran con el club a pesar de que este muestra su entera disposición para garantizar sus intereses.
El conjunto merengue ha encontrado en estos vecinos a sus principales opositores por el nuevo Bernabéu. Una obra en la que se ha gastado más de 1.300 millones con el objetivo de que se convierta en uno de los principales activos del club para los próximos cincuenta años. Sin embargo, de momento sus intenciones se han visto retrasadas por las denuncias, las cuales acepta y trabaja para poder celebrar todo tipo de eventos de manera legal.