¿Quién es quién? Las 23 leyendas que figuran en el Libro Azul
Capítulo III. El Madrid elaboró un 'cuadro de honor' con los jugadores que mejor representaban los valores del club.
Florentino Pérez llegó a la presidencia del Real Madrid, en 2000, con la promesa de construir el club del futuro pero sin dejar de mirar la esencia, los valores. Esta obsesión motivó la elaboración del Libro Azul que, entre otras cosas, contenía un manual de conducta y una lista de 23 leyendas elegidas para ser espejo de los nuevos jugadores. Una labor meticulosa, esta última, que llevaron a cabo Butragueño, Jorge Valdano y el autor del libro, Antonio Pacheco. ¿Quiénes fueron para el club los que mejor representaban los valores del Real Madrid?
Ricardo Zamora
Posición en el campo: portero
Temporadas en el Real Madrid: 1930-36
Partidos jugados: 152
El futbolista más relevante de la década de los 30 en España, uno de los primeros casos de jugador mediático y, para muchos, el mejor portero de la historia. Su apodo, El Divino, refleja sus virtudes milagreras. Fue fichado del Español en 1930 por 150.000 pesetas, récord entonces. Sobrio, eficaz y con una tremenda personalidad, dejó para el recuerdo grandes intervenciones, como sus célebres paradas con el codo (por eso a ese tipo de acción se le bautizó como Zamorana). Clave en las dos primeras Ligas del Madrid.
Jacinto Quincoces
Posición en el campo: defensa
Temporadas en el Real Madrid: 1931-42
Partidos jugados: 205
Goles: 2
Tras ascender con el Alavés a Primera, el Madrid le contrató junto a otros dos compañeros del equipo vitoriano: el delantero Olivares y Ciriaco. Costaron 60.00 pesetas. Junto a su inseparable Ciriaco y a Zamora formaron un triángulo defensivo extraordinario. Conocido como El Autogiro por su juego aéreo, conquistó dos Ligas y dos Copas. Fue nombrado como el mejor defensa del mundo al acabar el Mundial de 1934.
Gaspar Rubio
Posición en el campo: delantero
Temporadas en el Real Madrid: 1928-30
Partidos jugados: 75
Goles: 72
El primer gran goleador del Real Madrid. Era un delantero con gran técnica y habilidad en el regate. Tenía dos apodos. Uno, más futbolístico, en referencia a sus grandes cualidades: el Rey Gaspar. Otro, más sarcástico: el Rey del Astrágalo, porque frecuentemente se quejaba de dolor en ese hueso del pie que une la tibia y el peroné (muchos en la época ponían en duda incluso su existencia).
Miguel Muñoz
Posición en el campo: centrocampista
Temporadas en el Real Madrid: 1948-58
Partidos jugados: 275
Goles: 24
Jugador, entrenador y mito. Como centrocampista, mandó con personalidad en el Real Madrid durante diez años y fue uno de los grandes referentes de los años 50. Conquistó como futbolista tres Copas de Europa (fue el primero en la historia en levantar este trofeo al ser el capitán), cuatro Ligas y dos Copas Latinas. Su retirada, en 1958, dejó paso a su etapa como entrenador. Un periodo muy exitoso y perdurable. Estuvo 14 años seguidos dirigiendo al Madrid, récord de permanencia, en los que el club aumentó sus vitrinas con otras dos Copas de Europa, la primera Intercontinental, nueve Ligas y dos Copas de España.
Luis Molowny
Posición en el campo: delantero
Temporadas en el Real Madrid: 1946-57
Partidos jugados: 208
Goles: 103
Santiago Bernabéu encargó a Quincoces, que era el entrenador del Madrid, el fichaje de Molowny. Lo hizo después de leer en un periódico barcelonés que el Barça había viajado a Las Palmas para contratarlo. El club blanco pagó al Marino 250.000 pesetas por este delantero veloz y descarado que acabó convirtiéndose en ídolo de la afición. Una Copa de Europa, dos Ligas, una Copa Latina y una Copa de España lucen en su palmarés como jugador. También fue entrenador y siempre un hombre de club. Llegó a hacerse cargo del primer equipo en cuatro ocasiones diferentes para reemplazar a Miguel Muñoz, Miljanic, Boskov y Amancio: ganó tres Ligas, una Copa de la Liga, dos Copas y dos Copas de la UEFA.
Alfredo Di Stéfano
Posición en el campo: delantero
Temporadas en el Real Madrid: 1953-64
Partidos jugados: 396
Goles: 308
El mejor jugador de la historia del Real Madrid y, para muchos, el mejor futbolista de todos los tiempos. En su ficha se le cataloga como delantero, pero lo fue todo. Ningún otro futbolista fue capaz de organizar el juego como él lo organizó, de hacer circular el balón así, de distribuirlo a la perfección, de recuperarlo y, además, de ser un goleador. Todo giraba en torno a él. Fue irrepetible y el Madrid es hoy lo que es gracias a Di Stéfano y su obsesión por la victoria. El ADN del club era el ADN de Don Alfredo.
Ganódos veces el Balón de Oro (1957 y 1959) y es el único a quien se le concedió un Súper Balón de Oro (1989). Su lista de éxitos y títulos impresiona: cinco Copas de Europa, una Intercontinental, dos Copas Latinas, ocho Ligas, una Supercopa de España, cinco Pichichis… Tras retirarse, probó en el banquillo y volvió a marcar la historia apadrinando a una Quinta del Buitre que marcó una época en el club. Además, consiguió una Supercopa y alcanzó cinco subcampeonatos de Liga. En 2000, con la llegada de Florentino Pérez, fue nombrado presidente de honor del Real Madrid, cargo que ocupó hasta su fallecimiento el 7 de julio de 2014.
Ferenc Puskas
Posición en el campo: delantero
Temporadas en el Real Madrid: 1958-67
Partidos jugados: 262
Goles: 242
Puskas se convirtió en una leyenda del fútbol mundial gracias a su imponente zurda (Cañoncito Pum, le apodaron), su asombrosa capacidad goleadora y sus brillantes actuaciones. Llegó al Madrid en 1958 con 31 años, sobrepeso (12 kilos más de los que debía pesar), sin jugar al fútbol desde hacía 18 meses (arrastraba una sanción de la FIFA por haber desertado después de que la URSS invadiera Hungría) y sin que el entonces técnico, Carniglia, diera la aprobación. Pero Bernabéu le quería y el resultado fue colosal. Junto a Di Stéfano, eterno compañero de fatigas dentro y fuera del campo, el húngaro marcó 242 goles en 262 partidos, fue cuatro veces Pichichi y conquistó tres Copas de Europa, una Intercontinental, cinco Ligas y una Copa de España. La mejor zurda de la historia madridista.
José Emilio Santamaría
Posición en el campo: central
Temporadas en el Real Madrid: 1957-66
Partidos jugados: 337
Goles: 2
Santamaría aterrizó en el Madrid con fama de crack y lo confirmó. Un central de lujo, fuerte y decidido, para un equipo que en ataque ya tenía a Di Stéfano, Gento, Rial y, un año después, Puskas. El uruguayo encajó como un guante, tanto en el juego como en el vestuario. Se convirtió en voz autorizada y contribuyó a agrandar la leyenda del Madrid con cuatro Copas de Europa, una Intercontinental, seis Ligas y una Copa. Sirvió de enlace entre el equipo campeón de las cinco primeras Copas de Europa y el Madrid Ye-yé. Un histórico.
Raymond Kopa
Posición en el campo: delantero
Temporadas en el Real Madrid: 1956-59
Partidos jugados: 103
Goles: 30
Kopa fue el primer gran jugador francés. Santiago Bernabéu le fichó en 1956, unos días antes de jugar la final de la Copa de Europa ante el Stade de Reims, equipo del delantero. El presidente madridista cumplió su deseo de unirle con Di Stéfano y completar una delantera de ensueño en aquel glorioso Real Madrid de finales de los cincuenta. Sus goles, regates y centros al área fueron determinantes para ganar tres Copas de Europa, dos Ligas y una Copa Latina. En 1958 fue nombrado Balón de Oro.
Paco Gento
Posición en el campo: extremo izquierdo
Temporadas en el Real Madrid: 1953-71
Partidos jugados: 600
Goles: 182
Único jugador en la historia con seis Copas de Europa y el mejor extremo izquierdo de todos los tiempos. La velocidad y la potencia en el tiro presidían su fútbol, lo que le valió el apodo de La Galerna del Cantábrico. Gento llegó al Madrid con 20 años y se retiró con 37 dejando por el camino hasta 24 títulos: seis Copas de Europa, una Intercontinental, 12 Ligas, dos Copas de España, dos Copas Latinas y una pequeña Copa del Mundo. Su nombre figura en letras de oro en la leyenda del Real Madrid junto al de Di Stéfano, Puskas, Kopa y Rial, con quienes formó una delantera mítica. Fue presidente de honor de la entidad desde octubre de 2016 hasta que falleció el 18 de enero de 2022.
Amancio
Posición en el campo: delantero
Temporadas en el Real Madrid: 1962-76
Partidos jugados: 471
Goles: 155
Entendía el fútbol como un espectáculo. Apodado El Brujo por su prodigioso regate, fue la estrella del Real Madrid de los Yé-yés y la gran figura del fútbol nacional de aquel momento. Santiago Bernabéu, que ya estaba en tareas de renovar al equipo glorioso que ganó las cinco primeras Copas de Europa, se obsesionó con él cuando le vio con el Deportivo de la Coruña y no paró hasta cerrar su fichaje en 1962. Marcó uno de los dos goles al Partizán en la final de la Copa de Europa de 1966. Además, en su palmarés figuran nueve Ligas, tres Copas de España y la Eurocopa de 1964.
Después de retirarse, desempeñó otras funciones en el club blanco, entre ellas la de entrenador del Castilla, con el que se proclamó campeón de Liga en Segunda en la 1983-84. A Amancio se le considera el descubridor de la Quinta del Buitre, pues en el filial hizo debutar a aquella maravillosa generación (excepto a Míchel). También dirigió siete meses al primer equipo (1984-85). Cuando dejó de entrenar siguió ligado al club y desde el 2 de octubre es el nuevo presidente de honor del Real Madrid.
Velázquez
Posición en el campo: centrocampista
Temporadas en el Real Madrid: 1965-77
Partidos jugados: 402
Goles: 59
El arte de aquel Madrid que dominó el fútbol español en la década de los sesenta y de los setenta. Inteligente, muy hábil técnicamente y elegante en el centro del campo. Atributos que impulsaron a sus compañeros a bautizarle como El Cerebro. También demostró carácter fuera del césped, un punto de rebeldía. "Yo no era un tipo contestatario, lo que pasa es que en aquella época, al no decir 'amén' a todo, hacía que se fijaran más en ti", llegó a decir. Campeón de Europa con el Madrid de los Yé-yés, también ganó seis Ligas y tres Copas de España. Una grave lesión en 1977 marcó el final de su carrera.
Pirri
Posición en el campo: central
Temporadas en el Real Madrid: 1964-80
Partidos jugados: 561
Goles: 172
Representó la bravura y el pundonor. Era una navaja suiza: central, líbero, centrocampista y, en ocasiones, delantero improvisado. Reunía un ramillete de condiciones que le hicieron un jugador de época: solvente cabeceador defensivo, gran cabeceador en ataque, chutador, distribuidor y recuperador... Bernabéu entregó a Pirri la Laureada del Madrid (condecoración al valor heroico) por proezas como la de la final de la Recopa con el Chelsea, en 1972, en la que jugó con un brazo roto. También disputó un derbi ante el Atleti con la mandíbula rota, en la final de la Copa de 1975. Fue uno de los pilares de aquella sexta Copa de Europa de los Ye-yés. Alzó, además, diez Ligas y cuatro Copas.
Goyo Benito
Posición en el campo: central
Temporadas en el Real Madrid: 1969-82
Partidos jugados: 420
Goles: 3
El otro jugador de la historia del Real Madrid con la Laureada. Se la concedieron por su valor y dedicación al Madrid, además de por su trayectoria, donde lucen 11 títulos: seis Ligas y cinco Copas de España. Goyo Benito fue un icono por su carácter bravo. En la década de los 70 se ganó la fama de Hacha Bravaporque en sus entradas iba al límite. Valentía que le llevó al hospital en ocho ocasiones: fue operado cinco veces de la rodilla, dos de la nariz y una de la tibia.
Vicente del Bosque
Posición en el campo: centrocampista
Temporadas en el Real Madrid: 1973-84
Partidos jugados: 339
Goles: 25
Toda una vida dedicada al Real Madrid. Jugador (centrocampista ofensivo de muchos quilates), técnico de categorías inferiores del Real Madrid (donde apadrinó a grandes generaciones), director de La Fábrica y entrenador del primer equipo. "Es el ejemplo del éxito de la humildad, la calidad y el trabajo", resume la web del club. Después de varias cesiones al Castellón y al Córdoba, en 1973 se asentó en la media del Real Madrid y ya no se bajó de ahí en 11 años en los que ganó cinco Ligas y cuatro Copas.
Como entrenador se convirtió en toda una institución. Heredó el rol de Molowny de apagafuegos de la casa, pero fue en 1999 cuando, destituido Toshack, recibió su gran oportunidad. Su condición de interino dejó paso a cuatro años de idilio con el éxito: dos Copas de Europa, una Intercontinental, dos Ligas y una Supercopa de España. Su historia se hizo eterna dirigiendo a la Selección, con la que conquistó el Mundial y una Eurocopa.
Santillana
Posición en el campo: delantero
Temporadas en el Real Madrid: 1971-88
Partidos jugados: 645
Goles: 290
Hablar de él es hacerlo de una de las leyendas vivas del madridismo. Debe su apodo a su Santillana del Mar natal. Este delantero se pasó 17 temporadas metiendo goles de todos los colores, en los 70 y 80, la mayoría de ellos de imponentes cabezazos. Esa fue la suerte que dominó. Se impulsaba como si guardara muelles en los tacos y cabeceaba como si una bota impactara en el balón. Su sociedad con Juanito dejó momentos imborrables. Santillana fue determinante en la conquista de nueve Ligas, dos Copas de la UEFA, cuatro Copas de España y una Copa de la Liga. Para que los lectores de hoy se hagan una idea de la dimensión de este nueve, basta un dato: al retirarse, solo Alfredo Di Stéfano superaba sus números. La cabeza del Madrid.
Juanito
Posición en el campo: extremo
Temporadas en el Real Madrid: 1977-87
Partidos jugados: 401
Goles: 121
Pasional en el campo y sincero fuera de él, jugaba como vivía: sin ninguna doblez. Su pasión, lealtad y compromiso con el Real Madrid le definían. También su talento y obsesión por ganar. Era un hincha que trabajaba como futbolista. Su carácter 'blanco' le llevó a protagonizar imágenes que quedaron en la historia, como sus saltos cuando fue sustituido contra el Borussia Mönchengladbach en una de las remontadas épicas más emocionantes de la historia blanca; o su celebración tras ganar la UEFA, con gorra 'chulapesca' y bufanda. Su carácter 'volcánico' le llevó a cometer escenas terribles, como su pisotón en la cabeza de Matthäus. Su fallecimiento en accidente de tráfico, en 1992, fue un shock para el madridismo. Cada minuto 7 el Bernabéu parece invocarle con un grito: "¡Illa, illa, illa, Juanito Maravilla!".
Stielike
Posición en el campo: centrocampista
Temporadas en el Real Madrid: 1977-85
Partidos jugados: 308
Goles: 50
Llegó el mismo verano que Juanito y se ganó el corazón del madridismo con su fútbol de pánzer alemán. Casta, personalidad y pelea en el centro del campo (también ejerció de líbero). Características que compartía con varios compañeros de aquel Madrid como el propio Juanito, Camacho, Pirri o Goyo Benito. En su currículum figuran tres Ligas, dos Copas del Rey, una Copa de la UEFA y una Copa de la Liga.
Camacho
Posición en el campo: lateral
Temporadas en el Real Madrid: 1973-89
Partidos jugados: 577
Goles: 11
Otro que llevó el sacrificio y la entrega por bandera. Férreo como pocos en el marcaje (fue célebre el que le hizo a Cruyff en un Madrid-Barça en el Bernabéu), en 1973 llegó al filial y ese año ya subió al primer equipo para completar una carrera brillante. Se lesionó de gravedad en la rodilla y estuvo casi dos meses parado, pero eso no le frenó. Indiscutible en el lateral izquierdo hasta su retirada, Camacho se convirtió en uno de los jugadores con más partidos oficiales en el Real Madrid. En su mochila, 19 títulos: dos Copas de la UEFA, nueve Ligas, cinco Copas de España, una Copa de la Liga y dos Supercopas.
Hugo Sánchez
Posición en el campo: delantero
Temporadas en el Real Madrid: 1985-92
Partidos jugados: 282
Goles: 208
Un delantero que vivía solo para el gol. Aún retirado, el mexicano asegura que sigue soñando que marca en el Bernabéu. Fue el remate perfecto para aquel Madrid de la Quinta del Buitre. Llegó procedente del Atlético (el traspaso se maquilló con el Pumas como puente) y desde el primer día demostró una efectividad formidable. De blanco ganó cuatro trofeos Pichichi y una Bota de Oro y se consagró como un delantero que marcó a toda una generación.
Sus chilenas (su gol al Logroñés se grabó en el imaginario colectivo madridista) y sus volteretas en las celebraciones todavía se recuerdan. Contribuyó decisivamente a que aquel equipo sumara cinco Ligas seguidas, una UEFA, una Copa y tres Supercopas. Hoy, sigue despidiéndose en los WhatsApp con un "Abrazo de Gol"...
Butragueño
Posición en el campo: delantero
Temporadas en el Real Madrid: 1984-95
Partidos jugados: 463
Goles: 171
Su apodo, El Buitre, dio nombre a una de las generaciones más brillantes del fútbol español. Desde que llegó a las categorías inferiores del club, sobresalieron sus estadísticas. Genio e ingenio con la pelota que marcaría un antes y un después en el Real Madrid. Fue un artista que llegó a convertirse en un símbolo del progreso del país. Di Stéfano le hizo debutar en Cádiz y fue un suceso: marcó dos goles, dio el pase del tercero y el Real Madrid venció 2-3. Ahí nació un líder que se convirtió en mito con el 7 a la espalda.
Butragueño fue un impacto también en Europa: ganó dos veces el Trofeo Bravo a mejor jugador menor de 21 años. Sin él nada hubiera sido igual en el Madrid de mediados de los 80 y principios de los 90. Conquistó dos Copas de la UEFA, seis Ligas, dos Copas del Rey, una Copa de la Liga y cuatro Supercopas de España. Hombre educado y prudente, actualmente es el director de Relaciones Institucionales del club.
Míchel
Posición en el campo: centrocampista
Temporadas en el Real Madrid: 1984-96
Partidos jugados: 559
Goles: 130
Canterano del Madrid, Míchel fue el primer integrante de la Quinta del Buitre en debutar con el primer equipo. Lo hizo en 1982, con 18 años, ante el Castellón. Y se estrenó marcando. Jugador con una excelente técnica y un guante en su pie derecho, fue el perfecto asistente para Hugo Sánchez y su sociedad con Butragueño quedó grabada para siempre. Desde la banda derecha, fue clave junto a los otros integrantes de la Quinta de aquellas cinco Ligas seguidas del Madrid. En 1996 dejó el club tras 19 temporadas en él (12 en el primer equipo) y 15 títulos: dos Copas de la UEFA, seis Ligas, dos Copas de España, una Copa de la Liga y cuatro Supercopas de España. También fue técnico del Castilla y director de la cantera del Real Madrid.
Manolo Sanchís
Posición en el campo: central
Temporadas en el Real Madrid: 1983-2001
Partidos jugados: 710
Goles: 40
Hijo de Manolo Sanchís Martínez, quien ganó la Copa de Europa de los Ye-Yés, Manolo Sanchís Hontiyuelo es el tercer jugador de la historia madridista con más partidos jugados después de Raúl (741) y Casillas (725). Entró a formar parte del club en los infantiles, formó parte de la Quinta del Buitre y fue el único de aquella generación en alzar la Copa de Europa (la Séptima y la Octava). Di Stéfano le hizo debutar en el primer equipo y siempre se caracterizó por ser un defensa sobrio y sereno. Cuenta con uno de los palmarés más completos de la historia del club: dos Copas de Europa, una Intercontinental, dos Copas de la UEFA, ocho Ligas, dos Copas del Rey, cinco Supercopas y una Copa de la Liga.