ARABIA SAUDÍ

Míchel, el hombre de moda en Arabia Saudí, renueva dos años más en una fuerte apuesta del Al Qadsiah para mirar a los ojos a los grandes

Situado como el mejor entrenador de la primera vuelta, Aramco, propietaria del club, le entrega la consolidación del proyecto futbolístico.

Míchel posa con Zakri, exjugador y team manager de Al Qadsiah/Alqadsiah
Míchel posa con Zakri, exjugador y team manager de Al Qadsiah Alqadsiah
Hugo Cerezo
Marcos Durán

Hugo Cerezo y Marcos Durán

Suena bien alto el nombre de Míchel en Oriente Medio, tanto que el entrenador del Al Qadsiah ha renovado por dos temporadas más con el club de Al Khobar, una apuesta que refrenda el trabajo del técnico y su staff en la Saudi Pro League, constructores del equipo revelación que opta a meterse entre los tres primeros para jugar la Champions asiática y también en semifinales de la Copa. El club, cuyo director deportivo es el también español Carlos Antón, entrega a Míchel la consolidación y crecimiento de un proyecto que cuando lo asumió el madrileño se encontraba en Segunda división.

El vídeo de la renovación lo protagonizó el propio entrenador: "Después de más de 20 años entrenando en diferentes clubes alrededor del mundo llegué al AlQadsiah. Al principio no fue fácil. No queríamos que el club fuera solo una pequeña parte del éxito del fútbol saudí, queríamos ser la historia del éxito en sí misma. La liga es altamente competitiva y una de las ligas de mayor crecimiento. Y la afición de Al Khobar se ha vuelto sedienta de victorias. Nos hemos hecho un lugar entre los grandes clubes, hemos ofrecido nuestro mejor desempeño en la Liga y en la Copa del Rey. Y no estuve solo. Detrás de mí hubo una directiva, un cuerpo técnico y unos trabajadores del club que me brindaron todas las herramientas y confianza para construir un equipo en constante evolución y una química excepcional. La historia no ha terminado y no terminará pronto. Soy Míchel, soy del AlQadsiah hasta 2027".

Con Míchel trabajan en su staff Juan Carlos Mandia, Quique Sanz (preparador físico) y Adrián, su hijo, un cuarteto que lidera un vestuario también con acento español, el que pone Nacho Fernández como capitán, además de otros jugadores sudamericanos o de ascendencia española como el propio Aubameyang, de abuelos abulenses o Cameron Puertas, hispanobelga. Pero más allá de la nacionalidad, lo que importa es el qué y el quién.

Al Qadsiah pertenece al grupo petrolero Aramco, que por mucha potencia económica que posee no dispendia el dinero. De ahí los mercados razonables que viene protagonizando la dupla Míchel-Antón. Jugadores competitivos, con experiencia en Europa pero sin el denominador común de estar de retirada. Inversiones muy medidas y con vistas a futuro. Hasta ahora han invertido 83 millones de euros según transfermarkt, con un valor de mercado de 76. Cero inflación ni sobrepagos.

Dentro de ellos, apuestas de talento joven que irán apareciendo y Míchel podrá ir modulando: en verano llegaron del Girona Iker Almena (18) por cinco; del Levante Carlos Almena (20) por 0,2; y Alejandro Vergaz (18) desde el Betis; por este enero se han hecho con una de las mayores promesas del Espanyol, Miguel Carvalho (cerca de un millón); y en el próximo verano aterrizará allí el recién fichado del Tenerife Aarón Martín (18) por 1,4. Estos dos últimos llevan el sello de otro español que se integró hace poco en la estructura del club como responsable de captación de los sub 21, Borja Matías, ex del Newcastle.

Además, en Arabia valoran el trabajo que están llevando a cabo promocionando jugadores del país que incluso están siendo reclutados por la selección saudí y que a la llegada del staff apenas tenían proyección. Nombres como Mohammed Aboulshamat, Jehhad Takri, Abdulaziz Al-Othman o Turki Al-Ammar son una buena noticia para el combinado dirigido por Hervé Renard. Tal es el estatus de Míchel que en el programa de televisión más incluyente del fútbol árabe fue elegido mejor entrenador de la primera vuelta.

"Ponen cordura a un mercado que no la tiene", asegura una fuente que ha trabajado en una operación con ellos en los últimos meses. Porque la estrategia se está plasmando en el césped, con un rendimiento óptimo para ser un recién ascendido pero que no pone límites. Esta renovación supone una ratificación del modelo que están construyendo y que tendrá continuidad no solo en términos estrictamente deportivos. La propiedad está construyendo un estadio nuevo con vistas al Mundial 2034, previsto para 2026 y con capacidad para 45.000 espectadores. Si nada cambia, allí estará Míchel para estrenarlo.

El técnico ha encontrado en Al Khobar un lugar donde dejar un legado, lo que por unas razones u otras se le ha negado en España para quien es una leyenda de la selección y del Real Madrid. Su currículum recoge dos ligas y una copa con Olympiakos, un sexto puesto con el Getafe y un ascenso con el Al Qadsiah como hitos más destacados, además de alguna que otra permanencia. Ha tenido que ser en Arabia, pasada la sesentena, donde maximizar su toque en la pizarra. Y lo que queda.