Athenea del Castillo es la punta del iceberg de un plan de futuro con luces y sombras en el Real Madrid

No todo puede esperar. El Real Madrid afronta semanas decisivas para definir su rumbo. Tras meses en los que navegó a la deriva, sin tomar una dirección clara, el club blanco ha pisado el acelerador para empezar a dar forma a su nuevo proyecto. Una de las primeras decisiones que ha tomado en firme ha sido la renovación de Athenea del Castillo, tal y como adelantamos en Relevo. A sus 23 años, la cántabra es una de las apuestas de futuro de la entidad madrileña de cara a su exigente objetivo en la próxima temporada.

Con este movimiento, el Real Madrid activa un 'plan renove' que apunta a ser breve y que, hasta ahora, se había mantenido frío y con ofertas a la baja. Sobre la mesa, trece jugadoras menos una -Athenea ya renovó a falta de oficialidad- que acaban contrato el próximo mes de junio. Entre ellas hay nombres de gran relevancia como Misa Rodríguez, Teresa Abelleira, Sandie Toletti o Naomie Feller. Figuras entre las que surgen dudas y hay pocas certezas de cara al futuro, con una negociaciones que han ido a ritmo lento y que no han resultado satisfactorias para la mayoría de las jugadoras.

Si bien es cierto que Athenea del Castillo no es una isla en medio del desierto, pues el conjunto blanco tendría también encaminadas otras renovaciones, la realidad es incierta en el Real Madrid. Sobre todo, tras una planificación que se quedó corta el año pasado y que se vio aún más mermada por las graves lesiones que afrontó el club madrileño en este curso. El resultado de esta situación, unido a una crisis de resultados, fue una pronta eliminación en Champions (fase de grupos) y una dura despedida -también temprana- en la Copa de la Reina (cayeron ante el Atlético de Madrid en cuartos de final).

El Real Madrid no quiere repetir tal desastre y mira al próximo año con el objetivo de repetir participación europea -aún por cerrar con un segundo o tercer puesto en Liga F- y dar un paso más. Con cuatro años de vida en esta categoría, la entidad blanca se ha mostrado paciente con el crecimiento del equipo. No obstante, la sensación es que la progresión se ha estancado en este curso. E incluso que se ha dado un tímido paso atrás. Sin opción de competir por ningún título -el año pasado jugaron la final de Copa que perdieron ante el Atlético-, las blancas han llegado al tramo final con el único reto de atar la clasificación europea en una competición en la que lucen como el segundo presupuesto más alto por detrás del Barça, líder indiscutible.

Con un presente que deja pocas opciones, la única vía es mirar a su futuro más cercano para definir un plan con el que se dé un paso más al frente. El reto es competir con los grandes de Europa y empezar a dar las primeras alegrías en forma de títulos nacionales a su afición. Athenea del Castillo es una de las primeras piedras en este proyecto de futuro. La extremo cántabra, que recientemente fue centenaria como madridista, es uno de los comodines más desequilibrantes con los que cuenta Alberto Toril, que también ha ampliado su vinculación con el club blanco, tal y como adelantó Relevo.

Además, es una de las futbolistas con mayor compromiso y entrega, con un profundo sentimiento madridista. En cuanto a rendimiento deportivo, la de Solares ha ido de menos a más tras cierto runrún en el inicio de temporada. Recientemente campeona del Mundial y de la Nations League, en la que fue máxima goleadora, Athenea del Castillo es un perfil de gran potencial y proyección con miras al futuro. Sin duda, su renovación aparece como una luz en medio de varias sombras.

Ahora, el Real Madrid trabaja en dos vías. Por un lado, debe terminar de aclarar sus intenciones con el resto de jugadoras que tienen el futuro en el aire en su plantilla. Por otro lado, ya ha empezado a tocar a sus primeros fichajes. Una tarea que no está siendo sencilla, con gran competencia en Europa -quedó demostrado con el fichaje frustrado de Björn-, y en la que ya tiene encaminados los primeros perfiles. Se esperan varias incorporaciones previstas para apuntalar demarcaciones como la defensa y el ataque. Aunque todo dependerá también de cómo se resuelvan varios de los expedientes abiertos en el apartado de las renovaciones. El futuro está en juego y el club blanco no puede permitirse más pasos en falso.