QUIERO SER COMO

El accidente de moto que cambió la vida de Chelsea y la empujó a la portería: "Tenía 13 años y se nos cruzó un borracho"

La portera del Sporting Huelva se pasó por 'Quiero ser como', el programa de fútbol femenino de Relevo en YouTube.

Chelsa durante un partido con el Sporting Huelva. /Sporting Huelva
Chelsa durante un partido con el Sporting Huelva. Sporting Huelva
Sandra Riquelme

Sandra Riquelme

A Chelsea Louise Ashurst (22 de abril de 1990, Normanton, Reino Unido) un accidente de moto le cambió la vida. Tenía 13 años, iba con una de sus mejores amigas cuando un conductor borracho se cruzó en su camino. "El humo de la arena fue lo último que vimos", recuerda la guardameta del Sporting Huelva en 'Quiero ser como...', el programa de fútbol femenino en Relevo patrocinado por Visa. 

"Nos dio tiempo a intentar desviarnos, pero nos dio. A mí me dio en la rodilla y en la espalda, pero mi amiga no tuvo tanta suerte", así empieza la historia de una de las porteras más representativas de la historia del fútbol femenino español. Por aquel entonces, Chelsea jugaba en el equipo de La Herradura, la localidad granadina a la que se mudó -procedente de Normeston- con tan sólo cuatro años. "Creo que se llamaba la Juventus", cuenta entre risas.

Hasta ese momento, Chelsea era delantera. Y de las buenas. Jugaba con los chicos y, a pesar de que le sacaban cuatro años, era una de las mejores. De hecho, fue la máxima goleadora del equipo en varias ocasiones. "Me trataban genial, lo peor es cuando íbamos a jugar a los pueblos. Me daban muchas patadas y los padres... Los padres eran lo peor. Le decían a sus hijos que cómo les iba a regatear una chica", recuerda Chelsea.

Su padre le iba a comprar unos guantes... para el frío

Sin embargo, Chelsea se convirtió en portera por esa trágica casualidad del destino. Tras el accidente, la portera del Sporting Huelva se pasó cinco meses sin hacer nada. "Tenía mucho miedo, me dolía mucho la espalda", detalla. Durante ese tiempo, iba a ver a su equipo entrenar. Mientras, su padre -al que considera vital en su vida- intentaba convencerle de que era muy joven y de que le quedaba mucha vida por delante, que no se agobiase.

Un "A que no te atreves a..." fue lo que decantó la balanza hacia la portería. "Me puse porque una amiga mía empezó a picarme. Me dijo: 'Vamos, anda, que no tienes nada, ponte en la portería, que ya verás cómo te marco", recuerda Chelsea, como si fuese ahora. "Y, desde entonces, me gustó. Ni intenté volver a correr. Cuando vi la portería pensé: 'Me voy a acomodar aquí'", cuenta entre risas.

Su padre, que sufría como el que más ver a su hija fuera de los terrenos de juego, se enteró del cambio de posición de Chelsea cuando ésta le pidió que le comprase unos guantes. "Se pensaba que eran para el frío. Me dijo que fuese a la tienda y que mirase a ver qué marca tenían, para que no pasases frío", recuerda entre risas.

Cuando fichó por el Barça en Ikea

Chelsea empezó a despuntar y el Málaga, que competía en la ya extinta Superliga -la primera división femenina del fútbol español- se fijó en ella. "Recuerdo a mi padre buscar en el ordenador el nombre del equipo, de la competición, nos volvimos locos", cuenta. Y tras el Málaga llegaron el Sporting Huelva y el Barça.

Cuando Chelsea estaba a punto de fichar por el Valencia, el Barça se cruzó en su camino. Gran parte de culpa es de Antonio Toledo, el actual entrenador -que también lo era en aquel momento- del Sporting Huelva. "Siempre se lo agradeceré", recuerda. "Iba en el coche con mi padre y estaba a punto de firmar el contrato. Antonio me llamó y me dijo que no lo firmase que me esperase", añade Chelsea.

La portera del conjunto onubense recuerda con total exactitud ese momento y las palabras de Antonio Toledo: "Hazme caso, te va a llamar un club más grande, te va a llamar el Barça". Unos días más tarde, le llamó Xavi Llorens, el entrenador del Barça. Y a Chelsea le pilló en Ikea comprando un "cuarto entero". Con su madre insistiéndole para que colgase, -"estábamos cargando las cajas y se estaba poniendo de los nervios"- Chelsea le dio su sí al conjunto blaugrana. "Cuando colgué, mi madre me preguntó que qué excusa le iba a dar y le dije: 'Me voy a vivir a Barcelona'".