Desconvocada la huelga de la Liga F: cuáles son los motivos

El fútbol femenino español ha vivido una constante lucha. Esta vez, la polémica salpicó a la Liga F, la máxima competición nacional. La primera jornada debía haberse inaugurado el pasado viernes. Sin embargo, la huelga, convocada el 1 de septiembre por los sindicatos para las dos primeras fechas del campeonato, evitó que el balón echase a rodar.

La lucha entre los sindicatos y la patronal viene de lejos: cruces de comunicados y de declaraciones, cambios en las propuestas, etc. Desde finales del año pasado hasta ahora, ambas partes se han enfrentado -en numerosas ocasiones- y por diferentes motivos. Sin embargo, en esta ocasión, el principal punto de conflicto entre el banco social, que representa a las jugadoras, y los clubes ha sido el salario mínimo. Hasta la madrugada de este jueves, marcado en 16.000€. Una cifra que los sindicatos consideraban irrisoria y completamente injusta.

En resumen, la Liga F no dio comienzo el pasado fin de semana porque la patronal ofrecía una cifra y los sindicatos exigían otra. Y, a pesar de haber estado negociando durante meses -unas negociaciones que se han intensificado más durante la última semana, llegándose a celebrar hasta cuatro reuniones- el acuerdo se alcanzó en la madrugada de este jueves.

Más que pedir, en dónde fijó sus límites la Liga F: 20.000€. Y, según evolucionasen los ingresos televisivos a lo largo de la competición, llegar a los 23.000€. La patronal ha defendido que una subida de este tipo provocaría el colapso económico de la competición, que la realidad económica de los clubes no podría soportarlo. El acuerdo finalmente se ha cerrado en 21.000€.

Supone una subida del 25% del salario mínimo de las jugadoras. Según Amanda Gutiérrez, la presidenta de FUTPRO, 91 futbolistas del total de la Liga F estarían por debajo de los 23.000€, tal y como señalo en la Ser. Además, tan sólo hay 31 futbolistas que cobren entre los 20.000€ y los 23.000€.

Sin embargo, esta no fue la primera propuesta de la Liga F, que en las primeras reuniones ofrecieron llegar a los 19.000€ al tercer año, esto es en la temporada 2024/25. Una propuesta que han mejorado en las últimas reuniones hasta llegar a los citados 21.000€.

Los cinco sindicatos, FUTPRO, AFE, Futbolistas ON, CC.OO. y UGT, se habían plantado en los 23.000€, con la posibilidad de llegar a los 25.000€ si los ingresos por los derechos televisivos se elevasen. Mientras que los clubes mantienen que la subida del sueldo mínimo provocaría el colapso económico de la competición, el banco social defendió que tienen "dinero suficiente" y que una futbolista, bajo ninguna circunstancia, podría vivir con ese salario.

Si bien es cierto que su primera propuesta fueron 25.000€ y bajaron hasta los 23.000€ con el objetivo de llegar a un acuerdo. Y llegaron a aceptar una cantidad menor: los 21.000 euros que desbloquearon la huelga. Una cantidad mucho más realista de la que presentaron en un principio: 50.000€.

Sin embargo, y por remontarnos al origen del desacuerdo entre la patronal y los sindicatos, la propuesta posterior a la de los 50.000€ consistía en alcanzar los 30.000€ en el tercer año, en el curso 2024/25.

Y tal es la hostilidad latente entre ambas partes que el SIMA (Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje) se vio obligado a intervenir a última hora del martes. La propuesta es: 21.000€ para el siguiente curso, 22.000€ para la 24/25 y 23.000€ para la 25/26.

Unas cifras que tanto los sindicatos como los clubes valoraron en las horas posteriores antes de llegar a un acuerdo. La respuesta fue positiva y el balón echará a rodar el próximo viernes, es decir, en menos de 48 horas.