Liga F sigue sin patrocinador... y podría confiar su futuro a un fondo de capital privado
Según ha podido saber Relevo, es una de las opciones que está sobre la mesa.

Liga F podría estar cambiando el rumbo. Según ha podido saber Relevo, la institución responsable de la máxima categoría del fútbol femenino español está sopesando encomendar su futuro próximo a un fondo de capital privado. Al menos, es una de las opciones que hay sobre la mesa.
Esto es: el fondo de capital privado en cuestión se convertiría en socio temporal de Liga F, inyectando un capital determinado —con el fin de acelerar su crecimiento— a cambio de que la patronal le cediese una parte importante de sí misma, ya fuera en forma de acciones, derechos comerciales, televisivos, etc.
Este tipo de movimientos son cada vez más corrientes en el fútbol internacional, las instituciones encuentran inyecciones de dinero a cambio de ceder algo de autonomía y derechos comerciales futuros. Cuando un fondo realiza este tipo de inversión, se suelen incorporar planes de profesionalización y una comercialización más agresiva de los derechos que se acuerden compartir.
La competición sigue sin title sponsor (el 'apellido'), la ayuda del CSD, uno de los principales bastiones económicos de Liga F, expira este curso y la de LaLiga está en relativo peligro tras las quejas del Real Madrid. La cuenta atrás está en marcha y la 'ayuda' de un fondo de capital privado podría significar un balón de oxígeno.
El caso más significativo: el acuerdo entre LaLiga y CVC
Sin ir más lejos, hace unos días, Relevo entrevistó a Ignacio Aguillo, exhombre fuerte en el Atleti, y el próximo CEO de AS1, una nueva agencia de representación que irrumpe con fuerza en el mercado, sobre la llegada de fondos de capital privado en el fútbol. "Siempre es una noticia buena para un sector y para los clientes en ese sector, porque supone una cierta manera de hacer las cosas muy centrad en la calidad y en la excelencia. Eso sólo puede beneficiar al consumidor y al cliente final".
Con la entrada de un fondo de capital privado, Liga F subsanaría su principal problema: la dificultad para encontrar ingresos. Hasta ahora, tal y como hemos citado anteriormente, la competición se ha visto respaldada tanto por el Consejo Superior de Deportes como por la LaLiga. Y la ayuda del CSD está próxima a su fin. Fue un acuerdo por tres temporadas y la última es la que se está disputando. La ayuda consistió en una ayuda directa de cinco millones en 2022, 7,5 en 2023 y la misma cantidad este curso.
Respecto a su vinculación con LaLiga, en agosto de 2022, la patronal dirigida por Javier Tebas se convirtió en el agente comercial exclusivo de la competición femenina. Es decir, LaLiga aseguraba unos ingresos anuales de seis millones durante el primer curso, ocho las dos siguientes y 10 a partir del próximo año a cambio de hacerse con los mandos de la explotación del campeonato. Una ayuda que, tal y como adelantó este medio, el Madrid quiere que desaparezca.
En el fútbol español, la fórmula no es nueva. El caso más significativo es el acuerdo entre LALIGA y CVC -en agosto de 2021- , que prometió una inyección de capital inmediato (2.100 millones de euros) en el fútbol español. En aquella ocasión, fue a cambio de un porcentaje anual del resultado de la explotación de los derechos televisivos durante 50 años.
Algo similar ha ocurrido en la Ligue 1 francesa, y CVC también lo intentó con la Bundesliga, pero el campeonato alemán no aprobó ese acuerdo. No es el único lugar en el que se puede ver la mano de los fondos, también los clubes acuden cada vez con más frecuencia a estas fórmulas. Uno de los casos más conocidos es el del Real Madrid, que tiene contratos suscritos con empresas de esta naturaleza, como Providence o Sixth Street.
La entrada de un fondo supondría también un refuerzo de la imagen de Liga F y, por extensión, también del fútbol femenino. La llegada de un fondo significa que desde las esferas del dinero confían en el potencial comercial del campeonato, entienden que es una competición con capacidad para crecer y ser más rentable en un futuro.
Un runrún constante
Liga F va camino de su tercera temporada como liga profesional y sigue sin un title sponsor (tras la espantada de Finertwork), que daría nombre a la competición y aportaría un importante sustento económico. Ahora mismo, Liga F cuenta con seis patrocinadores oficiales y un media partner oficial, que es DAZN, la plataforma poseedora de los derechos televisivos.
En septiembre, en la fiesta del comienzo del curso, Beatriz Álvarez Mesa dejó alguna pista: "Tenemos una cuantas, no puedo decir nombres, empresas con las que se está hablando, negociando, y esperemos que se cierre con alguna de ellas. Pero hasta que eso ocurra, no puedo deciros nada más". El caso es que tres meses después, sigue sin haber noticias del sponsor.
A pesar de contar con el vigente campeón de la Champions —el Barça—, con las cuatro últimas Balones de Oro —Alexia Putellas y Aitana Bonmatí, con un par cada una— y con las actuales campeonas del mundo, el runrún entorno a Liga F es constante. Tanto en aspectos deportivos como económicos. La asistencia a los estadios, las infraestructuras de las que disponen algunos clubes, la falta de competitividad, la eterna comparación con la liga inglesa —con un contrato televisivo millonario— o todas las cuestiones citadas anteriormente siguen empequeñeciendo la competición, que sigue a la espera del empujón definitivo.