El abrazo de Torrejón y Engen con Paños reafirma que sigue siendo decisiva bajo palos

El partido del Costa Adeje Tenerife y el Barça terminó con una imagen significativa para el conjunto culé: el abrazo entre Marta Torrejón, Engen y Sandra Paños. La guardameta alicantina fue una de las protagonistas de un equipo que no jugó su mejor partido al detener los cuatro tiros que el equipo canario realizó durante todo el encuentro.

Sandra Paños comenzó la temporada bajo el punto de mira. Tras el Mundial de Australia y Nueva Zelanda, en el que Cata Coll terminó siendo la portera indiscutible de España, la duda sobre qué haría Jonatan en el Barça aumentó, pero el entrenador gallego optó por equilibrar las titularidades entre ambas. Ahora, con Cata lesionada, el debate ha desaparecido y es Paños la que se encarga de defender la portería culé.

Ante el Costa Adeje Tenerife el gran duelo estuvo en las porterías. Aline salvó a su equipo de la goleada. En la primera parte, la portera brasileña puso la guinda al pastel en una actuación defensiva del equipo entero que evitó que el Barça marcara gol, parando un mano a mano con Salma Paralluelo y volando para desviar un disparo ajustado de Aitana Bonmatí. Mientras Sandra Paños apenas tuvo trabajo, pues el rival no disparó entre los tres palos.

En la segunda parte, la portera del Barça tuvo que ponerse el mono de trabajo. María José fue la jugadora más peligrosa en ataque, pero las dos veces que disparó a portería, fue Paños quien ganó el duelo entre ambas. Por su parte, Aline no pudo hacer nada para detener el gol de Hansen desde el punto de penalti tras una mano clara y tampoco llegó al disparo ajustado de Keira Walsh desde el interior del área que supuso el 0-2 final. Aun así, la portera del Costa Adeje terminó el encuentro con cuatro paradas que evitaron que el Barça aumentara su marcador.

El conjunto canario lo intentó de todas las maneras posibles. Antes del encuentro quiso aprovechar el factor campo, estrechándolo cinco metros, 2'5 en cada banda. Este hecho cumple la normativa, ya que las medidas siguen estando dentro de los márgenes establecidos para competir. Sobre el terreno de juego, se marcharon al descanso sin haber encajado goles, siento la tercera vez que el Barça termina los primeros 45 minutos sin ver portería.

El 2023 ha demostrado que el Barça no es indestructible, que también sabe sufrir y consigue darle la vuelta a los partidos. En el recuerdo quedará la final de la Champions contra el Wolfsburgo, donde el conjunto culé fue perdiendo por 2-0 y terminó remontando para levantar el título (3-2). La más reciente, ante el Eintracht, las de Jonatan Giráldez empezaron perdiendo y también le dieron la vuelta al marcador.

En el último partido del año el Barça no jugó bien y, aun así, consiguió solventar los problemas con una victoria. A pesar de ello, termina este primer tramo de temporada con un pleno de victorias en liga (12/12), sumando 50 goles a favor, dos en contra y 10 porterías a cero, lo que demuestra que las rotaciones en portería no son un inconveniente para el conjunto culé.