Grbic y Reinildo, héroes en La Catedral

Este Atlético es una caja de sorpresas. Del tamaño de una Catedral. Simeone salvó el terremoto Joao Félix con un triunfo, en un escenario de enjundia y un rival con caché. Sorprendió, con De Paul y Morata en la alineación, y dispuso de un 4-4-2 que se mostró superior en la primera parte y supo sufrir (mucho) en la segunda. Con un héroe por accidente, Grbic (dos paradones tras sustituir a Oblak lesionado), y una leyenda en ciernes, Reinildo (garra, coraje y corazón), el Atlético se impuso al Athletic en un partido trepidante.

Cuando muchos daban por muerto a este equipo, el Atlético resucitó con el gol de Griezmann (46') y los vaivenes del VAR, que anuló un gol de Morata en el 10' y quitó al Athletic un penalti por una mano inexistente de Reinildo. Alerta naranja en LaLiga: los rojiblancos se colocan a tres puntos del Madrid y Barça a menos de 24 horas del Clásico. Lo que parecía un imposible antes de este partido (meter al Atleti en la lucha por el título), sucedió en Bilbao, con su tercer triunfo seguido en LaLiga. Así funciona este Atleti. Al son del precipicio, el sufrimiento y las agallas de Reinildo.

Si el Atlético acabó con la portería a cero fue gran parte gracias a Reinildo. Y a dos manoplas de Grbic, un héroe por accidente: mano cambiada en el minuto 84' y, sobre todo, salvador ante el cabezazo que paró a Íñigo Martínez en el 87'. El defensa mozambiqueño es de los que habla en el campo continuamente. Comió la moral a Nico Williams y a De Marcos. A ellos en particular y al Athletic en general. Es una locomotora, pero no es el más veloz; es un muro, pero no es el mejor defensa; es un talismán, aunque no sea uno de los nombres mediáticos de LaLiga. Siempre le pone ganas. Y también mucha cara, como la que puso ante Vivian en el minuto 87. El error de Figueroa Vázquez al pitar el penalti, lo corrigió el VAR. Oh Reynildo, que también salvó al equipo en el 95' con un disparo de Raúl García.

Llevaba 10 meses sin marcar como titular. Rompió la racha contra uno de sus rivales favoritos. No por su pasado txuri-urdin, que también, sino porque es el rival que más le 'pone' en cuanto a términos estadísticos se refiere: le ha marcado 13 tantos, más que a ningún otro equipo. Griezmann ya es el máximo goleador del equipo con cuatro dianas, igualado con Álvaro Morata. Al francés le empiezan a salir las cosas. Este Atleti, con Oblak lesionado (se retiró tocado del hombro y mareado en el minuto 65), es Griezmann y diez más. Ya no sólo habla el campo, como diría el Cholo, sino que también el contrato: la pesadilla del minuto 60, y su etapa como culé, pasó al olvido.

"Ongi etorri guraso en etxera", ponía una pancarta en uno de los fondos. En castellano: "Bienvenidos a casa de papá". Con esa padreada, la afición del Athletic recordó el origen del Atlético, fundado como sucursal del equipo de Bilbao. La rivalidad sana entre Athletic y Atlético es tan necesaria en LaLiga como ver a Ernesto Valverde en un banquillo, quien estuvo 903 días de retiro espiritual y que sonó incluso para el Atlético en todo ese tiempo. Pedazo de entrenador, aunque su bestia negra sea Simeone (nunca le ganó con el Athletic y fue destituido con el Barça tras una remontada del Atlético en la Supercopa de 2020). Este Athletic aspira a Champions, con los hermanos Williams, con un incombustible Muniain (508 partidos y quinto jugador con más partidos en la historia del club), con un correcaminos como De Marcos, con un pedazo de central como Yeray (partidazo) y el portero titular de la Selección, Simón.

Lo que el VAR te da (Brujas), el VAR te quita (Athletic). Puede que viniera para mejorar el fútbol, pero el VAR todavía no limpia la subjetividad de cada aficionado, entrenador o futbolista que observa una jugada a cámara lenta. Lo que se ve en las imágenes no es fútbol. Es una repetición. Ni viendo todos la misma acción, nos ponemos de acuerdo. El gol anulado a Morata, en el minuto 10 por falta a Yeray, fue fútbol ficción. Qué paradoja. En el fútbol real, como el otro día en el minuto 87' del Atlético-Brujas, el delantero rojiblanco estrelló el balón en la cara de Mignolet. En el fútbol ficción que revisa el VAR, Morata metió un golazo. El fútbol 'normal', eso sí, es injusto igualmente porque no recompensó el partidazo que hizo Morata. Por cierto, al igual que a veces podemos preguntar a los jugadores, no estaría mal que Figueroa Vázquez y Estrada Fernández (VAR) explicaran después del partido por qué anularon ese gol.

El campo paga. De Paul por Saúl y Morata por Correa fueron las dos novedades del Cholo en el once inicial de San Mamés. Joao Félix siguió en el banquillo. "Mientras esté yo, esto va por rendimiento", dice Simeone. Correa, Witsel o Saúl tuvieron su oportunidad tras el descanso. Sorprendió en la titularidad Rodrigo de Paul. En su caso, quien no fue a Sevilla, tampoco perdió su silla. Cuatro partidos después de verle en Miami, el argentino adelantó por la derecha al mismísimo Witsel. Las decisiones de Simeone son tan polémicas como las revisiones del VAR. En su caso, en la revisión de la alineación, tiene razón: el marcador dio tres puntazos al Atlético.