El Almería confirma el adiós de Garitano y la llegada de Pepe Mel
El club ha llegado a un acuerdo con su técnico para romper su vínculo. Mel, por ahora, firma hasta final de temporada.

Gaizka Garitano ya no es entrenador del Almería. El club ha informado de su marcha a través de redes sociales, con un breve comunicado en el que explican que se ha llegado a un acuerdo entre las partes para poner fin a su vínculo contractual: "La UD Almería y Gaizka Garitano llegan a un acuerdo que pone fin a la relación entre ambas partes. El club agradece al técnico su profesionalidad en esta etapa como rojiblanco y le desea suerte en el futuro". La entidad también ha anunciado la llegada de Pepe Mel, de momento hasta final de temporada.
La UD Almería y Gaizka Garitano llegan a un acuerdo que pone fin a la relación entre ambas partes.
— UD Almería (@U_D_Almeria) March 13, 2024
El club agradece al técnico su profesionalidad en esta etapa como rojiblanco y le desea suerte en el futuro. pic.twitter.com/ICPDC06OG5
Como ha venido informando Relevo, el Almería había decidido el adiós de su técnico y buscaba incesantemente opciones para el banquillo. Finalmente, la apuesta es Pepe Mel, que firma hasta final de temporada. El objetivo del club, de este modo, es ir ya preparando el proyecto para buscar el ascenso a Primera División desde esta misma campaña. Pero es cierto que el nuevo técnico aún no ha confirmado que vaya a estar al mando para el reto en Segunda.
Lo cierto es que la situación es crítica y ni el mayor de los optimistas confía en que el equipo pueda darle la vuelta. Tras 28 jornadas, el Almería sigue sin ganar ni un solo partido, algo que no había sucedido ninguna vez en la historia de Primera División. Incluso en partidos que parecían ganados como el del Sevilla, las flaquezas atrás del equipo desembocaron en un empate que no les vale para seguir luchando por la permanencia.
🔴⚪️ ¡Bienvenido, 𝐏𝐞𝐩𝐞𝐌𝐞𝐥!
— UD Almería (@U_D_Almeria) March 13, 2024
✍️ El entrenador se hace cargo del equipo hasta el final de la temporada. #PepeMelRojiblanco pic.twitter.com/JWrFcHKa6g
Garitano sí logró inyectar al equipo en una competitividad que les ha llevado a poner contra las cuerdas a Real Madrid, Barcelona o Atlético de Madrid, aunque sin el éxito del triunfo. Por ello, pese a que los resultados no llegaban, Garitano ha ido aferrándose al puesto, siempre con el horizonte de lograr una victoria que les otorgara una nueva dinámica.
No ha llegado y, además, su situación era insostenible. La relación con la plantilla era tensa, con diferentes criterios y opiniones y se fue acrecentando con el paso de las semanas. Dentro del vestuario, de hecho, no entendían algunas de las decisiones de los últimos partidos. Las gotas que colmaron el vaso fueron los inesperados cambios defensivos ante el Celta y los errores cometidos ante el Sevilla cuando ya rondaban la ansiada victoria.
La directiva le respaldó hasta el final
Mohamed El Assy, CEO del club, compareció en rueda de prensa a principios de febrero y responsabilizó de la dura situación del club a Vicent Moreno, primer técnico de la campaña: "No quiero entrar más en esto para que no se convierta en un respuesta y respuesta entre él y yo porque ésta no es nuestra manera de proceder. Únicamente quiero comentar dos cosas que él dijo en público y le aconsejaría que no siguiera hablando más sobre este club porque está dañando su imagen como entrenador en España y Arabia Saudí, que son en las dos únicas ligas donde ha trabajado".
Y para terminar se sentenciar al extécnico, expuso la situación que se encontró el ahora destituido Gaizka: "Lo primero, él comentó que no entendía por qué había sido despedido y yo le digo que no ganó ni un solo partido con el equipo al completo, él ha sido el único entrenador que ha tenido el equipo al completo porque cuando llegó Garitano, se encontró únicamente con 11 jugadores de la primera plantilla. Y, además, con esta plantilla al completo, el equipo no podía correr más de 60 minutos, por lo que creo que era suficiente razón como para que no continuara y razón suficiente como para que todo el mundo viera que había un problema".
El técnico gozó de 18 partidos de Liga y dos de Copa del Rey para sacar a los suyos del pozo. Los saldó con un triunfo copero, siete empates y doce derrotas, que fuerzan que el Almería continúe cerrando la clasificación en Primera División. Con diez puntos en 28 jornadas, la salvación está a 14 puntos con solo 30 en juego, una auténtica utopía. Por ello, la entidad ha decidido dar un paso al frente y empezar desde ya a preparar la próxima temporada y el que es desde ya el sueño del ascenso.