Ancelotti se aleja del tremendismo: "La autocrítica es fundamental pero no debemos tirar todo a la basura"

Carlo Ancelotti se apoyó en sus "48 años" de experiencia en el fútbol para defender que su Real Madrid, vapuleado por el Barcelona en el Clásico de este sábado (0-4), no mereció una derrota tan abultada. "Hasta el 0-1 fue un partido igualado. Tuvimos cuatro manos a mano con el portero. Generamos ocasiones, no marcamos por poco, hubo intensidad... Nos faltó acierto. Después su 0-2 nos quitó toda la energía", explicó el italiano, que se autoinculpó por los espacios que dejó su equipo en la última media hora: "Fui yo el que, con la entrada de Modric, ordené que nos quedásemos uno contra uno atrás para arriesgar y tratar de empatar".

Carletto, que explicó el planteamiento ("era un 4-4-2 claro para morder") y lamentó que los culés hiciesen tanto daño "a la contra", se alejó de la crítica feroz y expuso su fe en que el traspié servirá para "aprender": "Ahora no debemos bajar los brazos. Llevábamos 42 partidos de Liga sin perder. Y de la última derrota (en el derbi del Metropolitano de 2023) ya nos levantamos con éxito. La temporada es muy larga y estoy seguro de que acabará de una forma similar a la pasada".

De igual manera, Ancelotti cree que el resultado "no refleja lo que pasó en el campo". "Merecieron la victoria por su efectividad, pero competimos muy bien durante 60 minutos. Llevo 48 años en esto y sé que la primera parte fue positiva; cumplimos con la idea. De una derrota se pueden extraer muchas cosas. La autocrítica es fundamental y debemos hacerla, pero no tirar todo a la basura. Eso no sería ni serio ni correcto".

Además, el preparador se mostró crítico con Marcus Sorg, el segundo entrenador de Flick, con el que tuvo un pequeño rifirrafe captado por las cámaras de televisión después del 0-4 de Raphinha. "Pasó algo con el asistente, no con Hansi. No ha sido un señor: celebró el gol enfrente de nuestro banquillo", criticó Ancelotti.

A Mbappé, que cayó ocho veces en fuera de juego y marró varias ocasiones claras contra el destacado Iñaki Peña, lo defendió: "Ha estado como el resto, de más a menos. Sabíamos que ellos tiran la línea alta. Nos faltó poco para aprovecharlo. A veces cayó en fuera de juego, pero eso es bastante normal por cómo juega el Barça. Ha creado tres o cuatro oportunidades para marcar". El riesgo que asumen los culés, que provocaron que los blancos cayesen hasta en 12 ocasiones en posición antirreglamentaria, no le sorprendió: "Sabíamos que mantendrían el estilo".

En cualquier caso, el técnico tiró de hemeroteca y defendió que la imagen del conjunto merengue no fue la misma, por ejemplo, que en Lille, donde cayeron 1-0 en la segunda jornada de la Champions. "Es una derrota distinta a aquella. Allí no competimos, jugamos muy mal; aquí el resultado pesa, pero sobre todo porque arriesgamos mucho en la última media hora para intentar empatar. Después de la última derrota por 0-4 contra el Barcelona ganamos Liga y Champions", recordó.

Además, Ancelotti hizo un aparte con la afición, que abandonó el Bernabéu con el último tanto azulgrana y despidió al equipo con pitos: "Quiero darles las gracias: empujaron hasta el 90'. Tenemos que seguir en la línea de la primera parte. Es un momento duro, difícil por ser un Clásico, pero estoy seguro de que lo haremos mejor y de que podemos remontar la desventaja".