Bellingham para castigar la presión del Barça: así puede dañar a Xavi

Ni el más optimista podía aventurar el impacto que tendría Jude Bellingham en el Real Madrid en sus primeros dos meses de competición. Ya no solo en lo futbolístico, sino en lo emocional, terreno que el inglés está logrando dominar como si ya supiese lo que es jugar en el Real Madrid. El ex del Dortmund se plantará en su primer Clásico a pleno rendimiento en un rol que le sienta a las mil maravillas y que parece hecho para él: 11 goles y tres asistencias en 12 partidos. O lo que es lo mismo, más de un gol producido por cada partido.

Los datos de LaLiga son contundentes y muestran que Bellingham es el futbolista de la competición que más goles produce por cada 90 minutos: 1,06. Más allá de si es delantero o no -en realidad no importa de lo que juega, sino de lo que el rival cree que juega-, Jude está dominando distintas facetas que están maquillando el pobre inicio de Rodrygo, la lesión de Vinicius y, claro, la baja de Karim Benzema. No es solo rendir en el Real Madrid, sino liderar a un equipo en horas de necesidad. Además, los datos señalan que es el jugador que mejor diferencial acumula entre lo generado (goles y asistencias esperadas) y lo transformado, con un 0,54 de diferencia, lo que denota una enorme precisión y calidad en su gesto final.

La realidad es que Bellingham está siendo el mejor delantero del Real Madrid este inicio de curso. Y el Barça de Xavi deberá pensar en Jude como tal, un atacante de movimientos muy largos en el eje vertical y con mucha habilidad para llegar cuando los centrales rivales no le están mirando. La mayoría de acciones de remate de Bellingham se dan en las cercanías al área pequeña: según StatsBomb, el inglés ha marcado ¡4! goles más de lo que dicta la estadística avanzada. Detecta bien las zonas de remate y las está aprovechando. Y el Barça deberá vigilar.

El equipo de Xavi no es la roca defensiva que fue la pasada Liga. Las bajas continuas le han lastrado competitividad y capacidad evolutiva en la idea de juego, y la presión está siendo menos eficiente, lo que termina dejando al equipo con menos herramientas para contrarrestar al rival. En este escenario, Oriol Romeu viene sufriendo mucho en transiciones defensivas porque el equipo le obliga a hacer esfuerzos muy largos y sale en muchas de las fotos negativas del equipo. ¿Qué sucede si se suma Bellingham a la ecuación?

El 81% de los remates del inglés en LaLiga han sido en área rival, y el 27% en el área pequeña. Jude es un jugador que carga fenomenalmente bien el punto de penalti y domina distintos tipos de remate. El Barça está sufriendo cuando le giran, algo que sucede con mucha facilidad este curso, y Bellingham podría ser un recurso muy dañino para Ancelotti atacando zonas interiores cuando los mediocentros azulgrana salten fuera.

Este tipo de amenaza coincide con los puntos débiles que ha mostrado el FC Barcelona en este inicio de curso. De ahí que Xavi deba redoblar los esfuerzos en tapar zonas centrales, quizás renunciando a un punto de agresividad en sus saltos y priorizando mantener la estructura para que el Real Madrid tenga que jugar por fuera, espacio que salvo Vinicius no suelen sacar demasiadas cosas positivas para los suyos.

Bellingham es el futbolista de LaLiga que más pases que rompen una línea rival ha recibido (110), un dato que indica que el rol del jugador inglés es el de esperar a la espalda de los centrocampistas rivales, sea cual sea la altura, preferiblemente escorado en el perfil zurdo, zona en la que Kroos y Camavinga se convierten en sus mejores socios para activarlo. En el último tercio, Jude es el séptimo jugador (40) que más pelotas ha recibido entre líneas, solo superado por seis delanteros. Es un atacante vestido de interior. En el Barça, solo Lewandowski (38) ha recibido más pases en área contraria que Bellingham (27).

Con pasadores como Kroos o Fede Valverde, además de la movilidad de Vinicius y Rodrygo, Bellingham tiene un espacio repleto de variantes para moverse, relacionarse y pensar. A un talento como el suyo, Ancelotti le ha sumado una paleta de recursos colectivos que nacen desde lo sensorial para permitir que se exprese y pise zonas desconocidas pero que le son naturales a su paso.

La mejor forma para que el Barça pueda controlar a Bellingham no será añadiendo a un central extra o buscar negarle recepciones siendo muy agresivo, sino principalmente organizándose mejor a través del pase. "El pase es el que nos organiza", que decía el segundo de Scaloni, Matías Manna. Si los de Xavi no pueden correr tanto como antes porque carecen de los perfiles necesarios, será mejor que ante la habilidad y poderío de Bellingham para abrir espacios y hacerlos si cabe todavía más grandes, el equipo se junte hasta que desaparezcan.