Berenguer reina en la locura de San Mamés y el Athletic suma una victoria de Champions ante el Girona

Dani Vivian se convirtió, finalmente, en el héroe del Athletic Club. El central gasteiztarra, con un despeje salvador, impidó el que hubiera sido el empate a tres minutos del final. El disparo de Jhon Elmer Solís tenia todos los visos de acabar dentro de la portería de Unai Simón, pero ahí emergió la figura del defensa del Athletic para enviar el balón a córner. Era el minuto 94 y la afición rojiblanca respiraba tranquila después de un partido en el que su equipo había sido muy superior frente a un Girona que concedió mucho, sobre todo atrás. Y esto ante un equipo en el estado de forma en el que se encuentra el Athletic se paga caro. 49 puntos, a dos de los puestos Champions y con medio billete en la mano para la final de la Copa del Rey. No hay quien pare al equipo de Valverde.

Si Iñaki Williams hubiera tenido un poco más de acierto de cara a la portería contraria, el Athletic hubiera dejado visto para sentencia el duelo ante el Girona en una primera parte para enmarcar por parte de los pupilos de Ernesto Valverde. Solo la falta de puntería del delantero rojiblanca impidió lo que hubiera sido una goleada de escándalo en esos primeros 45 minutos. El único que acertó fue Berenguer, que se aprovechó de un error grosero de Aleix García en la salida de balón para hacer estallar la caldera de San Mamés.

No se habían jugado ni dos minutos de partido y el Athletic Club ya se había puesto por delante en el marcador frente a un Girona irreconocible. Los rojiblancos eran una máquina de recuperar balones, con Unai Gómez llevando la voz cantante en esta faceta. Qué jugador. Junto a él, otro portento físico como es Beñat Prados, cuyo paso por el Mirandés le ha convertido en un futbolista espectacular.

Con ese tanto marcado frente al Girona ya son cinco 'txitxarros' del extremo. Solo Guruzeta y el citado Iñaki Williams habían anotado más. En la primera jugada del partido se aprovechó de una mala decisión de Aleix García para coger el balón, regatear a Arnau Martínez y, con la izquierda, poner un balón imposible para Gazzaniga. Lejos de conformarse, el Athletic siguió buscando la portería del portero argentino del Girona.

Poco después, Eric García y Aleix Vidal tuvieron que tirarse al suelo para taponar el peligroso disparo de el mayor de los Williams, que más tarde falló de manera incomprensible un balón cedido por Gorka Guruzeta. El internacional por Ghana golpeó mal con todo a favor. Los gestos de desesperación eran ostensibles, conocedor de la clara ocasión desperdiciada. Esta oportunidad fue un toque de atención para un Girona que quiso despertar. Unai Simón despejó el disparo de Tsygankov. Fue un espejismo. El Athletic era el amo y señor. Williams seguía a lo suyo, generando y desperdiciando a partes iguales. El ariete, primero, se estrelló con el lateral de la red y por último con Gazzaniga. Yuri Berchiche, un avión por la izquierda, puso una caramelo en la cabeza de Williams, pero el remate de éste salió muy centrado, fácil para el arquero del Girona. San Mamés despidió a los suyos con una sonora ovación.

Puede sonar a reiterativo y a manido, pero el que perdona lo acaba pagando. Es lo que tiene el fútbol. Fue salir de vestuarios y el Girona igualó la contienda. En tres minutos hizo más que en los primeros 45'. Unai Simón se cruzó en el camino de Savi, pero a renglón seguido, el portero internacional del Athletic Club nada pudo hacer para detener el balón impulsado por Tsygankov. Pero como sucedió en la primera mitad, ese amago se reacción fue un espejismo. El Girona seguía empeñado en poner en bandeja el triunfo a los rojiblancos y otros dos errores defensivos propiciaron los goles de Berenguer y de Iñaki Williams. Miguel Gutiérrez, que tantos elogios se ha llevado en el presente campeonato, frente al Athletic quedó retratado con dos errores de bulto, sobre todo en la acción que terminó con el segundo tanto de atacante navarro. En el 3-1 tampoco estuvo fino en la lucha con un Iñaki Williams que le ganó la partida tras un envió de 40 metros de Yeray.

Y la goleada pudo ser aún mayor. Gazzaniga falló de manera clamorosa en un control, aunque luego reaccionó de la mejor de las maneras para evitar un nuevo tanto de Iñaki Williams. Solo un milagro impidió que el Girona se fuera con un carro de goles de su visita a San Mamés que vive una continúa fiesta. Una fiesta, eso sí, que bien pudo acabar en tragedia. Eric García, de cabeza, llevó primero la intranquilidad a una grada que con posterioridad vivió minutos de incertidumbre por la indisposición que sufrió uno de los aficionados que se había acercado hasta San Mamés. El partido, de hecho, estuvo parado unos minutos hasta que los servicios médicos del club, que se había acercado hasta ese sector de la grada, dieron el OK a Sánchez Martínez para que se reanudara el encuentro. Momentos de tensión en los que se vio incluso a Iñaki Williams rezando. Felizmente, todo se quedó en un susto.

La fiesta, finalmente, fue completa en un San Mamés que celebró el pitido final del encuentro con una sonora ovación. Muy bien lo tendrá que hacer el Atlético de Madrid para evitar que el conjunto rojiblanco no esté el próximo 6 de abril en La Cartuja en la final de la Copa del Rey. Eso sí, también tendrá que mejorar su puntería para evitar sustos. La apisonadora en la que se ha convertido el Athletic Club sigue su con paso firme.

FICHA TÉCNICA

3- Athletic Club: Unai Simón, Lekue, Vivian, Yeray (Paredes, min. 85), Yuri, Ruiz de Galarreta, Prados (Mikel Vesga, min. 85), Unai Gómez (Oihan Sancet, min. 73), Berenguer, Iñaki Williams, Guruzeta (Nico Williams, min. 73)

2- Girona: Gazzaniga, Arnau, Eric García, Juanpe, Miguel Gutiérrez, Aleix García, Yangel Herrera (Solis, min. 89), Savio, Iván Martín (Portu, min. 73), Tsygankov (Stuani, min. 89), Dovbyk

Goles: 1-0: Berenguer (min. 2), 1-1: Tsygankov (min. 49), 2-1: Berenguer (min. 57), 3-1: Iñaki Williams (min. 60), 3-2: Eric García (min. 75)

Árbitro: José María Sánchez Martínez. Amarilla a Lekue (min. 25).