REAL MADRID

La lucha vecinal contra la Caja Mágica no retumba como la del Bernabéu: "Este es el vertedero sur y a nadie le preocupa"

Relevo habla con vecinos y la Asociación de Butarque sobre una problemática menos mediática: "Nos sentimos ninguneados y abandonados".

El Mad Cool en las proximidades de la Caja Mágica./EP
El Mad Cool en las proximidades de la Caja Mágica. EP
Jonás Pérez

Jonás Pérez

Entre la cautela y la sensación de batalla ganada dentro de una gran guerra, los vecinos de la Castellana observan al detalle las consecuencias del parón en los conciertos del Santiago Bernabéu. Mientras, el Real Madrid, como ha informado Relevo, trabaja a contrarreloj para encontrar una solución al ruido del estadio. Unas medidas que jamás habrían llegado sin el trabajo incesante de las asociaciones de los alrededores del campo, ni sin el trabajo de abogados para poner fin a un caos sobre sus calles que jamás imaginaron. Quizás el contexto anterior ni siquiera era necesario porque no existe persona en este país que se haya mantenido al margen de este conflicto de enormes dimensiones mediáticas. Siempre en primer plano, cuentas virales, una problemática social de grado superior... A escasos kilómetros de allí, los barrios del sur también sufren las consecuencias del ruido de la Caja Mágica o el hedor del vertedero, pero su voz no retumba. Se disuelve, se pierde bajo las paredes de sus casas bajas y su lejanía del centro de la ciudad. Mientras el Bernabéu se insonoriza, las voces de Villaverde continúan silenciadas.

Un tuit de Rebeca Martínez alertó de una problemática hasta ahora inexistente para aquellos que no quieren oír. Su publicación cuenta con 2.000 retuits, 5.000 likes y casi 200 respuestas y no hace más que reflejar en un vídeo al infierno que se enfrentan los vecinos que viven en los alrededores de la Caja Mágica cuando hay concierto, festival o tenis. En su reclamo no solo entra en juego la molestia, sino el enorme contraste en el trato con respecto a la zona del Bernabéu. Desde todos los ámbitos. Perdón por la parte que nos toca. Relevo ha contactado con la autora del viral mensaje para conocer cómo es un día de eventos. Pero, aunque ya lo escribía, no deja de sorprender que afecte, incluso a dos kilómetros de sus domicilios.

"Vivo un poco retirada y no lo sufro tanto. Estoy a dos kilómetros, en Los Rosales. Me divide la M-40 del otro barrio y la Caja Mágica se escucha perfectamente. Cuando hay conciertos escuchas las pruebas de sonido y todo. Con los festivales estás hasta las cuatro de la mañana. Con todas las ventanas cerradas y se sigue oyendo. Me dice la gente que qué exagerada, pero se oía mucho. Subí el vídeo por ponerlo y se hizo bastante viral", cuenta.

Ella no deja de ser una usuaria más de la red social que, como vecina del barrio, siente indignación al ver cómo siempre se escucha a los mismos. "El 1 de junio era la final de la Champions coincidió con un festival, Río Babel, con Green Day. Estaba en el salón de mi casa y se reconocían las canciones, la música y todo", recuerda. Rebeca Martínez lo ve desde una perspectiva más de a pie, pero hay otra mucha gente que combate este problema desde primera línea del frente. Gente que no da crédito a cómo el huracán mediático del Bernabéu ha arrasado con todo, mientras su voz es ignorada: "Este es el vertedero del sur y así nos consideran desde todas partes. A nadie le preocupa".

Una asociación desesperada: «Sentimos rabia e indignación por la diferencia de trato»

La Asociación de Vecinos Independiente de Butarque está a cuatro kilómetros de la Caja Mágica y aun así les afecta en su día a día cada vez que hay conciertos. Desde ella, luchan con las autoridades para que se haga justicia con su barrio, no solo por el ruido del recinto, sino también por otras medidas que cambian sus vidas como el crematorio o el vertedero. Años de lucha en silencio, alejados de los medios de comunicación y sin encontrar ningún resultado. En Relevo, su presidenta Verónica ofrece más detalles de cómo sufren los conciertos: "En ruido desde luego sí lo sufrimos. Otros vecinos sufren más la problemática de los aparcamientos o de la movilidad del barrio, pero nosotros el otro día, con el festival del primer fin de semana de septiembre se escuchaba hasta las dos de la mañana como si estuviera en el parque del barrio el concierto".

"Sentimos rabia e indignación por la diferencia de trato"

Verónica presidenta de la Asociación Vecinal de Butarque

¿Pero se cumple la normativa? Para los vecinos, en base a mediciones realizadas, no. Aunque les aseguran que todo es normal... "Durante la mañana te da más igual, pero en el ruido de la noche… Y más si tienes las ventanas abiertas. Se escucha muchísimo. Totalmente sobrepasa el límite de decibelios. Nos llegaron respuestas desde Perales del Río, que es un barrio que está a unos dos kilómetros del nuestro, de Getafe ya. Se escuchaba desde allí. Tú sigues el río y se sigue escuchando", continúa. Un martirio que viven continuamente, aunque haya tardado tanto en llegar su ruido mediático: "Lo hemos vivido desde hace muchos años, desde que hicieron la Caja Mágica y empezaron a usar la zona de fuera para los festivales. Sobrepasa lo normal".

El problema ya no es tanto el ruido sino la respuesta de las autoridades a su reclamo por el ruido. Un asunto de clases: "Se ha hablado con el Ayuntamiento y se ha intentado llevar a través del área de Medioambiente. La cobertura de los medios con el tema del Bernabéu… Evidentemente es mucho más mediático, pero también se nota muchísimo el poder que tienen los vecinos que viven en la zona de Chamartín. Evidentemente los abogados con los que cuentan ellos no son los que tenemos nosotros en los barrios del sur, donde vive gente obrera, menos cualificada, muchos inmigrantes, gente que no tenemos el sustento económico que tienen allí para poder llevar denuncias a cabo".

La normativa legal y la manifestación que abriría telediarios

Por supuesto, la respuesta de la autoridad competente es que todo se adapta a la normativa legal, algo que podrían tumbar si contaran con los recursos suficientes para ello. "Pero es que siempre nos responden eso. El problema que tenemos en los barrios del sur normalmente es que todo es legal, pero casualmente siempre lo ponen en sitios donde el resto de la gente no lo quiere. Ese es el resumen", reclama.

"Nos sentimos siempre ninguneados y abandonados"

Verónica presidenta de la Asociación Vecinal de Butarque

Si su único problema fuera la Caja Mágica... Butarque y los barrios de sus alrededores también han tenido que sufrir durante los últimos años otros problemas que vienen a atentar contra su tranquilidad: "Nos pasa ahora con el crematorio de la M-40, nos pasa con las depuradoras y nos pasa con todo. Todo es legal, pero qué casualidad que, por lo que sea no está cerca de las casas del centro, está cerca de las casas del sur".

La pregunta es clara. El Bernabéu ha parado sus conciertos un año, el Ayuntamiento intervino y los vecinos han ganado unos meses valiosos. ¿Qué sensación queda para aquellos que llevan tanto tiempo luchando para nada? "Sentimos rabia e indignación por la diferencia de trato con los barrios, cuando el Ayuntamiento de Madrid debería tratar por igual a los 21 distritos. Cosa que no sucede, como todos sabemos. En cualquier cosa, nos sentimos siempre ninguneados y abandonados".

"Como somos los curritos, les da igual que sigamos protestando"

Verónica presidenta de la Asociación Vecinal de Butarque

No por ello dejarán de luchar, aunque la esperanza cada vez sea menor. "Creo que va a seguir todo exactamente igual", comienza. Para relatar, entonces, cómo se han silenciado mediáticamente sus reclamos: "Hemos hecho movilizaciones, por ejemplo, movilizaciones enormes el pasado 17 de septiembre por el tema del crematorio que si se hubiera hecho en la Castellana hubiera abierto telediarios a nivel nacional. Pero como es en Villaverde y en Usera a nadie le interesa. A nadie le preocupa, este es el vertedero del sur y así nos consideran desde todas partes. Desde las administraciones y desde todas partes, así nos consideran. Seguiremos soportando las molestias que nadie quiere, por supuesto".

La fe de los «curritos»

Desde la Asociación de Butarque recuerdan también cómo quitaron el Mad Cool de Valdebebas por la molestia a los vecinos... cuando los vecinos de la Caja Mágica sienten lo mismo: "Es que el recinto no está preparado". Y como la instalación en cuestión, otras muchas: "Pero a qué barrio afecta, esto es la que hay que ver. Como el vertedero. Como los que soportamos los olores, la mosca negra, los mosquitos y toda la contaminación del sur… Como somos los curritos, pues a ellos les da igual que sigamos protestando".

Relevo también se ha puesto en contacto con Daniel, un vecino más próximo todavía al recinto: "Yo vivo a diez minutos andando, calculo que está a un kilómetro. No te voy a negar que me gustan los conciertos y no me molesta que haya ambiente al lado de casa, pero es excesivo. Yo mismo he ido al Mutua y a un festival de reggaeton (se refiere al Reggaeton Beach Festival) y claro, desde dentro perfecto. Luego hay otros que los escucho desde casa y hace gracia un rato hasta que deja de hacerla".

"Nuestras casas no valen dos millones, pero deberíamos tener el mismo derecho"

Daniel vecino próximo a la Caja Mágica

Su testimonio es una forma de silenciar a todos aquellos que creen que es exagerado y lo ridiculizan en redes sociales. Incluso para los más jóvenes es un asunto indignante, pese a que puedan ser usuarios de ese tipo de eventos: "Nuestras casas no valen dos millones de euros, pero deberíamos tener el mismo derecho". Al menos la edad le hace tomárselo con más humor: "Una vez hablé con los amigos de vender entradas para mi terraza como si fuera un palco VIP. No lo hicimos obviamente".

En definitiva, se trata de una lucha de clases: "Cuando es el tenis aquí aparcar es imposible. El barrio pasa de tener coches de pobres a ver por todas partes Mercedes y BMW, todo cochazos". Aun así, como grita Verónica desde la Asociación Vecinal de Butarque, hay que seguir en pie: "La batalla por perdida nunca se puede dar. Ver la diferencia de trato refuerza a la gente en que lo podemos conseguir. Teníamos el sentimiento de resignación de que esto era así, pero al ver que allí lo han solucionado… Nos da un poco más la razón. Nosotros somos iguales, por qué vamos a tener que soportar esto. Las movilizaciones van a seguir. Si algo tenemos aquí es la calle".

Es la otra cara de la batalla por la paz en las casas. Mientras el Bernabéu se insonoriza, las voces de la Caja Mágica siguen silenciadas: "Este es el vertedero del sur".