El Betis se conjura para la Champions y no le teme al Barcelona: "Lo veo con ambición"

Ilusionante. Ese es el adjetivo que mejor define el final de temporada que le viene al Betis. En Heliópolis no se podían ni llegar a imaginar un escenario así a principios de temporada, menos aún habiendo pasado uno de los peores baches de la era Manuel Pellegrini. Pero el chileno lo ha vuelto a hacer. Jamás se le cae el equipo. Y esta vez se ha levantado con más fuerza que nunca. Dispuesto a luchar por todo.

En Conference las cartas ya están sobre la mesa. Desde hace tiempo. El Betis, de lograr el pase ante el Jagiellonia, se meterá por primera vez en su historia en unas semifinales europeas, pero la ilusión no se queda ahí. Seis victorias consecutivas en liga han metido a los de Pellegrini de lleno en la lucha por la Champions. Es más que posible que la quinta plaza dé acceso a la mejor competición del viejo continente y los verdiblancos la quieren ocupar como sea.

Con Athletic Club y Villarreal por delante, el Betis sueña despierto. Y lo hace con una mentalidad que jamás antes se había visto por Heliópolis: convicción. "Al equipo lo veo muy bien, cuando los resultados son tan positivos siempre es más fácil estar contentos. Pero, cuando se perdieron un par de partidos, este grupo siempre fue muy fuerte para intentar superarlo en base al convencimiento en el trabajo que se hacía. Lo veo, que para mí es lo más importante, con ambición, no conformarse con lo que estamos haciendo ni con haber ganado un derbi. Fue importante ganarlo ante nuestro tradicional rival en casa, pero más importante eran los tres puntos para seguir peleando por aspiraciones importantes en LaLiga. Están contentos y alegres, pero con mucha ambición y muy conscientes de que tenemos que buscar objetivos mayores", comentó Pellegrini en rueda de prensa.

Pero uno de los grandes culpables de que esa esfera competitiva haya nacido en este Betis es el propio entrenador. Pellegrini invitó a toda la plantilla a una comida el pasado jueves. El motivo que trascendió fue la primera victoria del técnico en un derbi de liga, pero la realidad es que el trasfondo es mucho mayor -y mejor-: hay unión para luchar por la Champions.

Al igual que ya ocurrió precisamente con el derbi, en el Betis se habla abiertamente de entrar en la competición más exigente de Europa. El propio Isco Alarcón fue, como no podía ser de otra forma, el primero en marcar el camino al vestuario. Tras el derbi mostró ambición y prometió 'dar guerra': "El secreto es no haber cambiado nada, seguir creyendo en nuestro modelo y nuestra forma de jugar. El míster ha sido muy importante. Hemos seguido creyendo en lo que hacemos. Trabajar, no desistir, no rendirse, no venirse abajo... Y sabiendo que todavía no hemos conseguido nada, tenemos que seguir luchando con humildad. Tenemos que luchar por conseguir las estrellitas, no sé si aquí en el Villamarín, que estará en obras, o en La Cartuja. Tenemos que traer el parche de las estrellitas", deslizó en los micrófonos de DAZN.

Al malagueño lo ha seguido, también, Pablo Fornals. En una entrevista con los medios del club, el centrocampista se sumó a la lucha de Isco y, además, le copió un término que ya hace soñar a la afición verdiblanca: "Por qué no seguir pasando fases en Conference y llegar lo más alto que podamos. Y en LaLiga, igual. Que el Betis se metiera en Champions sería espectacular. Es la única competición que no he tenido aún la suerte de jugar y poder escuchar esa musiquita y llevar el parche de las estrellas, como dijo Isco, en la manga sería maravilloso".

Un vestuario unido. Con una idea fija en la mente. Con ambición. Por todos lados. Un señor equipo entrenado por un señor entrenador. Manuel Pellegrini. Y detrás, una afición loca por la fiesta. Este es el Betis más ilusionante de los últimos tiempos. El que se ha ganado el derecho a luchar por todo... y más.