La fiesta más extraña del Real Madrid: la RFEF recula y no le dará la copa de campeón en Granada, sin Bernabéu…

El Real Madrid celebrará su Liga número 36, conseguida el pasado sábado, con retraso y entre distintos acontecimientos que han impedido festejar el título con normalidad. Primero, el desfase horario con el partido del Barcelona provocó que los blancos ganasen al Cádiz y tuviesen que esperar dos horas y media hasta saber si eran campeones; en vista de que no dependían sólo de sí mismos y de la cercanía del encuentro ante el Bayern (miércoles, 21:00), el club optó por que la plantilla no acudiese a Cibeles y aplazó la fiesta con la afición al domingo 12 de mayo.

Ahora, la última controversia surge con la fecha en la que el equipo recibirá el trofeo sobre el terreno de juego. Según recoge la Agencia EFE, la RFEF comunicó a la entidad presidida por Florentino Pérez su intención de entregarle la copa este mismo sábado en Granada, en el choque que enfrenta a los de Ancelotti y el conjunto de Sandoval en el Nuevo Los Cármenes (18:30).

La Federación entendía que será el primer partido con el Madrid oficialmente como ganador y que, por tanto, era la fecha idónea para proceder con el acto. Sin embargo, en las oficinas del Bernabéu reaccionaron "con sorpresa" a la voluntad federativa y dejó claro que no quieren recibirlo ese día "por respeto" al rival.

Si el Granada no gana, o aún haciéndolo si el Mallorca puntúa ante Las Palmas, el cuadro andaluz certificará matemáticamente su descenso de categoría. El club del Bernabéu entiende que ese posible escenario no resulta el más propicio para, mientras unos lloran, que otros celebren, y más cuando puede aplazarse a cualquiera de las dos citas que les quedan por disputar en casa a los de Carletto (Alavés y Real Betis). Finalmente, la Federación reculó, entendió el argumento blanco y no le entregará la copa de campeón el sábado. Eso sí, aún no se ha decidido oficialmente cuándo se le daría aunque todo parece indicar que será el próximo martes contra el Alavés.

Sin duda, los festejos por la Liga están siendo los más extraños de los últimos tiempos. El equipo merengue tuvo que esperar al desenlace del Girona-Barça y los futbolistas de la primera plantilla siguieron los últimos minutos del duelo desde los palcos del Nuevo Bernabéu. Con el pitido final llegó la fiesta y los abrazos del equipo en el estadio, rodeados de sus familias, pero ninguno acudió a Cibeles para compartir la alegría con los seguidores que se congregaron en torno a la Diosa.

El motivo lo explicó Ancelotti en sala de prensa: "La situación es distinta a la de hace dos años. Ahí estaba en nuestra mano, si ganabas al Espanyol podíamos celebrar. No merece la pena esperar, si tenemos que celebrar lo haremos el próximo domingo. No pasa nada, nuestra afición lo entiende perfectamente. Las cosas son diferentes, todavía no hemos ganado, no nos lo podemos plantear. Vamos a casa tranquilos a pensar en el Bayern". El grupo se entrenaba al día siguiente a las 11:00 y estaba citado a las 09:30 en Valdebebas. No hubo ni cena de celebración.

Entre los fans, mientras, existió división de opiniones por la decisión de que los futbolistas no se dejasen ver en la céntrica plaza. Sí lo harán el domingo, entre las 11:00 y las 13:00, en un plan todavía pendiente de concretar con las instituciones (incluirá las clásicas visitas a la Comunidad y el Ayuntamiento) pero que no pasará por el Bernabéu. El estadio estará ocupado por el concierto The Domingueros, de música electrónica. El horario también resultará impropio: por la mañana, en lugar de las clásicas celebraciones que tenían lugar en franjas más nocturnas.

"No han venido porque están pensando en la Champions y lo entiendo, pero podrían haber estado un rato por Cibeles. Me ha fastidiado un poquillo que no vinieran, aunque han dicho que se celebrará el próximo domingo. Lo importante es que ya hemos ganado la Liga", le decía un aficionado del Real Madrid a Relevo el pasado sábado.

Otro hincha se lamentaba un poco más: "Es verdad que está la Champions, pero al final es un título de Liga y no hay que minusvalorarlo. Yo, como aficionado, lo he echado un poco de menos". A Jimmy, que se había desplazado hasta Madrid, le pareció normal la ausencia de los jugadores. "A estas horas de la noche es normal que no hayan venido. Tienen que descansar para el partido del miércoles. Si hubiesen venido habría sido la guinda del pastel, pero ojalá celebremos la Champions y la Liga a la vez".