Todas las piezas del clan Lim desaparecen de Valencia: la mano derecha y el heredero siguen el camino de los ojos de Peter y la hija repudiada por Mestalla

La toma de posesión de Kiat Lim como presidente del Valencia CF, el adiós de Lay Hoon Chan de dicho cargo y el ascenso de Javier Solís a Director General, en la práctica, no suponen demasiado cambio de funcionamiento dentro de la entidad. Sin embargo, sí que dejan un matiz importante en el club: por primera vez desde 2015 no habrá nadie del 'clan Lim' en la ciudad de València para supervisar el club.

Lim aterrizó en la capital del Turia a finales de 2014, pero a efectos reales no tomó el club hasta casi el año 2015. Cuando lo hizo, apenas unos meses después 'se cargó' a Amadeo Salvo y puso como presidenta a Lay Hoon Chan. Junto a ella aterrizaron en la ciudad Kim Koh, que residió en la misma hasta 2023, y un par de años después Anil Murthy o Joey Lim. Hoy ya no queda nadie de todos ellos, al menos en la ciudad, aunque todos ellos seguirán manejando la entidad desde la distancia, salvo el denostado Anil Murthy. Han sido muchos años de singapurenses en el día a día del club ¿Quién es quién?

No hay mucho que aclarar sobre quién es Peter Lim. El dueño, el máximo accionista, el poseedor del 92% del capital del club, el que lleva desde 2019 sin pisar la ciudad y todos los indicios apuntan a una progresiva salida a medio plazo. Peter seguirá siendo el dueño del club aunque si actúa de la misma forma con el Valencia CF que con su empresa matriz, Thomson Medical, será su hijo quien decida pero siempre tras consultar a su padre.

Kiat Lim no es solo el primogénito de Peter, sino que es el heredero. Con su nuevo cargo de presidente, Lim junior se hace cargo de la última empresa de su padre en la que todavía no tenía un rol ejecutivo, algo que ha sido para él una responsabilidad más que una ilusión. Kiat será quien hable a diario o semanalmente con Javier Solís y quien ejecute las decisiones tras hablarlas con su padre. El hijo de Peter entró en escena en 2022 para prometer que aparecería más tras ser nombrado consejero, tras 3 años ausente ahora ha sido nombrado presidente, aunque en las oficinas de Mestalla fue claro: no se quedará en València.

Lay Hoon abandona el cargo de presidenta del Valencia Club de Fútbol, pero salvo que se jubile, seguirá ligada a la entidad aunque incluso haya dimitido no solo de la presidencia sino del consejo de administración. Lay Hoon ha sido protagonista durante su carrera de la gestión económica de todo el conglomerado empresarial de Lim. Así que desde ahora, lo que antes era focalizar en el club de Mestalla, ahora será tratarlo como una empresa más y, si así lo considera necesario como lo consideró en 2022, Peter Lim perfectamente puede volverle a hacer aparecer en escena. Aunque estando su hijo parece más complejo que vaya a tener una tercera etapa como presidenta. Aun así, de 2017 a 2022 (cuando Anil Murthy fue presidente), Lay Hoon siguió desde la distancia el club. Ahora desaparece de la primera línea, pero no de ser parte de Meriton Holdings.

Desde que Peter Lim aterrizó en València en 2014/2015 hubo una persona que siempre estuvo presente: Kim Koh. De él se decía que hasta pedía cuentas a los empleados de cuántos balones se compraban, era una persona fría, arisca y que reconocía en privado que no tenía ganas ningunas de estar en València. Cuando se marchó del día a día del club, allá por 2020, llegó Joey Lim otra persona de confianza de Peter (con cero parentesco familiar pese al apellido), que incluso ejercía de chófer del asiático en Singapur en las visitas importantes. Su relación era estrecha y también reportaba de absolutamente todo al dueño.

Ninguno de los que siguen ya al club de seguido, pero durante este último año, de vez en cuando Kim Koh ha hecho visitas a la capital del Turia para supervisar como funciona la entidad y en el día del nombramiento de Kiat Lim como presidente, Peter mandó a ambos, tanto a Joey como a Kim Koh, para supervisar como era el nombramiento de su hijo.

En un escalón más inferior a los mencionados están los miembros del consejo de administración che, a los que se reporta realmente para que estos terminen reportando a Peter Lim. Este consejo de administración, aparte de por Lay Hoon, Kiat, Kim Koh y los mencionados asiáticos Raymond y Khojama, está compuesto por Ong Pang Liang y Ng Ser Miang. Su rol en València es nulo, aunque Raymond sí acudió a la toma de poder de Kiat y Khojama fue presidente del club en un momento de transición.

Lo importante de estas personas del 'clan Lim' es en clave Singapur: a ellos se les reporta, con ellos se toman las reuniones y son ellos los que en última instancia terminan hablando con Peter Lim.

En un escalón mucho, mucho más inferior está Kim Lim, la hija pequeña de Peter, llegó al club entusiasmado, hasta el punto de que se dejaba ver por la ciudad deportiva de Paterna con los jugadores, reservaba Mestalla para sesiones de fotos o publicitarias e incluso salió alguna noche de fiesta por la ciudad coincidiendo con miembros de la plantilla. Tras el cambio en la gestión de Peter, Kim fue repudiada por los aficionados con razón, no solo por las decisiones de su padre, sino por su soberbia en redes: 'El club es nuestro y podemos hacer lo que queramos', llegó a poner en Instagram un día. Desde entonces ha desaparecido del entramado valencianista y de hecho nunca ha estado muy volcada en las empresas de su padre, sino más en ser 'influencer'.

Y ya excluido del clan Lim está Anil Murthy. El que fuera presidente de la entidad entre 2017 y 2022 nunca fue realmente parte del clan de Peter Lim, de hecho él mismo reconocía en un podcast que su cargo como presidente del club le sorprendió hasta a él mismo porque Peter se lo dio tras apenas haber hablado con él un par de veces en persona.

Su cabeza rodó no tanto por su lamentable gestión del club -a fin de cuentas él ejecutaba lo que Lim pedía-, o por sus pésimas formas mandando callar a Mestalla y sin tener la educación o formas que al menos Lay Hoon sí ha mostrado. Sino porque se filtraron los audios en los que hablaba claramente de forma peyorativa de Peter Lim "es un hooligan"; "Está senil" y eso no solo le costó el puesto en València, sino ser excluido del clan Lim.