Competición cierra durante dos jornadas parte del Metropolitano por los gritos racistas a Nico Williams

El Atlético de Madrid se jugará la clasificación a la Champions League sin público en la grada de animación del Fondo Sur, lugar donde se sitúa el Frente Atlético. El comité de competición ha decidido que, tras los gritos racistas hacia Nico Williams del pasado sábado y por los que se paró el partido, se ordene el cierre parcial del Estadio Metropolitano durante dos jornadas. El club recurrirá la decisión y actuará contra la persona que ya ha sido identificada por la policía.

La sanción ha sido tajante y el primero punto dice lo siguiente: "Imponer al Club Atlético de Madrid una sanción de clausura parcial del recinto deportivo por un período de dos partidos y una sanción pecuniaria de 20.000 €, por la comisión de infracciones muy graves tipificadas en los artículos 69.1.c), 69.2.d) y 76.2, apartados b) y d), ambos del Código Disciplinario de la RFEF".

A pesar de que la policía identificó a la persona que realizó esos insultos y que el club afirmó que lo expulsarán como socio, la sanción afecta a toda la zona de la grada de animación: "De conformidad con lo previsto en el artículo 57.1 del Código Disciplinario de la RFEF, se requiere al club sancionado para que, antes de las 12:00 horas del día 3 de mayo próximo, identifique la estructura de las gradas del recinto deportivo a fin de determinar la zona del estadio objeto de cierre que, según el acta arbitral, afectaría al sector situado en la grada fondo sur del campo", afirma el segundo punto.

Y continúa: "A tal efecto, en los dos próximos encuentros a disputar por el Club Atlético de Madrid, SAD en sus instalaciones deportivas, se deberá cerrar el acceso al público en dicha zona, que quedará debidamente acotada, no pudiéndose reubicar a los espectadores que, en su caso, pudieran venir ocupando las mismas con carácter habitual. Además, durante la celebración de los partidos que abarca la sanción de cierre parcial, la zona clausurada deberá mostrar un mensaje visible de condena a los actos y conductas violentas, racistas, xenófobas e intolerantes en el fútbol y apoyo al juego limpio".

El Atlético de Madrid, tras conocer esta sanción, recurrirá la misma. Según ha podido saber Relevo, en el club rojiblanco sorprende la forma de comunicarlo, ya que en una situación así esperaban un expediente. El club tiene 10 días para recurrir y el Getafe, en una situación similar, lo hizo y el comité de apelación le levantó la sanción.

En el seno del club rojiblanco creen que han colaborado de manera activa con todos, desde el primer momento con los anuncios por megafonía, con los mensajes en redes sociales y con la policía para identificar a la persona que realizó los gritos. El club avisó que suspenderá de manera cautelar e indefinida al socio hasta que el juez dicte sentencia sobre su situación.