Cristiano Ronaldo estuvo en Barcelona

El Real Madrid sale a jugar los partidos contra el Barça como si fuese un día más, como si su máximo rival jamás hubiera pagado al vicepresidente de los árbitros, como si Laporta tuviera detalles con Florentino, como si la directiva culé les apoyase en la causa racista contra Vinicius. Pero este año es distinto. El Madrid juega con el mejor futbolista del mundo. Bellingham devolvió a Barcelona los goles y el instinto de Cristiano Ronaldo.

El Barça, dispuesto siempre a ponerle la zancadilla al Madrid, desenvolvió cada regalo de los blancos. Gracias a un Joao Félix espléndido y al ritmo de su centro del campo: con el dinamismo de Gavi y Fermín, más la calma lujosa de Gundogan. Así, el equipo catalán se puso por delante casi hasta el final. Cuando Camavinga comenzó a dominar el choque y Bellingham agarró la historia y la partió por la mitad.

El Real Madrid es el equipo de la Liga que más goles encaja en los primeros quince minutos de juego. Contra el Barça, más entregados aún a su TOC. No esperaron ni al minuto diez. En el seis, un corte de Tchouameni que se acabó convirtiendo en una pared con Gundogan, y otro de Alaba que se tradujo en un pase de gol al alemán.

Ancelotti no ha logrado corregir esta tara de su equipo, y ya es demasiado tarde. El Madrid ha perdido puntos muy valiosos por no salir activado a los encuentros. Es culpa del entrenador. Un tipo tan tranquilo, tan elegante, que sus futbolistas salen al verde con demasiada relajación.

Es el mejor futbolista del mundo. Por muchas razones. Lleva 13 goles y tres asistencias en el mes de octubre, y con el número '5' a sus espaldas. Dicen que juega de centrocampista pero hace de todo. Además de ser el pichichi de la Liga, marca los goles que suman puntos, y cada día más bonitos.

En el Camp Nou rescató al Real Madrid con un derechazo sensacional desde fuera del área. Se inventó un gol de otro partido. Pero sólo era un aviso. Él volvió a ganar el encuentro con otro tanto muy suyo: el del cazador. El equipo blanco eligió bien quién sería su estrella este verano. Quien acierta con quién casarse ya no tiene que acertar más.

El mejor futbolista del Barça en el Clásico. Impulsó a un centro del campo superior en la primera mitad, con un notable Fermín a su lado, y siguió mordiendo hasta el último segundo. Los de Xavi se fueron apagando con la entrada de Oriol Romeu y la desaparición de Joao Félix en el segundo acto.

Gavi miró a la cara a Tchouameni, Kroos y Fede Valverde, pero fue Bellingham el que se acabó imponiendo. El centrocampista del Barça ya ocupa en el cuadro catalán la importancia que se pensaba para Pedri.

Siempre en la foto. Viene de marcarse un gol en propia en Sevilla y contra el Barça no fue capaz de despejar un balón que amargó la tarde a todo el madridismo. Lleva tiempo sin estar a su nivel, entre lesión y lesión, y el Madrid lo sufre. Alaba condenó a los blancos en el primer tiempo del Clásico.

El austriaco es una pieza clave para Ancelotti por su personalidad y su jerarquía con balón. Sin embargo, no convencen sus actuaciones defensivas como jefe de la defensa. Mientras, Nacho espera en el banquillo, sabedor de que Alaba es indiscutible para su entrenador.