ATLÉTICO DE MADRID

Detrás del acuerdo Nike-Atlético: un año sin filtraciones, a punto de caerse, el papel del Liverpool... y nueva equipación en el Mundial

Mientras la negociación entre Barça y Nike se aireaba a cada detalle, la operación con el Atlético fue secreta... y muy dura.

Captura de imagen de la presentación del acuerdo entre el Atlético de Madrid y Nike./ATLÉTICO DE MADRID
Captura de imagen de la presentación del acuerdo entre el Atlético de Madrid y Nike. ATLÉTICO DE MADRID
Sergio Fernández

Sergio Fernández

Cuando Nike y el Atlético de Madrid hicieron pública la renovación de su acuerdo no se venía hablando de ello en todas las redacciones y tertulias de España. Al menos no al nivel de otras operaciones de este estilo. Hasta hace pocas semanas, quien más quien menos podía haber oído campanas, pero sin saber dónde. Mientras el acuerdo con el Barcelona se iba cacareando minuto a minuto, se caía, se retomaba, se iban a los juzgados, volvían... durante todo el año pasado el club rojiblanco y la multinacional estadounidense negociaban en secreto un acuerdo que coloca al equipo madrileño en el tratamiento de "grandes clubes" del mundo. Y no son tantos...

No ha sido fácil para Miguel Ángel Gil Marín, Óscar Mayo y el resto de su equipo. Para empezar no es cierto que el anterior contrato finalizase en 2026, sino bastante más tarde. Es decir: Nike no tenía ninguna urgencia por renovar y, por lo tanto, partía a priori con algo más de fuerza negociadora.

A lo largo del proceso estuvieron a punto de cancelar el acuerdo en varias fases, y otras grandes marcas del mercado se interesaron por el Atlético de Madrid, con propuestas muy interesantes. De hecho, en un punto en concreto de los últimos meses, todo parecía indicar que la renovación no iba a producirse.

¿Qué cambio? Pues entre otras cosas el hecho de que el Liverpool pasase a Adidas conllevó un cambio de actitud enorme por parte de la marca norteamericana. El cariño que el Atlético de Madrid demandaba de parte de su patrocinador, se materializó de forma muy evidente. No es que hayan "heredado" el status que tenía el Liverpool, pero sí parece muy evidente que la empresa de Portland prefirió reforzar su vínculo con los rojiblancos, a salir al mercado en busca de otro gran club que cumpliera peor sus expectativas.

No han trascendido los datos de la operación pero el paralelismo es inevitable: el Atlético de Madrid va a percibir en torno a 30 millones de euros al año (más incluso, en función de algunas variables), una cifra muy similar a los 35 que percibía el Liverpool según datos de Football Benchmark.

"Una relación duradera y exitosa que se iniciaba en 2001, cuando Nike se convirtió en patrocinador técnico del club y comenzó a diseñar nuestras equipaciones, con el compromiso de aportar innovación, creatividad y calidad. En este nuevo acuerdo se refuerza aún más la apuesta de Nike por nuestros equipos masculinos y femeninos", dice el comunicado del Atlético de Madrid. Muy importante en el acuerdo, de nuevo, la parte del equipo femenino, que al igual que con el Barcelona, cumple uno de los objetivos globales a nivel de comunicación de Nike con el deporte femenino.

Decisión en los diseños... y estreno en el Mundialito

Dentro del tratamiento que tendrá el Atlético de Madrid de "gran club", está la participación en el diseño de equipaciones (todavía más que hasta ahora) y en la entrada en el grupo de los grandes diseñadores con los que trabaja Nike. De hecho el status no se va a hacer esperar y ya este verano, en el Mundialito de clubes de FIFA en Estados Unidos, el club madrileño estrenará una nueva equipación.

La primera, como siempre, será muy respetuosa con la historia del Atlético, pero fuentes conocedoras del proceso confirman a Relevo que las otras dos van a dejar bien a las claras el cambio. "Con el horizonte inminente de nuestra participación este verano en la primera edición del Mundial de Clubes en Estados Unidos o la próxima inauguración del proyecto de la Ciudad del Deporte", deslizaba el comunicado ayer.