Los 79 días en los que el Barça perdió la cabeza... hasta recuperarla: "Hay que saber sufrir"
Con tres puntos trabajados ante el Rayo, los de Hansi Flick vuelven a hacerse con el liderato a falta de 14 jornadas para el final.

El Lluís Companys celebró el pitido final con los mismos decibelios con los que canta un gol. Y no fue para menos. El Barça volvió a colocarse en lo más alto de la clasificación 79 días después. Se descolgó de la primera posición de la tabla el día que festejaba el 125 aniversario, contra Las Palmas, y las derrotas contra Leganés y Atlético de Madrid infundaron la 'maldición' de no saber ganar con el nuevo himno y ante la presencia de Cat, la mascota. Más de dos meses después, y a falta de 14 jornadas del final, el Barça vuelve a mirar a sus perseguidores por el retrovisor. Queda un mundo.
"Hemos jugado como un equipo, ha sido un partido duro, estamos muy contentos con los tres puntos", reflexionó Hansi Flick en rueda de prensa. La sensación en el vestuario era de alivio. "No hemos jugado nuestro mejor partido, pero es un partido que tienes que ganar", valoró Alejandro Balde, de las notas más positivas en clave blaugrana. Por Montjuïc pasó un Rayo Vallecano que le puso las cosas muy complicadas al Barça y cerca estuvo de rascar algún punto.
Los de Iñigo Pérez estuvieron peleones y no permitieron que el juego de Flick acabara de fluir. Más que demérito del Barça, fue mérito del Rayo. Los tres puntos dejaron varias conclusiones. En primer lugar, que el equipo supo defender el área pero que a Pedri le faltaron socios para congelar el partido. En segundo, que Hansi ya tiene un once decidido a día de hoy -y que es inflexible con el código interno, bien lo sabe Koundé-. Y en tercero, que el Barça está cerca de cumplir el objetivo de mínimos: llegar a la primavera optando a todos los títulos... y con la Supercopa en las vitrinas.
El Pedri más maratoniano busca socios
"Hay que saber sufrir", comentaba Balde aún en caliente. Iñigo Martínez, impecable al corte y en los duelos, fue la principal baza culer para defender el área. También Eric cuando entró. El Rayo de Iñigo Pérez tiene claro como proyectarse y el Barça no siempre logró maniatarle las bandas. Para Flick, "uno de los mejores equipos" a los que se han enfrentado este curso. Pedri fue creciendo a medida que pasaron los minutos, pero faltaron argumentos colectivos para aletargar el encuentro y dejarlo morir. Según la TDT de Catalunya Ràdio, corrió 13 kilómetros por 9,5 de media del equipo. Fue su segunda marca más alta de esta campaña.
El canario ya ha disputado esta temporada más minutos que en la campaña anterior. Cuando al Barça le aparecen interrogantes con la posesión, siempre tiene la respuesta. Flick insistió en colocarle cerca a De Jong. El neerlandés ha sido titular en cuatro de los últimos cinco encuentros y, además, ante el Alavés entró al descanso por Marc Casadó. En algún momento del partido el Lluís Companys se impacientó con las pérdidas del capitán, pero salió mayormente aplaudido. En uno de los contextos más exigentes en los que se ha encontrado, no acabó de dar el golpe sobre la mesa. Pesa sobre su espalda la irremediable sensación, debido a su situación contractual, de que cada partido es un examen para él.
Marc Casadó, como Dani Olmo, entró a calentar al descanso en lo que parecía un cambio inminente. Se quedó en la banda hasta el minuto 88. "No ha hecho nada mal. También hablo con él. De momento, las cosas son así. Frenkie jugó muy bien, tiene muy buen nivel. Pasa por un buen momento. Las cosas son así. Todos tienen un trabajo que hacer", expuso Flick. Por delante, ante la sanción de Fermín, Gavi volvió a ser titular. Olmo entró para el tramo final y dejó buenos detalles. En la mediapunta no hay nada cerrado, aunque Flick va con pies de plomo con el egarense.
Animó Flick en la rueda de prensa a que todos los futbolistas estén conectados hasta el final de temporada. A un mes de cerrar el invierno, el Barça apunta a llegar a la primavera vivo en todas las competiciones y con un título ganado. También con la sensación de que a medida que han ido pasando las jornadas ha ido ampliando el fondo de armario. Y todo sin tener que acudir al mercado de invierno. "Ser líderes ahora no cambia nada si no seguimos luchando hasta el final", avisó Flick.