FC BARCELONA

La doble cara de la moneda con Ansu Fati: doblete y sustituido

El canterano solo ha disputado los 90 minutos una vez en toda LaLiga. Suma nueve goles y cuatro asistencias esta temporada.

Ansu Fati celebrando un gol ante el Mallorca. /GETTY
Ansu Fati celebrando un gol ante el Mallorca. GETTY
Albert Blaya

Albert Blaya

En Ansu Fati convergen dos realidades. Ambas parecen negar una parte de la contraria, aunque las dos son verdad y perfilan al futbolista y a su nivel actual. El canterano del FC Barcelona suma, a falta de una jornada, nueve goles y cuatro asistencias en 44 partidos disputados este curso. Pero solo en dos de estos 44 encuentros ha sumado los 90 minutos: ante el Viktoria Pilsen cuando el Barça ya estaba eliminado de la Champions League y en el 1-0 ante el Getafe en el Camp Nou.

La temporada 2022/2023 de Fati ha sido la primera desde aquel mes de octubre de 2020 en la que Ansu no ha tenido lesiones. Solo se ha perdido dos partidos por un pequeño golpe en la rodilla, nada comparado con los 28 del pasado curso. Y aún sin lesiones, Fati ha sido la última opción para Xavi en el ataque: Lewandowski, Raphinha, Dembélé y Ferran han estado por delante suyo en cuanto a minutos. ¿Qué deja su doblete ante el Mallorca?

Los dos goles de Ansu abren nuevas preguntas. El primero fue fruto de una gran jugada entre Busquets, Lewy y Gavi, pero en el segundo sí se vio al Ansu pretérito; buena lectura para atacar la espalda de su par y una definición certera, con ese disparo seco que antes era su firma. Pero pese al doblete, Ansu ha chocado contra la otra realidad. Cero de tres en regates y ningún duelo vencido de los cuagtro disputados, dejando a la superfície el gran problema de este año para Fati: la incapacidad para ganar duelos y mostrar esa agilidad en el gesto que antes le permitía generar ventajas lejos de la portería.

Son 13 goles producidos en un año en el que apenas ha sonreído, siendo la última opción en ataque y con mucha rumorología a su alrededor. Los números no mienten y muestran el impacto del canterano, pero también señalan que, aún siendo buenos, no le han valido para ganarse más minutos. Y lo que demuestra esta coyuntura es que el número ha sido solo un complemento a un juego mucho menos atractivo que el Ansu pre lesión: sin esa chispa para regatear ni esa agilidad gestual para superar a su par, el jugador no ha sido tan atractivo, aunque sus cifras muestren un buen suplente.

Desde el 20 de octubre hasta el 1 de abril: del gol ante el Villarreal al que le marcó al Elche. En todo este lapso de tiempo Ansu no logró registrar ningún tanto ni ninguna asistencia, y es que de sus 13 participaciones, cuatro han tenido lugar en dos jornadas: en la segunda ante la Real Sociedad y en la última ante el Mallorca. No ha encontrado consistencia y sus cifras son más bonitas de lo que han sido las sensaciones. Y en esta doble realidad, incontestable cada una, se ha forjado el curso 22/23 de Ansu. El siguiente paso para Fati y el Barça es saber qué esperan cada uno del otro, poner en común sus aspiraciones y ambiciones y ver si van en el mismo camino. Ni el Barça puede permitir que Ansu sea su último atacante ni el canterano quedar reducido a ese rol.