Youssef En-Nesyri y una charla que viró su temporada y la del Sevilla

La temporada de Youssef En-Nesyri tiene dos partes bien diferenciadas. La primera, con un bajo rendimiento en consonancia con el mal momento del Sevilla; la segunda, a partir del Mundial y tras la buena actuación de Marruecos, con unos guarismos que lo acercan a su mejor versión. Pero el camino no fue sencillo e incluso su nombre estuvo en la rampa de salida en el mercado invernal. Una buena oferta del West Ham y esas dudas sobre su capacidad lo hicieron estar en el mercado, aunque fue el propio En-Nesyri quien cerrase la puerta tras una conversación con Jorge Sampaoli.

El delantero quiso saber de primera mano el pensamiento del entrenador argentino. Su nombre estaba entre los posibles descartes para abrir hueco en enero. De ahí que En-Nesyri llamase a la puerta del despacho de Sampaoli. "Míster, yo quiero quedarme", fueron las palabras del marroquí, que quiso zanjar así cualquier duda sobre su futuro. Ante esa declaración de intenciones poco podían hacer los técnicos, que sí conminaron al delantero a que recuperase la confianza para que dejase ver sus virtudes.

Más allá de razones deportivas -En-Nesyri sólo hubiera valorado una propuesta de un equipo superior al Sevilla- el delantero quería demostrar su compromiso con la entidad de Nervión. "Agradezco a todos los clubes que se han puesto en contacto con mi agente. Pero en estos momentos quiero tener sólo la cabeza en el Sevilla. No es un tema de dinero. Es un asunto deportivo, de querer ayudar al equipo en los peores momentos", expuso el delantero en un comunicado que hizo público su agencia de representación. Su presente estaba en el Sevilla y así lo indicó tanto de manera interna como externa.

La reacción de En-Nesyri fue inmediata. Un triplete ante el Linares en la Copa del Rey en el primer partido de 2023 ya dejó entrever que el delantero que había regresado del Mundial -previamente sólo había anotado dos dianas en la Champions y permanecía inédito en la Liga y en la Copa- era bien distinto. Luego llegarían los tantos ante Elche (2), Mallorca, Osasuna y Atlético de Madrid en LaLiga, más otro más ante el equipo navarro en la Copa del Rey y el que anotó frente al PSV en la Europa League.

Con esos registros, En-Nesyri pasó de la lista de descartes de Sampaoli a convertirse en el delantero de referencia. Aunque su perfil no se adaptaba del todo a lo que exigía el guión del entrenador argentino, su poderío aéreo y su potencia le hicieron ganarle la partida a Rafa Mir. Incluso el Sevilla cambió su patrón de juego para buscar más centros al área, donde En-Nesyri volvió a mostrar su capacidad de remate de primeras. Además su trabajo defensivo, tanto en las coberturas a sus compañeros -Sampaoli le intentó corregir aspectos relacionados con la presión- como en las acciones a balón parado, le sumó un plus a su rendimiento.

Precisamente, todas estas cualidades también fueron valoradas por José Luis Mendilibar, que finalmente apostó por En-Nesyri como titular pese a que apenas había realizado dos entrenamientos con el equipo al haber estado concentrado con su selección. La respuesta del marroquí en el Nuevo Mirandilla fue como se esperaba, con un gol que sirvió para sentenciar el partido y que confirmaba que el delantero atraviesa ahora por otro periodo fértil. Todo viró con el Mundial y con aquella charla con Sampaoli que hizo recuperar la confianza en sí mismo a En-Nesyri.