Cuando el Espanyol pudo ir a la Champions como el Girona pero una decisión de Iturralde González lo evitó: "No se entiende… te hacen malpensar"

El Girona hizo historia al convertirse en el segundo equipo catalán en clasificarse para la Champions League, después del FC Barcelona. Liverpool, Arsenal, PSG, Inter de Milan… los de Míchel se han enfrentado contra algunos de los mejores de Europa en una temporada que se recordará para siempre en Montilivi. Pero mucho antes de que los gerundenses disputaran la mejor competición de clubes del mundo, cuando todavía no habían pisado la élite nacional y estaban a caballo entre Segunda B y Tercera, el Espanyol se quedó a las puertas de jugar la fase previa de la Liga de Campeones.

De hecho, lo mereció, pero una decisión de Iturralde González y su asistente, el alavés Roberto Díaz Pérez del Palomar, lo evitó. Era un 22 de mayo y corría la jornada 37, la penúltima de LaLiga 2004-05. En El Sadar, el Espanyol requería de un triunfo para depender de sí mismo en la última fecha para terminar entre los cuatro primeros.

Con 1-1 en el marcador, y tras una apertura al costado izquierdo, Maxi Rodríguez centró y Toni Velamazán anotó el 1-2 anticipándose a la defensa de Osasuna. Inexplicablemente, el linier levantó el banderín y el colegiado principal anuló el tanto, que era absolutamente legal, por fuera de juego del extremo argentino.

"No nos lo terminábamos de creer. Pese a que no había imágenes en directo, era muy claro que no era fuera de juego. Cuando lo vimos repetido, es que la indignación era brutal… no se entiende. Puedes entender que haya errores por márgenes pequeños, pero cuando era tan tan claro. Hay momentos en los que te hacen malpensar", comenta a Relevo Àngel Morales, que estaba lesionado y no jugó, pero vivió el partido desde el palco, pues Lotina hizo viajar a toda la plantilla a Pamplona dada la trascendencia de un choque que podía acercar mucho al Espanyol a la Champions, competición que a día de hoy todavía no ha pisado.

Tras el encuentro, Díaz Pérez del Palomar se disculpó, pero el daño ya estaba hecho. "Hicimos méritos para ganar, con varias ocasiones claras incluido el gol, que fue legal. Pero tuvimos mala suerte porque el linier se equivocó", reconoció Miguel Ángel Lotina, técnico blanquiazul en sala de prensa. El riojano reveló lo que le dijo el colegiado: "Me he acercado al asistente y le he preguntado por qué había decidido no dar por bueno el gol. Su respuesta ha sido contundente: 'Sí, posiblemente me he equivocado'".

Tras el encuentro, Iturralde estuvo hablando educadamente durante un buen rato en su vestuario con Toni Velamazán, defendiendo que su linier lo había visto claro. Un año después, cuando se volvió a cruzar con el futbolista perico en un encuentro ante el Villarreal, el colegiado vasco le reconoció que se había equivocado y le pidió disculpas, en un gesto que, según ha reconocido en distintas ocasiones el futbolista, le honra.

Volviendo a la 2004-05, el Espanyol ganó al Athletic Club en la última jornada y acabó LaLiga en quinta posición con 61 puntos, uno menos que el Betis, clasificado para la previa de la Champions. Con el VAR, los pericos habrían tenido ese privilegio. "Nos tocó a nosotros y tuvimos que conformarnos con entrar en la UEFA… y nos quedamos con la miel en los labios. Además, el gol lo había marcado Toni Velamazán, que no había demasiado protagonismo esa temporada y habría sido un premio para él", lo cierra Morales.

Cinco años después de aquel fatal error en El Sadar, la federación catalana de peñas del RCD Espanyol (FCPE) nombró persona "non grata" a Iturralde González y solicitó al CTA que no dirigiera nunca más un partido del conjunto perico a causa de "sus graves errores permanentes, siempre en contra de un determinado equipo, en este caso del Espanyol".

"La inexistente pena máxima señalada este miércoles en el estadio de La Romareda, la señalada en el Camp Nou en la primera vuelta del campeonato, la extraña expulsión del pasado año en Valencia a un jugador de nuestro club cuando el marcador era favorable, o la privación de entrar en la Champions League al anular un gol legal en Pamplona hace ya algunas temporadas", justificaron el comunicado de la FCPE, en 2010, sobre Iturralde González, que con su decisión evitó la primera y única clasificación del Espanyol para la Liga de Campeones y cuyo nombre, 20 años después, se sigue recordando en la grada del campo del Espanyol, especialmente cuando no gusta la actuación del árbitro.