Fede Valverde ya se va convenciendo de que puede ser el mejor lateral derecho del mundo... y le está gustando
El futbolista uruguayo fue clave en el triunfo del Real Madrid contra el Atleti, jugando prácticamente al 60% de su capacidad física.

Antes del derbi madrileño en Europa hubo un protagonista: Fede Valverde. Por la incógnita de si jugaría o no, aquejado de unos problemas musculares en su bíceps femoral. Fede terminó compitiendo contra el Atlético, y siendo decisivo para la victoria de los suyos, gracias a un encuentro completísimo del charrúa.
Por si había dudas, ya en el primer minuto de juego, Valverde se dio una carrera portentosa para demostrar que claro que estaba listo. Y a los 240 segundos del choque le regaló una asistencia fantástica a Rodrygo, que definió a la perfección delante de Jan Oblak. Después, un recital de sacrificio.
Acabó el duelo agotado y en la recta final fue sustituido por Lucas Vázquez, con una ovación atronadora de su público. A su capitán. Su estado físico inquietaba también al abandonar el estadio, pero las sensaciones 72 horas después de la batalla del Bernabéu son esperanzadoras.
Fede Valverde se siente listo para la vuelta en el Metropolitano, y no descarta jugar algunos minutos contra el Rayo Vallecano este domingo en Liga, aunque lo más normal es que Ancelotti le dé descanso de cara al compromiso del próximo miércoles en Champions. Con ello, respira el Madrid.
En el vestuario sienten que con Fede en el lateral son muy difíciles de vencer. Y para lo que resta de temporada apenas hay debate en su posición: desde el cuerpo técnico tienen claro que con Valverde en el carril son más fuertes, sin minusvalorar a Lucas Vázquez, pero piensan que el uruguayo es un cañón ahí.
"Valverde es el mejor lateral derecho del mundo". La frase, de estos últimos días, no viene ni de la afición ni de la prensa, llega desde uno de los departamentos que más sabe de fútbol dentro del Real Madrid. "Si Ancelotti le convenciera de jugar siempre ahí…", cuentan desde el seno del club merengue.
Y la noticia es que Fede cada vez está más convencido. No le disgusta para nada jugar en esa posición, a diferencia de sus partidos como extremo, donde lo sufría más. Valverde lo que quiere es jugar y ayudar al equipo, y ve que en su nueva demarcación, de lateral derecho, cada vez tiene más impacto y luce más.