El milagro del Girona enseña las primeras dudas del proyecto de la Superliga
Los de Míchel, que están luchando por el título de Liga, irían sólo a la Tercera División de la futura competición.

Este pasado jueves, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dio luz verde a la Superliga tras dictaminar que la UEFA y la FIFA ejercen un abuso de posición dominante y que su poder para impedir la creación de nuevas competiciones futbolísticas no es absoluto, algo que dio alas a los promotores de la Superliga, con Real Madrid y Barcelona a la cabeza.
Conocida la sentencia del TJUE, la Superliga comunicó cómo funcionaría y quienes participarían en este nuevo formato. En un inicio (abril de 2021) se habló de un formato cerrado y, ahora, estará formado por un total de 64 equipos divididos en tres divisiones y un sistema 'abierto'.
Es importante matizar que serán los propios clubes los que decidan si forman parte de la Superliga y que durante el primer año serán separados en función de criterios deportivos y de rendimiento. A partir de ahí, se llevarán a cabo ascensos y descensos, aunque mínimos.
Si se iniciara la propia Superliga durante la próxima temporada, sería un misterio los equipos que conformarían la competición. Sin embargo, el Girona o el Aston Villa serían dos de los principales perjudicados ya que en el caso de que consiguieran ganar el título nacional de Liga sólo podrían ingresar en la Tercera División de la Superliga, la Blue League.
Bajo el punto de vista de Bernd Reichart, CEO de la Superliga, todos los campeonatos europeos deberían tener las mismas oportunidades a la hora de competir en Europa. Por esta misma razón, el Girona entraría en la tercera liga europea a pesar de ganar la competición nacional. Para jugar con los equipos más grandes de Europa, los de Míchel necesitarían, como mínimo, dos años, ya que en cada Liga se consuman dos ascensos y descensos.
Eso sería justo lo contrario a lo que ocurre actualmente en la Champions League, donde los campeones de cada competición nacional (y en las liga más relevantes hasta cuatro o cinco equipos) puede pelear contra los mejores clubes del Viejo Continente. Por seguir con el mismo ejemplo, si el Girona o el Aston Villa ganan LaLiga o la Premier (o terminan en el top 4), la temporada que viene pueden pelear por la Champions League.
"Sería una oportunidad para seguir mejorando, tener la posibilidad de ir creciendo poco a poco. Evitamos que muchos clubes se quejen porque acceder a la Champions League es un premio envenenado porque no puedes consolidar tu proyecto", explicaba anoche el propio Reichart, en El Partidazo de COPE.