ATHLETIC CLUB

Iker Muniain, un "jeta regateador" con "ADN capitán del Athletic"

El rojiblanco superó en el derbi a Joseba Etxeberria y se convirtió en el tercer jugador con más partidos en la historia del Athletic. Joaquín Caparrós, De Marcos y Marcelino repasan su carrera.

Iker Muniain, un “jeta regateador” con “ADN capitán del Athletic”
Patxo De la Rica

Patxo De la Rica

El 30 de julio de 2009 no fue un día cualquier en la historia del Athletic. Un partido en San Mamés ante el Young Boys, de previa de Europa League, se convertiría en histórico. El debut de un niño de 16 años: Iker Muniain. Más de 13 años después, Iker superó en el derbi vasco a Joseba Etxeberria como el tercer jugador con más partidos en la historia rojiblanca, con 515. "Palabras mayores", dice Joaquín Caparrós, el técnico que le hizo debutar y que repasa su carrera en Relevo, junto a Marcelino y De Marcos, compañero desde el primer día, literalmente.

"Recuerdo la primera vez que le vi en un entrenamiento y no se me olvidará. Le había visto por el comedor y era pequeñito, poca cosa. Con 16 años y tan pequeño pensé 'a ver qué tal es este chaval'. Y en cuanto empezó el entrenamiento me sorprendió mucho ese descaro y esa jeta que tenía. Nos encaraba y nos regateaba a todos", recuerda De Marcos, que entonces también realizaba sus primeros entrenamientos en Lezama.

"Hasta en el rondo te dabas cuenta", dice Caparrós, que entrenó al Athletic entre el 2007 y 2011 y que también tuvo un flechazo con Iker. En cuanto el andaluz llegó al Athletic preguntó a los trabajadores del club por las principales promesas. Le hablaron de Iker y no dudó en hacerle entrenar con los profesionales. "Era distinto. Con mucho descaro, con una personalidad muy fuerte y con talento puro. Lo que teníamos que hacer entre todos era sacárselo, era una obligación y más en un club como el Athletic", recuerda Caparrós.

"Era distinto. Con mucho descaro, con una personalidad fuerte y con talento puro. Era una obligación sacarle todo eso"

Joaquín Caparrós Ex entrenador del Athletic

En aquella primera temporada, Iker lograría buena parte de los récords que todavía hoy ostenta: El mencionado debut ante el conjunto belga fue el del futbolista más joven en hacerlo con el Athletic Club desde Domingo Gómez-Acedo (1914, Campeonato Regional), con 16 años, 7 meses y 11 días. Unos días después se estrenó como goleador ante el mismo rival en el duelo de vuelta, con solo 16 años, 7 meses y 18 días, siendo el goleador más joven tras Gómez-Acedo.

Sus récords

  • Futbolista más joven (16 años y 254 días) en debutar con el Athletic Club en Primera División
  • Futbolista más joven (29 años y 7 meses) en llegar a los 500 partidos con el Athletic Club en todas las competiciones
  • Futbolista más joven (16 años, 7 meses y 11 días) en debutar con el Athletic Club desde Domingo Gómez-Acedo (1914)*
  • Futbolista más joven (16 años, 7 meses y 18 días) en marcar un gol con el Athletic Club desde Domingo Gómez-Acedo (1914)*
  • Jugador más joven (16 años, 9 meses y 15 días) de Primera División en marcar un gol (04-10-2009 vs Real Valladolid)
  • Actualmente es el segundo tras ser superado por Fabrice Olinga (16 años y 98 días)
  • Podría convertirse en el quinto jugador que alcanza los 400 partidos con el Athletic Club en LaLiga.

"Vaya que si recuerdo aquel partido", dice Caparrós al preguntarle por el primer gol de Muniain, remontando la eliminatoria ante el Young Boys. "Teníamos varios jugadores calentando y teníamos que ganar sí o sí. En ese momento decidí que era el jugador que necesitábamos. Tuvimos la suerte de que salió, no le pesó la responsabilidad y metió el gol que nos hizo clasificar a la siguiente ronda".

Poco después llegó su debut en Liga ante el Espanyol, en el que "se iba de todos, se giraba…". "Fue un espectáculo", rememora De Marcos. Muniain se convirtió ese día en el jugador más joven en debutar en la historia rojiblanca en LaLiga y el 4 de octubre del mismo año, se estrenó como goleador en el torneo doméstico anotando el 2-2 en el José Zorrilla ante el Valladolid. Otro hito, ya que en ese momento fue el goleador más joven de Primera División en hacerlo, con 16 años, 9 meses y 15 días (después le superaría Fabrice Olinga).

El Athletic tenía un diamante, pero había que manejarlo y, en ese sentido, Caparrós cree que fue clave la filosofía del Athletic y el gran vestuario que había. "Igual en otro club es más complicado porque son futbolistas de fuera que no conocen la cultura, pero allí le ayudaron mucho los Etxeberria, Pablo Orbaiz, Iraola, Amorebieta o Javi Martínez. Le llevaban en coche, le sacaban a comer y le ayudaron muchísimo en ese entrenamiento invisible".

Muniain anotó ante el Valladolid, en octubre de 2009, su primer gol en LaLiga. Archivo
Muniain anotó ante el Valladolid, en octubre de 2009, su primer gol en LaLiga. Archivo

En lo futbolístico, más allá de las charlas que los técnicos compartían con él, Joaquín recuerda los entrenamientos individualizados que realizaban con él en el gimnasio de Lezama, tallando la perla que sabían que tenían entre manos: "Es un elegido", dice el andaluz en varias ocasiones de la charla. No lo duda, es uno de esos jugadores que te encuentras "pocas veces en una carrera".

Los momentos duros

Los primeros años fueron de continuo crecimiento, sumando partidos y ayudando al Athletic en diferentes épocas, siendo clave en temporadas históricas como en la que llegaron a la final de la Europa League con Marcelo Bielsa o lograron la clasificación a la Champions League con Ernesto Valverde. Sin embargo, cuando más brillaba, llegaron los dos reveses más importantes de su carrera futbolística. Y no es casualidad que Joaquín, Óscar y Marcelino los recuerden como determinantes.

"Esos golpes le han hecho madurar. Se ha convertido en un capitán espectacular, sereno, que habla muy bien y que transmite"

Óscar de Marcos Compañero de Muniain

El 5 de abril de 2015, en un encuentro ante el Sevilla, se rompió el ligamento cruzado anterior en la rodilla izquierda. Dos años después, el 28 de septiembre de 2017, revivió la pesadilla. Esta vez el cruzado de la otra rodilla, en el descuento del choque ante el Zorya Luhansk, en Europa League. "Imagínate lo que serían esos números sin esas lesiones", es lo primero que le sale decir a Caparrós al respecto.

Pero después viene la reflexión. La de destacar "la fuerza voluntad que hay que tener para superar esas dos operaciones, que a otro futbolista le hubiesen dejado tocado". "Detrás de eso hay muchísimo trabajo y una mentalidad muy clara de que quería ser jugador importante del Athletic", analiza Caparrós. "Tiene mucho mérito salir de esas lesiones y ofrecer el máximo rendimiento, es un elemento de refuerzo añadido y que indica su gran valía profesional", reflexiona Marcelino, que coincidió con él en una época de "auténtica madurez".

"Cualquiera que le conoce puede darse cuenta del grandísimo corazón que hay dentro de un futbolista tan pequeño... Te atrapa"

Marcelino García Toral Ex entrenador del Athletic

De hecho, el asturiano también tardó poco en conocer a Iker. "En cuanto llegué a Bilbao, nos reunimos con él como capitán que era. Cuando llegas a un sitio y el capitán te dice que te van a ayudar en todo, que están ahí para lo que necesites y que tienen una predisposición total, es un gran apoyo. Fue muy importante para mí". Los abrazos que se daban en la banda indican esa cercanía que construyeron. "Cualquiera que le conoce puede darse cuenta del grandísimo corazón que hay dentro de un futbolista tan pequeño... Te atrapa".

De Marcos valora aquellos momentos en la misma línea y cree que "esos golpes le han hecho madurar" hasta convertirse en "un capitán espectacular, sereno, que habla muy bien y transmite mucho".

Un nuevo estilo de futbolista

Su compañero, y vecino de taquilla durante 14 temporadas, también destaca su capacidad para reciclarse como jugador. "Con los años ha ido mejorando mucho deportivamente a la hora de leer el juego. Cómo para, cómo tiene pausa, cómo ve muchos más desmarques. Antes regateaba más pero le costaba soltar el balón y ahora lee mucho mejor las fases, se asocia más, hace jugar al equipo".

MÉTRICAS POR PARTIDO

Hubo una decisión que evidenció ese cambio de estatus y de rol en el campo. El '10' del Athletic era De Marcos desde que Yeste lo dejase. Pero la retirada de Gurpegui lo cambió todo. Óscar, que ya se había reconvertido en lateral, no veía con malos ojos heredar el número '18' de una leyenda y gran amigo como 'Gurpe'; y a Iker le hacía ilusión llevar la 'sota' en su espalda. El cambio fue la confirmación de su 'mutación futbolística'.

Iker ha pasado de ser un regateador, a un pasador. De acelerar, a pausar. De romper líneas con conducciones, a superarlas con pases. "Eso es talento", dice Caparrós. "Ha evolucionado a nivel de madurez y de futbolista porque tiene ADN capitán del Athletic. Ha recogido todo eso y sabe lo que es ser el símbolo y ponerse brazalete".

"Con nosotros dio un rendimiento extraordinario (mayor asistente del LaLiga 2021-22 en el Athletic). Entendimos que era un jugador diferencial, que si estaba bien era muy importante para el equipo, capaz de asociarse en campo contrario y tener más influencia", explica Marcelino, su último entrenador antes de que llegara Valverde.

Una afirmación que corroboran los datos. Desde su debut, ha ido mejorando en el aspecto de lo pases, alcanzando el punto de mayor participación en 2011-12, pero casi igualando estos registros el año pasado, con 39,23 por partido y hasta los 30,14 en campo contrario, el segundo mayor registro de su carrera.

En las asistencias y en las ocasiones generadas, también Marcelino logró sacarle su mayor rendimiento, aunque en ese sentido la actual temporada está significando un paso atrás. Valverde comenzó utilizándole de interior, con más peso en la construcción de la jugada que en la finalización, y el '10' se ha ido disipando. De hecho, ahora ha perdido protagonismo en el once titular.

MÉTRICAS DE ACIERTO DE PASE

Aun así, sigue siendo clave en el vestuario. "Asume ese rol de responsabilidad, en el campo siempre queriendo el balón y fuera del campo siendo siempre positivo para sacar las cosas adelante", considera De Marcos, quien cree que "va a ser todavía más leyenda". "Si no tiene ninguna desgracia va a seguir superando récords en un club centenario y con futbolistas de la talla de Txetxu o de Iribar, son palabras mayores", valora el andaluz.

"Tiene muchísimo mérito haber llegado hasta aquí, pero es un chico joven, con solo 30 años y todavía se le supone una trayectoria larga. Empezó de muy niño en el Athletic y lo normal es que termine su carrera en el club. Y creo que todos quieren que sea así", dice Marcelino, aludiendo a esa leyenda de 'One Club Man'.

"Me consta que tuvo opción de salir y quiso seguir aquí", desvela Joaquín. Nadie sabe lo que sucederá en el futuro, pero la realidad es que Muniain es ya una leyenda del Athletic. "Levantar la Supercopa es la culminación de todo el trabajo de Lezama", dijo Muniain tras el título de 2021. Ahora, el sueño en Bilbao, nadie lo esconde, es verle levantando otro gran título como capitán.