"Impagos", "incumplimientos de contrato" y una desbandada provocan que el estadio del Espanyol cambie de nombre

El estadio del Espanyol dejará de llamarse oficialmente Stage Front Stadium, su actual nombre comercial, después de que el club catalán haya roto su acuerdo de naming right con la empresa norteamericana, según ha explicado la entidad catalana a través de un comunicado en el que ha anunciado que iniciaría "acciones legales contra Stage Front por impagos e incumplimiento de contrato".

El acuerdo se firmó hace algo más de un año, en marzo de 2023, y estaba previsto que se alargara durante cinco temporadas -hasta 2028-, en las cuales Cornellà-El Prat -o RCDE Stadium- se llamaría oficialmente Stage Front Stadium. De hecho, hay numerosos detalles en el interior de las instalaciones que recordaban este cambio de nombre. Sin ir más lejos, en la grada de ambos fondos se dibuja el nombre de Stage Front con sillas de color blanco entre las azules.

La firma del contrato se enmarcaba en el ambicioso proyecto de expansión por Europa de la empresa de ticketing americana, que se fundó hace más de 30 años y que tenía una amplia experiencia en el ámbito de los servicios deportivos en Estados Unidos, trabajando, además, junto a LaLiga en México y Estados Unidos. El acuerdo, por cierto, le reportaba al Espanyol alrededor de un millón de euros por temporada.

"La marca del Espanyol lleva años creando valor a nivel internacional. No miramos únicamente hacia Oriente, también hacia Occidente. Es el día uno de una nueva era. Nos habría gustado pronunciar este acuerdo en otro contexto deportivo. Pero el Espanyol es un club de Primera y este es un acuerdo de Primera", dijo Mao Ye, CEO del club, en la presentación del acuerdo con la empresa norteamericana el junio pasado. Un año después, todo ha cambiado.

"A pesar de los esfuerzos del club por colaborar con Stage Front en el crecimiento de su proyecto la falta de cumplimiento de las obligaciones contractuales por parte de Stage Front ha llevado a la decisión de finalizar el acuerdo y dar instrucciones a sus abogados para iniciar de inmediato acciones legales ante la jurisdicción civil con la interposición de una demanda civil reclamando el pago de las facturas debidas y los daños y perjuicios causados, por la terminación anticipada del contrato por incumplimiento", comunicó el Espanyol.

Todo ello, después de que el club advirtiera en 2024 que la empresa empezaba a tener problemas de tesorería y dificultades a nivel de proyecto en toda Europa, no solo con el Espanyol, con el cual han incumplido sus pactos y no había visos de encontrar una solución.

El Espanyol ha desvelado en su comunicado que el proyecto de expansión de la firma norteamericana se ha frenado en seco y que la empresa está en desbandada. "El club es conocedor que Stage Front está retirando la totalidad del personal responsable de la activación y seguimiento de los contratos que gestionan en Europa, así como también del cese de sus actividades con LaLiga", ha zanjado la entidad, una semana después de su regreso a Primera División.