VILLARREAL 1 - REAL MADRID 2

Las confesiones del vestuario y las imágenes explican la queja del Real Madrid: "El calentamiento ya fue difícil..."

Varios futbolistas de la primera plantilla merengue también se mostraron molestos con las pocas horas de descanso: "El club mira por nuestra salud, pero la otra parte...".

Jude Bellingham recupera fuerzas durante el Villarreal - Real Madrid./EP
Jude Bellingham recupera fuerzas durante el Villarreal - Real Madrid. EP
June Lavín

June Lavín

El Real Madrid soltó un aviso y Ancelotti, la bomba: "Si vuelve a pasar lo de hoy, no nos presentaríamos". El italiano, enfadado y molesto a partes iguales, amenazó con no presentarse a un partido si no se respetan las 72 horas de descanso para sus jugadores. Entre el pitido final del Euroderbi (miércoles a las 23:47) y el inicial del choque contra el Villarreal (sábado a las 18:30) pasaron algo más de 66 horas. Y el club blanco decidió plantarse: primero, y a través RMTV, aseguró buscar amparo en la FIFA si entre dos de sus partidos no transcurren 72 horas; y después, ya en rueda de prensa, Carletto fue más allá. "Nunca más. Es la última vez", dijo.

Ancelotti no fue el único. Tras la conclusión del encuentro, y visiblemente fatigados, Mbappé, autor de los dos goles de los blancos, y Lucas Vázquez, que disputó los 90 minutos, siguieron la línea de su técnico. El francés, que con su doblete se mete de lleno en la pelea por el Pichichi (20 dianas) y promete guerra a Lewandowski (21), habló ante las cámaras de Real Madrid Televisión: "Ha sido muy difícil... Teníamos que ganar, y lo sabíamos. Tenemos personalidad y ganas de jugar y de ganar. Hemos luchado hasta el final. Todo el mundo vio el partido contra el Atlético, fueron 120 minutos a mucha intensidad y emoción. Jugar dos días después es muy difícil, ya en el calentamiento lo fue... Sabemos por qué estamos aquí y tenemos que dar todos lo que tenemos".

También habló Lucas Vázquez, en su caso en zona mixta. El lateral diestro fue suplente en el Cívitas Metropolitano y completó los 90 minutos en La Cerámica. Del mismo modo, y siguiendo la misma línea que las palabras de Mbappé, aseguró: "Creemos que es una victoria muy importante después de acabar como acabamos el miércoles. Es otra demostración de que el equipo está a tope. Hemos llegado justos. Es normal. Lo ha dicho el club, la salud de los jugadores es lo primero. Ha pasado muy poco tiempo y hoy nos ha tocado apretar los dientes. Ojalá no tengamos que volver a jugar con tan pocas horas de descanso".

Lucas Vázquez habla sobre los horarios.

"Sí, claro. Lo ha dicho el míster y el club. Hay que velar por la salud de los futbolistas y esto no beneficia a nadie. Esperamos y queremos que no vuelva a suceder. Es difícil de explicar, porque el club mira por la salud de sus jugadores y ves que por otro lado no se hace nada por ayudar", añadió Lucas Vázquez en zona mixta, también molesto por no contar con las 72 horas de descanso que recomienda la FIFA. Ancelotti, en rueda de prensa, también mencionó las dos propuestas de cambio de horario realizadas por el club blanco... con dardo a LaLiga incluido: "Es la última vez que vamos a jugar un partido antes de 72 horas, nunca más. Hemos pedido a LaLiga dos veces cambiar el horario del partido y no ha pasado nada".

Bellingham completó los 90 minutos y finalizó el choque visiblemente cansado. EFE
Bellingham completó los 90 minutos y finalizó el choque visiblemente cansado. EFE

Courtois, que realizó nueve paradas frente al Villarreal y se erigió como uno de los futbolistas más destacado del choque junto a Kylian Mbappé, también se pronunció en Real Madrid Televisión: "Jugamos cuando tenemos que jugar y no queremos poner excusas. Me alegra decir que no perdimos ni empatamos por cansancio, pero no es normal hoy jugar a las 18:30". Las declaraciones del belga, sumadas a las del francés y a las de Lucas Vázquez, demuestran que lo del Real Madrid no es sólo una queja y va más allá.

Sin riesgos en el calentamiento y fundidos tras el pitido final

Durante el calentamiento, visiblemente cansados y fatigados, los once elegidos por Carlo Ancelotti para iniciar como titulares no asumieron ningún riesgo, conscientes del cansancio que la mayoría de ellos todavía arrastraban ("fue difícil", dijo Mbappé). Cuando el árbitro decretó el inicio del choque, el Madrid mostró una de sus versiones más conservadoras y, aunque logró remontar, lo hizo bajo mínimos. En la segunda parte fue todavía más evidente, con el conjunto madridista replegado, sin sufrir en exceso y ralentizando la circulación de balón. Solo Vinicius, que no fue titular y entró en el 61', aprovechándose de la condición de amonestado de Foyth, reclamó balones en profundidad y tiró desmarques.

Imagen de Bellingham durante el partido. REUTERS
Imagen de Bellingham durante el partido. REUTERS

Ya en los últimos instantes del partido, hasta Fede Valverde, después de un esfuerzo en forma de ayuda a Lucas Vázquez, tuvo que ser sustituido. El charrúa jugó los 120 minutos del duelo ante el Atlético de Madrid, anotó su penalti en la tanda y fue titular en La Cerámica. Eso sí, las cámaras le captaron de cuclillas en más de una ocasión, recuperando fuelle tras un esfuerzo titánico. En una situación similar se vio a Bellingham, sin apenas protagonismo ni obligaciones defensivas en la primera mitad contra el conjunto groguet.

Tras el pitido final, la estampa sobre el césped de La Cerámica lo dijo todo: los futbolistas del Real Madrid se fueron al suelo y, botella de agua en mano (o, en su defecto, bebida energética), aprovecharon la conclusión del envite para descansar y, acto seguido, saludar a los jugadores del Villarreal. Acompañados por miembros del staff técnico y del equipo médico, los blancos fueron los últimos en abandonar el terreno de juego. Y no es para menos...