Ancelotti jugó con fuego y se quemó con Rudiger: ¿y ahora qué?
La lesión del central alemán vuelve a poner en apuros a la defensa blanca. El sábado reciben al Atlético y el 11 viajan a Mánchester.
La lesión de Antonio Rüdiger vuelve a colocarle piedras en el camino a Carlo Ancelotti. El defensa, que tuvo que ser sustituido en la primera parte del duelo ante el Espanyol, sufre una lesión en el bíceps femoral de la pierna derecha. Pese a que el Real Madrid no habla de cuánto tiempo estará de baja, todo hace indicar que el alemán estará entre dos y tres semanas en el dique seco. O lo que es lo mismo, el central se perderá el trascendental partido del próximo sábado ante el Atlético de Madrid en el Bernabéu y la ida de dieciseisavos de final contra el Manchester City en Champions.
Segundo jugador con más minutos de la plantilla (2.906') solo por detrás de Fede Valverde (2.937'), la baja de Rüdiger supone un gran contratiempo para Ancelotti. Con Carvajal y Militao recuperándose de sus respectivas lesiones de cruzado, el italiano tendrá que hacer encaje de bolillos para tratar de reconstruir una defensa que está en horas bajas.
Como centrales puros, en este momento solo hay tres en la plantilla: David Alaba, Jesús Vallejo y Raúl Asencio. En las últimas semanas, Tchouaméni viene actuando también en esa posición, pero su rendimiento no está siendo del todo brillante, está dejando más dudas que certezas. Muestra de ello fue lo ocurrido en el último partido ante el Espanyol. Al francés se le vio superado y Roberto le ganó la espada con aparente facilidad.
Si la reconversión de Tchouaméni a central está levantando críticas, los elogios hacia Raúl Asencio no paran de crecer. El canterano de 21 años, que fue quien sustituyó a Rüdiger en Cornellá, es un seguro en defensa y son muchas las voces que le piden a Carletto que le dé más minutos al chaval. Demostrando que está preparado para torear en grandes plazas -fue titular ante el Liverpool en Anfield cuando apenas lleva dos titularidades con el primer equipo- la duda está en si Ancelotti recurrirá a él para estas duras semanas o si, por el contrario, preferirá confiar en un Alaba que acaba de volver tras más de un año de inactividad. Encomendarse a un jugador como él, recién salido de tanto tiempo en el dique seco, es tomar un importante riesgo.
Porque lo que es seguro, salvo sorpresa mayúscula, es que Tchouaméni seguirá siendo uno de los centrales titulares. El técnico blanco confía en él y no le moverá de la titularidad. Apostar porque su compañero sea el austríaco podría resultar arriesgado, teniendo en cuenta que su última titularidad data del mes de diciembre de 2023. Reapareció el 19 de enero ante Las Palmas y desde entonces ha jugado 26 minutos ante el Salzburgo, 22' ante el Valladolid y 8' ante el Brest.
Jacobo Ramón, la opción de la cantera
La opción en La Fábrica es Jacobo Ramón, de apenas 20 años y un físico privilegiado. El canterano blanco, piedra angular del Castilla de Raúl en defensa pese a la concatenación de lesiones que ha sufrido, se estrenó con el primer equipo hace escasos días y brilló, después, con el primer filial merengue. Se apuntó los dos tantos, ambos de cabeza, que permitieron a los blancos rascar un empate ante el Villarreal B.
Aunque parece complicado que sume minutos en el Tourmalet que le espera al Real Madrid en las próximas semanas, con un carrusel de partidos de Liga, Copa y Champions, existe la posibilidad de que se convierta en un recambio de garantías que aumente el abanico de alternativas y posibilite, entre otras cosas, dosificar a un Alaba al que todavía no se le puede exigir el máximo.
Sus últimas actuaciones con el Castilla, líder y uno de los capos del filial, sumadas a una carta de presentación impoluta con el primer equipo, hacen de Jacobo Ramón un central de gran progresión que, ahora, puede encontrarse ante una oportunidad única de mostrar sus condiciones y valía en una situación de necesidad extrema.
Sea cual sea la alternativa por la que apueste Ancelotti, reacio, por momentos, a recurrir a la cantera, lo cierto es que la defensa del Madrid vuelve a salir mal parada en uno de los momentos trascendentales del curso, con el derbi frente al Atlético de Madrid y la compleja eliminatoria de Champions ante el Manchester City en el horizonte. De nuevo, la figura de Ancelotti ha quedado en entredicho, pues el técnico italiano ha exprimido al máximo a su único central sano (Asencio no formaba parte de la ecuación a principios de temporada), ahora mermado por una lesión en el bíceps femoral que le mantendrá, sobre el papel, unos 20 días en el dique seco. Con LaLiga al rojo vivo y cada vez más apretada, una derrota contra los colchoneros alejaría a los blancos del liderato en la competición doméstica y caer en Mánchester, tierra hostil en las últimas campañas, dejaría a Carletto y los suyos sin margen de error, obligados a ganar, entonces, en el Bernabéu.