Así levantó Baraja a un vestuario tocado: una comida "para limpiar la cabeza" y su terapia positiva
En el vestuario se cataloga como "súper victoria" la conseguida en Vallecas.

El Valencia cierra la última semana de competición de 2023 tras sumar 4 puntos de 6 posibles en dos partidos que eran más que complicados: frente al FC Barcelona y en Vallecas. A ello se le suma que los che afrontaban estas dos jornadas tras recibir un 'mazazo' en Getafe y otro previamente en Girona. Ambos dolieron mucho y, más especialmente, ambos afectaron al vestuario, que quedó frustrado tras sumar 0 puntos cuando la sensación era de que merecían más.
¿Qué hizo ahí Rubén Baraja y su cuerpo técnico para levantar la moral? El Pipo aplicó una receta con 2 ingredientes que este medio ha podido conocer. La primera fue una terapia de relativización de la situación: Baraja y su cuerpo técnico sabían que sus jugadores estaban 'tocados' así que se dedicaron durante toda la semana a recordarles todo lo bueno que habían conseguido en las primeras jornadas de liga. Consciente el entrenador de que un año antes por estas fechas el equipo se cayó, quiso limpiar la mente de sus chicos y lanzarles mensajes positivos durante toda la semana.
De ahí viene el segundo ingrediente: la comida de equipo. El entrenador quiso que la comida de Navidad del Valencia se celebrara antes de jugar estas dos exigentes jornadas "para limpiar la cabeza", en palabras del propio cuerpo técnico. Este medio ya ha informado en repetidas ocasiones de que el ambiente en el vestuario che es sobresaliente y que los Pepelu, Gayà, Canós, Duro etc. han hecho un grupo que hace planes hasta fuera del verde. Evidentemente, las derrotas siempre tensan un poco el ambiente en general, de ahí que el cuerpo técnico quisiera que la comida se celebrara antes de ambas jornadas.
"Son chicos que se llevan genial entre ellos, el ambiente que hay dentro es espectacular", explican fuentes técnicas a Relevo. Curiosamente, la última vez que hubo cena de equipo desvelada por este medio, aunque en este caso fuera sin el cuerpo técnico y en un parón internacional, el Valencia también sumó 4 puntos de 6 posibles en los siguientes dos partidos. De modo que Baraja era consciente de que estas cosas siempre ayudan a limpiar la mente.
Una “súper victoria” para el vestuario
El triunfo en Vallecas ha recibido la etiqueta de "súper victoria" en el vestuario del Valencia. No solo por sumar 3 puntos más y acabar 2023 con 23, lejos de puestos de descenso, sino porque se consiguió de la manera soñada por Rubén Baraja y todo su staff.
El Valencia dejó la portería a 0 por primera vez lejos de Mestalla, chutó más entre los 3 palos que su rival y lo más importante: confirmó que Jesús Vázquez, Hugo Guillamón y Sergi Canós, como mínimo, tienen intención de dar ese paso adelante que les pidió Baraja hace algunas semanas. El cuerpo técnico ha acabado muy contento con los 3 y congratulado de los tantos de Hugo y Sergi, para que rompan esa especie de barrera mental que les ha impedido dar su mejor nivel.
Baraja llevaba semanas pidiéndoles ese paso al frente, pero nunca bajo la crítica, sino bajo el mensaje positivo de que creía en ellos. De hecho al término de una de las ruedas de prensa en las que El Pipo mencionaba a dichos jugadores, uno de ellos esgrimió a este medio lo siguiente: "Ha estado muy bien que hable así de nosotros". Un mensaje positivo que los jugadores han recogido y que les ha dado la confianza que necesitaban.