Lopetegui se queda sin defensa y el Sevilla busca alternativa
El crédito del vasco está bajo mínimos tras una nueva derrota en casa. Jorge Sampaoli y Rafa Benítez, entre las alternativas.
La continuidad de Julen Lopetegui en el Sevilla está más en entredicho que nunca. Monchi, el gran valedor del técnico en las últimas semanas, se ha quedado demasiado solo en su defensa y ya ni siquiera él puede garantizar su continuidad. De hecho, la cúpula de la entidad, de la que forma parte el de San Fernando, ya ha contactado con diversos entrenadores como Jorge Sampaoli, quien ya estuviese en el club de Nervión, o Rafa Benítez, entre otros, aunque todavía Lopetegui sigue siendo el entrenador del primer equipo para el entrenamiento que está programada para la mañana de este domingo.
La derrota ante el Atlético y las malas sensaciones que ha transmitido al equipo han provocado una reunión de urgencia nada más acabar el partido. La figura de Lopetegui está prácticamente amortizada en Nervión, pero así ha ocurrido otras veces también en fechas recientes, y la falta de un sustituto que convenza a todas las partes ha provocado su continuidad. Aunque ahora parece que será distinto. De hecho, Sampaoli aguarda en Brasil, donde estableció su residencia, una llamada del Sevilla. ¿El problema? Que el argentino no ve claro hacerse cargo ahora mismo del banquillo, con partidos cada tres días antes rivales como Borussia Dortmund o Athletic Club.
En una misma situación se han pronunciado otros entrenadores a los que ha contactado el Sevilla. Entre ellos también se encuentra Rafa Benítez, ahora mismo sin equipo, pero que tampoco tiene claro que el perfil de jugadores de la plantilla sevillista entre dentro de sus parámetros. Otros nombres como Marcelino o Javi Gracia también están sobre la mesa de Monchi, al que le hubiera gustado llegar con Lopetegui hasta el parón del Mundial antes de tomar una decisión.
Esta situación provoca que en el Sevilla le sigan dando vueltas al proyecto deportivo. Lopetegui tiene previsto dirigir el entrenamiento de este domingo, salvo que reciba una llamada de la entidad en las próximas horas. "Estoy triste, pero no débil", indicó el técnico en la sala de prensa nada más terminar el partido. El vasco no renuncia a seguir como entrenador, pese a que cada ya siente la espada de Damocles sobre su cabeza. El finiquito que habría que pagarle en caso de destitución es elevado, incluso mayor que si la decisión se hubiera tomado en junio cuando su continuidad también estuvo en el aire. Pero no es el principal problema para el Sevilla y sí encontrar al recambio adecuado que se quiera hacer cargo de una plantilla alicaída y sin rumbo.
En el Sevilla los teléfonos siguen abiertos a esta hora. Los contactos entre la cúpula dirigente son constantes, aunque ya nadie cree en Lopetegui, el técnico que sí metió al equipo tres años seguidos en la Liga de Campeones.