Los gritos en un partido de baloncesto que explican la relación de 'hermanos' entre Koundé y Tchouameni

Durante el Real Madrid-Barcelona dos hermanos se pondrán frente a frente. No comparten progenitores, pero Aurelién Tchouameni (24 años) y Jules Koundé (25) comparten una relación que va más allá de una simple amistad. Se conocieron en Burdeos, cuando ambos jugaban en el Girondins, y desde entonces son inseparables. Llamadas, viajes y vacaciones juntos, pero que no les restará ni un ápice de competitividad durante el Clásico.

Al contrario, como buenos hermanos, los dos internacionales franceses compiten entre ellos por todo. Su nivel de exigencia es total incluso cuando comparten entrenamientos. En Los Ángeles, donde han pasado juntos los últimos dos veranos, suelen preparar juntos la temporada y no faltan los piques en los partidillos o los concursos de faltas.

El mejor ejemplo de su relación se vio en un partido de baloncesto. A los dos les encanta tanto ver la NBA -se han dejado caer por varios estadios de la famosa liga norteamericana- y también jugar cuando pasan por Estados Unidos. En una pachanga organizada junto con amigos y conocidos el verano pasado, Jules y Aurelien compartían equipo. Empezaron perdiendo, algo que ambos odian, y terminaron gritándose delante de todos, recriminándose malas acciones. Esto sorprendió a algunos debido al carácter amistoso del encuentro. Sin embargo, esta 'pelea' les sirvió para motivarse: le dieron la vuelta al marcador y acabaron ganando.

Algo parecido sucedió durante otro partido, en este caso de fútbol, también en Los Ángeles. Lo que en un principio debía servir para pasar la tarde y recuperar sensaciones con el balón, acabó en un duelo entre uno y otro, cada uno en un equipo, por ganar el partido. Máxima intensidad que provocó que algún invitado se enfadase con ellos.

Esto no quita que, fuera del terreno de juego, uno adora al otro y viceversa. Esa mentalidad de intentar mejorar siempre, propia del deporte americano, la tienen ambos y les une más que cualquier otra cosa. Porque además de cariño, hay muchísimo respeto entre dos jugadores que han llegado a la élite y se han consagrado entre los mejores de sus respectivas posiciones. De ahí que el verano de 2022, en el que acabaron uno en el Real Madrid y otro en el Barcelona, resultó muy especial para los dos.

Y, aparte del fútbol, les unen otras aficiones. Por ejemplo, la ya citada NBA. O la moda, dejándose ver por desfiles de importantes firmas o vistiendo prendas de última tendencia. Kounde cuenta con su propia marca (Homies From Paris) y Aurélien le ha ayudado como embajador de la misma. Y es que no se puede decir que sean dos chicos sin inquietudes más allá del fútbol. El del Real Madrid aprende a tocar el piano de forma autodidacta mientras que el del Barcelona trabaja en su catalán, cada día mejor.

Una pareja que dejará su amistad a un lado en un Clásico clave en la lucha por LaLiga. Si los blancos ganan, dejarán el título visto para sentencia. Si los blaugranas asaltan el Bernabéu, pondrán picante a las últimas jornadas. Tchouameni y Koundé lucharán por conseguirlo, como en los partidos de baloncesto en LA.